Porsche presenta su nueva exposición especial «24 horas para la eternidad. LeMans»

Las 24 Horas de LeMans una de las competiciones más longevas y con más tradición que hay, siempre está en continuo crecimiento y a los que nos gusta esta competición, para el próximo verano estamos de enhorabuena. Porque no solo los LMP1 de Toyota y Audi les quitaran las pegatinas a los pobres GT´s en busca de la victoria, Porsche está decidida a entrar por la puerta grande, volver a donde años atrás dejó su impronta y lo está consiguiendo a base de esfuerzo y trabajo.

Pero para entender la «CARRERA» con mayúsculas, esas 24 horas de dedicación total al automovilismo, no simplemente hay que ver los coches pasar. Hay una historia, de éxitos y fracasos, de risas y llantos, de héroes y villanos y Porsche para los menos entendidos en ella, ha decidido organizar en su museo una muestra especial titulada «24 horas para la eternidad. LeMans». Solo este título ya me evoca una amplia sonrisa recordando las anteriores ediciones. ¿Os lo vais a perder?

Un evento de este calibre, con más de 250.000 seguidores sólo en los alrededores, se convierte en un lugar de culto para el espectador ansioso de que su marca, equipo o piloto ganen la competición. Es muy importante hacer afición, darles algo que les motive, que les invite a reflexionar y que les llene de orgullo, por eso siempre hay que tener un lugar, algo dedicado a LeMans, como la nueva exposición especial de Porsche.

La exposición comenzará el 26 de marzo y tendrá su fin el 13 de julio de este año donde todo el museo se transformará en un circuito de carreras, con tramos de la recta de Hunaudiérs para guiar a los visitantes por el museo y dará comienzo con un paseo por la historia de Porsche en LeMans, sus victorias y su fuerte apuesta en su vuelta a lo más alto de la escala automovilística.

Viajas hasta 1951, año en el que Porsche comenzó su andadura donde murales y fotos a tamaño real te darán la bienvenida, y te guiarán adentrándote en su universo hacia más de 20 coches de las diferentes épocas que irán apareciendo ante ti y te cuentan su andadura por esta mítica prueba, viendo por primera vez coches como el Porsche 908/2 Spyder cola larga de 1969, un 911 T/R de 1971, el 911 3.0 RSR de 1974, el 935 de 1979, el 911 GT2 Le Mans, el 962 GT Dauer Le Mans de 1994 y el WSC LMP1 de 1998.

Además también se podrá ver y sentir el todopoderoso Porsche 936, vencedor en 1976, 1977 y 1981 que con sus 360km/h  es el vehículo más rápido que ha pasado por la recta de Mulsanne y concedió a sus pilotos, Jacky Ickx y Derek Bell, con 14 vueltas de ventaja, su sexta victoria absoluta. Aunque no todas las joyas son coches, también podrás ver diferentes partes mecánicas y su transición tecnológica, cascos, frenos y un artículo muy especial, el diario de Ferry Porsche completará las vivencias de Porsche en LeMans.

Pero como principal atracción no será nada de la historia pasada de Porsche si no su futuro, la exposición se centrará en el nuevo 919 Hybrid, su mayor apuesta tecnológica sobre el asfalto, que se tendrá que enfrentar a sus máximos rivales de la categoría Audi y Toyota. Una categoría algo espartana, pero que en vistas a futuro podemos estar tranquilos.

El Museo Porsche de Stuttgart-Zuffenhausen está abierto de martes a domingo, de 9:00 de la mañana a 18:00 de la tarde y solo el fin de semana de la prueba, abrirá por primera vez más de 24 horas seguidas, desde el sábado 14 de 09;00 hasta el domingo 15 de junio a las 6:00 p.m. Los visitantes y los aficionados podrán seguirla en vivo a través de varios monitores en el interior y en los alrededores del edificio del museo, como parte de un programa específico para el público. La entrada será gratuita en este fin de semana de competición, así que imaginaros la afluencia que habrá.

Aunque es normal, la atmósfera de LeMans es algo especial, algo mágico. Se convierte en un lugar de peregrinación para los aficionados que van como meros espectadores, o con sus caravanas a pasar un día entero de competición. Una carrera de 24 horas donde la importancia no recae en los segundos, si no en las vueltas. Donde el mayor peligro no está en el minuto y medio de una salida, si no en las condiciones climatologías y las largas horas en la oscuridad de la noche y donde vehículos capaces de rodar los 13,6 km. del circuito de La Sarthe y el 80% se va a fondo consiguiendo completar la vuelta en unos tres minutos y medio.

Una castigo para la mecánica, los pilotos, el equipo, la organización y los espectadores que tienen que sufrir el frío, la lluvia y todas las 24 horas de esta competición. Solo me queda decir, bendito sufrimiento. ¿O no?

Fuente – Porsche