Tras ver la imagen de este Cosmotrón seguro que te ha venido a la mente el coche que diseño Homer Simpson. Lo cierto es que entre ambos hay varias similitudes, puesto que han sido diseñados por personas que nada tiene que ver con el mundo del diseño automovilístico. La creación que hoy nos ocupa es obra del británico Paul Bacon, que creó un coche único utilizando como base un BMW Z3.
En 1998 Bacon, de 41 años, se hizo con un BMW Z3 con motor 2.8 de seis cilindros en línea. Era la primera piedra de su proyecto. El primer paso fue desmontar toda la carrocería, dejando únicamente el chasis. El siguiente paso fue colocar algunos refuerzos al chasis, para evitar torsiones que pudieran poner en peligro la integridad de la carrocería de poliestireno recubierta de fibra de vidrio que después se colocaría para crear el Cosmotrón.
El interior también está completamente personalizado, con cuero blanco y aluminio como elementos principales aunque lo que más llama la atención es la exagerada palanca de cambios. Todos los aditamentos del motor que sobresalen son meramente decorativos.
Fueron 18 meses de trabajo para alcanzar el resultado de las imágenes. Nos puede gustar o no, pero hay que reconocer que es un trabajo bien ejecutado, con un diseño que recuerda a cómo se veían los coches del segundo milenio en la década de los 60. Lo mejor de todo es que el Cosmotrón es plenamente funcional y además está matriculado y homologado para circular, al menos en Reino Unido. Hace aproximadamente un par de años Bacon le vendió el coche a su actual propietario, Martin Smith.
Fuente – CarScoops
Más información sobre este modelo
- Plazas 2
- Potencia 197 - 340 cv
- Consumo 7,1 - 8,1 l/100km
- Valoración 4,5