Desde la segunda semana de diciembre sabíamos que Volkswagen iba a presentar en el CES de Las Vegas 2016 un prototipo. Este concept car ya fue mostrado en un primer teaser y ahora ha sido desvelado, dando a conocer su nombre, Volkswagen Budd-e. La propia marca califica a este modelo como el microbus del siglo XXI, aunque teniendo en cuenta que su longitud es de 4,6 metros podríamos considerarlo como un nuevo monovolumen situado entre los Volkswagen Touran y Sharan, si bien su imagen está más cerca de la T6 por las formas, que recuerdan al Volkswagen Bulli concept del año 2011.
Como podemos imaginar por su nombre, el Volkswagen Budd-e es un modelo eléctrico y muy vanguardista, como todo buen concept car. Trata de anticiparnos cómo será la movilidad eléctrica de Volkswagen en 2019, por lo que en unos años podríamos ver un modelo de similares características, tanto técnicas como estéticas. Es el primer modelo de la marca alemana en utilizar la nueva plataforma modular MEB para vehículos eléctricos (Modular Electric Platform). La principal ventaja de la nueva plataforma es la ubicación estratégica de las baterías y componentes eléctricos para favorecer la habitabilidad.
Las características del Volkswagen Budd-e como vehículo eléctrico son muy interesantes, ya que promete 600 kilómetros de autonomía y una recarga rápida del 80% de la capacidad de las baterías en tan solo 15 minutos. Hay distintos tipos de carga para las baterías, entre ellos la inductiva. La batería de 101 kWh es plana y está ubicada en el piso del Volkswagen Budd-e, rebajando el centro de gravedad y optimizando el espacio interior. Hay un motor eléctrico en cada eje para propulsar el vehículo a una velocidad máxima de hasta 150 km/h.
El Volkswagen Budd-e tiene un diseño robusto debido a unas formas bastante cuadradas y a los cortos voladizos. Para acceder a la parte trasera del habitáculo solamente hay una puerta corredera en el lado derecho. Toda la iluminación del prototipo es LED y llaman la atención los pilotos traseros, que rodean prácticamente toda la luna posterior creando una especie de arco luminoso.
El interior resulta aún más futurista que el exterior. El salpicadero es radicalmente diferente a lo que se puede imaginar, con una serie de pantallas integradas en un mismo panel llamado Active Info Display que hace las veces de cuadro de mandos y consola central. Estas pantallas son ampliamente configurables y pueden manipularse de forma táctil, con control gestual y con control por voz.
La parte «Drive» es la principal del Active Info Display. Muestra la navegación con mapas 3D y otras informaciones de la conducción como la velocidad, la autonomía o los testigos indicadores del control de crucero. A la izquierda está la sección «Control», que muestra información sobre los sistemas de asistencia y el ordenador de abordo. La tercera parte se llama «Consume» y esta sería la pantalla del equipo multimedia, donde se muestra información de las reproducciones de audio, el calendario o el tiempo. Se sitúa a la derecha del todo.
El volante multifunción del Volkswagen Budd-e tampoco tiene botones. Es táctil y las funciones se activan por pulsaciones o deslizamientos en una zona más amplia que otros sistemas de este tipo, que requieren hacer los gestos en una superficie muy concreta. El control por gestos también estará muy presente en este prototipo para controlar diversas funciones como la apertura de la puerta corredera eléctrica.
Tener espejos retrovisores en un prototipo tan tecnológico sería algo arcaico, por ese motivo el Volkswagen Budd-e cuenta con la tecnología e-Mirror, que consiste en retrovisores digitales que muestran las imágenes captadas por cámaras.
El Volkswagen Budd-e también proporcionará información a través de un smartwatch o smartphone, que tendrá al usuario informado del estado del vehículo. Además, mediante unas pequeñas pegatinas transmisoras, el Budd-e puede hacer un inventario de los objetos que tenemos en el coche. Un paraguas con esa pegatina siempre será identificable por el vehículo y si hay previsión de lluvia, nos informará si el paraguas se encuentra en el coche o no.
También ofrecerá conectividad con el hogar, con la posibilidad de activar desde el interior del Budd-e las luces, el aire acondicionado o visualizar otras informaciones. Aquí no solo entra en juego la tecnología del Volkswagen Budd-e, sino lo que cada uno tenga en su casa. El coche contará también con un servicio de mensajería mediante el cual los mensajeros podrán entregar paquetes en el interior del vehículo mediante una llave digital.
Fuente – Volkswagen
si es real eso si es autonomia,tantas aliazan y no lo hacen en gran autonomia