El Koenigsegg Jesko fue la novedad más espectacular, y deportiva, que pudimos conocer en el pasado Salón del Automóvil de Ginebra. En sus pocos años de vida, la firma sueca ha logrado desbancar a los fabricantes de superdeportivos más asentados del mercado. Sus modelos pueden permitirse el lujo de mirar por encima del hombro a pesos pesados de Ferrari, Lamborghini o Mercedes-Benz.
Sin embargo, esta situación presenta una contrapartida negativa: el precio de sus modelos es prohibitivo. Además, debemos sumar que la producción es muy limitada, haciendo que se conviertan en auténticas piezas de coleccionista. Si a ambas variables añadimos la llegada de algún que otro one-off, la cotización se incrementa de forma exponencial. Esto, es lo que le sucede al exclusivo y caro Koenigsegg Jesko Red Cherry Edition.
Koenigsegg ha fabricado este one-off para Luxuryandexpensive
El Jesko está movido por un bloque gasolina biturbo 5.0 V8 con una potencia de 1.600 CV si bebe bioetanol 85. Pues bien, si hacemos algo de memoria, hace un tiempo os contamos que la producción del superdeportivo sueco estaba agotada. Koenigsegg anunció que sólo se fabricarían 125 unidades y que comenzarían a ser ensambladas en 2020. Por tanto, los más afortunados podrán disfrutar de él a partir de 2021. Aún así, si te has quedado con ganas de hacerte con uno, todavía tienes una oportunidad.
La única unidad disponible es el Koenigsegg Jesko Red Cherry Edition que ha encargado Luxuryandexpensive. Esta denominación corresponde a un concesionario de vehículos premium ubicado en Baesweiler (Alemania). La configuración elegida destaca por el tono Cherry de la carrocería y los numerosos elementos en fibra de carbono repartidos por la carrocería. Gracias a ellos, el peso final en báscula se queda en unos ridículos 1.320 kilos.
Las llantas de aleación son de fibra de carbono. En el eje anterior emplea unas de 20 pulgadas y en el trasero son de 21 pulgadas. En el interior, del que no hay imágenes oficiales, los asientos pueden estar tapizados en piel o Alcántara. Con todo, y siguiendo el mantra de su concesionario, su precio es caro. En concreto, su valoración, antes de impuestos, es de 2.350.000 euros por lo que puede superar los 3 millones de euros con mucha facilidad.
Fuente – Luxuryandexpensive
