Prueba Audi Q3 Sportback 35 TDI 150 CV S tronic

Audi presentaba hace ya algunos años una carrocería de estilo coupé de su modelo Q3, el SUV compacto de la firma de los cuatro aros. Como no podía ser de otra forma, su nombre es Audi Q3 Sportback. Ya nos hemos subido a él en alguna ocasión, pero viendo el peso enorme de esta variante en la marca, nos volvemos a poner al volante de este coche.

Para esta ocasión nos hemos decantado por el Audi Q3 Sportback 35 TDI S tronic, que traducido viene a significar que utiliza el motor diésel 2.0 TDI de 150 CV con cambio de doble embrague y tracción al tren delantero, una opción muy racional. Eso sí, el acabado es el tope de gama, el Black Line.

Pero antes de empezar, quería destacar que ya son muchos los fabricantes que están apostando por esta línea de SUV coupé en distintos tamaños. La propia Audi tiene los Q3 y Q5 Sportback además del Q8, BMW también tienen los X2, X4 y X6 y Mercedes no se queda atrás con los GLC y GLE Coupé. De hecho, incluso marcas generalistas están tratando esta misma receta, como el Renault Arkana, por ejemplo.

Elegancia y deportividad estética con el Audi Q3 Sportback Black Line

Esta unidad que probamos apuesta totalmente al negro. Equipamiento Black Line y color negro para la carrocería. Es cierto que esta tonalidad no permite apreciar muy bien las líneas del coche, pero aun así se ve realmente elegante y deportivo. A modo de recordatorio, el Black Line deriva del S line, añadiendo detalles en negro brillo como el contorno de la parrilla, bordes de las puertas, cristales traseros oscurecidos y llantas Audi Sport de 20 pulgadas.

Aunque donde más destaca el Q3 Sportback respecto a un Audi Q3 convencional es en el costado y en la retaguardia. Empezando por el lateral, se encuentra más cerca del suelo, pero además cuenta con unas líneas más marcadas y el sello de identidad, su suave caída del techo que le aporta ese toque coupé que tanto está gustando a los clientes.

Por su parte, la trasera se ve más baja por las formas del portón y la anchura que generan los pilotos de LED, las líneas horizontales y el marcado difusor inferior. Como se puede apreciar, la luneta está muy tumbada, quedando muy atractivo visualmente aunque restando visibilidad hacia atrás desde el puesto de conducción.

Sin lujo, pero con buenas calidades y terminaciones

Mientras tanto, en el habitáculo es calcado al Q3 convencional en cuanto a todo el salpicadero, calidades y tecnología se refiere. Tenemos un volante de buen tacto aunque demasiado achatado por su zona inferior, un cuadro de instrumentos digital de 10,25 pulgadas muy intuitivo y fácil de manejar, además del sistema MMI de 10,1 pulgadas.

Como ya sabéis, no termina de convencerme el uso del negro piano que vemos en el salpicadero, a la izquierda y a la derecha del volante porque se ensucia muy rápido. Pero hay cosas positivas, como el manejo del climatizador bizona independiente de la pantalla, con unos mandos que transmiten muchísima calidad al tocarlos.

Siguiendo por la consola central, tenemos un hueco con carga inalámbrica para el móvil, el selector del cambio S tronic y un par de posavasos en esta zona, no faltando tampoco un reposabrazos central ajustable con un compartimento interior de tamaño correcto.

La iluminación interior se puede configurar con 30 tonalidades diferentes, siendo posible ajustar también su intensidad.

Por último, y aunque en las zonas bajas del salpicadero se nota el uso de plásticos rígidos mientras que en las superiores son acolchados, el tacto de prácticamente todas las piezas y mandos transmite un alto nivel de calidad, como nos tiene acostumbrados Audi en prácticamente todos sus coches.

Bien para cuatro ocupantes, aunque menos espacio para la cabeza

Si hablamos de habitabilidad, las plazas delanteras tienen un buen acceso y los asientos son cómodos para personas de cualquier talla. Además, en esta unidad tienen ajustes eléctricos y calefacción, mientras que el volante también ofrece un amplio ajuste en altura y profundidad, por lo que podemos encontrar la postura idónea muy rápido.

Por su parte, las plazas traseras del Audi Q3 Sportback no son tan generosas en altura como en un Q3 normal, pero personas que midan menos de 1,85 no llegarán a tocar con la cabeza en el techo. Además, como se mantiene la misma distancia entre ejes hay suficiente espacio para las rodillas y podemos colocar bien los pies bajo el asiento delantero.

Lógicamente la plaza central es bastante más justa, quedando nuestra cabeza más cerca del techo, siendo la butaca y el respaldo más duro y estrecho, así como teniendo poco espacio para colocar los pies por el túnel de transmisión. Por cierto, tenemos reposabrazos central con dos posavasos y salidas de aire centrales sin ajuste de temperatura.

Un detalle a destacar es que la segunda fila de asientos también tiene ajustes. Es decir, podemos regular la inclinación del respaldo en varias posiciones y además deslizar longitudinalmente la banqueta en 13 centímetros para repartir el espacio interior y de maletero en función de las necesidades de cada trayecto. Sin duda, esta solución me parece un total acierto.

El maletero no pierde capacidad respecto al Q3 normal

Pese a que por sus formas exteriores podríamos pensar que pierde capacidad de carga, nada más lejos de la realidad. El Audi Q3 Sportback mantiene los 530 litros de capacidad de su carrocería hermana, lo que es un detalle muy positivo. Sólo pierde algo de volumen cuando tumbamos los asientos, pero muy poco.

Es destacable que las formas son muy aprovechables y que tenemos suelo a doble altura. Lo único que se puede echar en falta es un par de tiradores para plegar los asientos traseros desde aquí detrás, pero ni mucho menos es algo grave. Ni que decir tiene que el portón tiene apertura y cierre automatizado.

Motores disponibles en el Audi Q3 Sportback

Si cambiamos totalmente el plano y nos vamos al capó, allí podremos encontrar distintas mecánicas. En diésel están disponibles las variantes 35 TDI y 40 TDI, que utilizan el 2.0 diésel con potencias de 150 y 200 CV respectivamente.

Mientras, en gasolina aparecen las denominaciones 35 TFSI, 40 TFSI y 45 TFSI, con un 2.0 turbo de 150, 190 y 245 CV. A ellos hay que añadir el 45 TFSIe, una opción híbrida enchufable con 245 CV de potencia conjunta y una batería de 10,4 kWh para ofrecer una autonomía eléctrica de 50 kilómetros.

Para rematar este apartado, las versiones de 150 CV pueden tener cambio manual y doble embrague. En función de la motorización utilizará tracción delantera o el sistema de integral Quattro.

Al volante del Audi Q3 Sportback

Como decíamos al inicio de este artículo, para esta prueba nos hemos decantado por el 35 TDI, que es 2.0 turbodiésel. Desarrolla 150 CV entre 3.000 y 4.200 vueltas, así como un par motor de 360 Nm entre 1.600 y 2.750 revoluciones por minuto. Viene con tracción delantera y cambio S tronic de doble embrague y 7 marchas, declarando un 0 a 100 en 9,3 segundo y una velocidad máxima de 202 km/h. Su consumo mixto homologado es de 5,5 l/100 km.

Si normalmente no conduces de forma “deportiva” y haces bastantes kilómetros a lo largo del año, esta versión mecánica puede ser la ideal para este coche. Aunque es cierto que si vas a circular muy cargado y/o por carreteras con importantes desniveles, será mejor optar por el 40 TDI, que viene con 200 CV y tracción a las cuatro ruedas.

Es un motor que empuja lo suficiente para la conducción habitual de la mayoría, permitiendo moverse con cierta agilidad en ciudad y circunvalaciones, necesitando un poco más de margen en las recuperaciones a velocidades más altas. Pero pese a ello, creo que es la mecánica más interesante para este coche. Eso sí, como todo TDI, suena bastante y ese ruido llega al habitáculo en las aceleraciones.

Su asociación con la caja de cambios de doble embrague (S tronic) y 7 marchas es más que correcta. Es inteligente a la hora de pasar de una relación a otra, cambia con suficiente rapidez y a su vez es suave en esas transiciones. Tampoco se muestra brusca al maniobrar a muy baja velocidad, aunque no lógicamente ahí no llega a la suavidad de las cajas de convertidor.

Chasis

Donde el Audi Q3 Sportback no ha dejado de sorprenderme es en el apartado de chasis. Es cierto que llevamos la suspensión deportiva por ser el acabado Black Line y también unas llantas de 20 pulgadas con neumáticos bastante anchos (255/40). Pero lo cierto es que va francamente bien si incrementamos el ritmo.

Te permite practicar una conducción ágil sin problemas, siendo rápido en los cambios de apoyo y contando con una dirección bastante rápida, la cual apenas tiene 2 vueltas de volante entre topes. Además, tenemos cierta información del límite de agarre en el tren delantero en nuestras manos, algo que siempre es de agradecer al conducir rápido. Por cierto, al límite no cabecea excesivamente y ofrece un comportamiento muy neutro.

También muestra confianza y aplomo a altas velocidades, en autopistas. En ese sentido se siente cómodo y estable, aunque es cierto que si vamos muy rápido la rumorosidad en el interior es algo elevada, especialmente por el sonido del motor diésel.

Y aunque se siente ágil y firme en conducción dinámica, su suspensión no resulta dura o seca ante irregularidades bruscas. Obviamente no es tan confortable como un Audi A6, por ejemplo, pero el equilibrio en ese aspecto es muy bueno, como suele ser habitual en la firma de Ingolstadt. Y recuerdo que lleva neumáticos con un perfil muy bajo.

Consumo

Si te preguntas por el consumo, durante toda esta semana de pruebas se ha conformado con una media de 7,1 litros, practicando una conducción alegre en algunos momentos y también callejeando bastante. En autovía, a ritmos normales es fácil estar alrededor de los 5,7 litros, mientras que en ciudad suele rondar los 8,2 aproximadamente.

Conclusiones

Reconozco que no soy demasiado aficionado a los modelos SUV, pero este Audi Q3 Sportback me gusta tanto por estética, como por comportamiento y por su buena habitabilidad a pesar del estilo coupé de su carrocería. Si tuviera que comprarme un SUV compacto y tuviera suficiente poder adquisitivo, este modelo sería una de las principales opciones, junto al BMW X2.

Debo recalcar eso del poder adquisitivo, porque el Q3 Sportback parte de casi 44.000 euros en su versión más accesible. No es mucho más caro que un Q3 convencional a igualdad de equipamiento, pero si comparamos con las marcas generalistas sí es una cantidad muy elevada. Por cierto, el 35 TDI S tronic con el acabado Black Line arranca en más de 50.600 euros…

Equipamientos Audi Q3 Sportback

Advanced

• Retrovisores exteriores calefactables y con ajuste eléctrico
• Climatizador bizona
• Cuadro digital
• Audi Smartphone interfaz
• Control por voz
• Manos libres bluetooth
• Audi Pre sense front
• Sensores de aparcamiento traseros
• Regulador de velocidad
• Aviso de salida de carril
• Audi Drive Select
• Limitador de velocidad
• Dirección progresiva
• Llantas de aleación de 18 pulgadas
• Luces LED con intermitentes traseros dinámicos
• Spoiler de techo
• Reposabrazos central delantero
• Volante multifunción de tres radios
• Iluminación interior

S Line (añade a Advanced)

• Suspensión deportiva
• Llantas de aleación de 19 pulgadas
• Paragolpes S Line en contraste gris
• Asientos delanteros deportivos
• Banqueta trasera plus con apoyabrazos central trasero
• Revestimiento interior del techo en negro
• Salpicadero “Black Panel”
• Inserciones en aluminio mate oscuro
• Inserciones S line
• Pedales en acero inoxidable
• Volante multifunción achatado
• Paquete de luces ambiente

Black Line (Añade a S line)

• Audi pre sense basic
• Paquete Black Edition
• Llantas Audi Sport de 20 pulgadas
• Paquete Negro Plus
• Cristales oscurecidos

Precios Audi Q3 Sportback

Opinión del editor

• Valoración del editor
• Puntuación 4 estrellas
• Excelente

^€43.940 a ^€61.610

• 80%

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• Audi Q3 Sportback
• Reseña de: Diego Ávila
• Publicado el:
• Última modificación:

• Diseño exterior

  Editor: 95%
• Diseño habitáculo

  Editor: 85%
• Plazas delanteras

  Editor: 85%
• Plazas traseras

  Editor: 80%
• Maletero

  Editor: 80%
• Mecánica

  Editor: 80%
• Consumos

  Editor: 75%
• Confort

  Editor: 75%
• Precio

  Editor: 55%

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Galería Audi Q3 Sportback

Más información sobre este modelo

Audi Q3 Sportback

• Plazas 5
• Potencia 150 - 400 cv
• Consumo 1,4 - 9,6 l/100km
• Valoración 4,5