Prueba BMW Serie 2 Gran Coupé 218d M Sport 150 CV automático

BMW sigue tratando de tapar cada posible hueco del mercado. Hace algo más de año y medio lanzaba al mercado el BMW Serie 2 Gran Coupé, que no es ni más ni menos que una berlina del segmento C con tres volúmenes. Así, este producto se posiciona entre el Serie 1 -del que toma la plataforma- y el Serie 3.

De este modo, nos ponemos al volante de un BMW Serie 2 GC con una mecánica muy recomendable si vamos a recorrer muchos kilómetros anualmente. Se denomina 218d, y utiliza el motor diésel de 2.0 litros con 150 CV, asociándose a un cambio automático. Nuestra unidad también equipa el siempre llamativo acabado M Sport, que le pone ese toque deportivo al conjunto. ¿Comenzamos? ¡Por supuesto!

En la variedad está el gusto

Como decíamos, este Serie 2 GC hereda el chasis, mecánica y buena parte de la técnica del BMW Serie 1. Sin embargo, no es simplemente una carrocería alargada. Aunque similares, el frontal tiene su propia personalidad, pareciendo una mezcla del citado compacto y el lujoso BMW Serie 8.

Probablemente la parte más llamativa de la zona delantera es su enorme parrilla activa, que como venimos notando desde hace tiempo no gusta a todo el mundo por su gran tamaño. A los lados de estos dos riñones aparecen unos faros LED de generosas dimensiones y con una firma lumínica propia. El paragolpes muestra carácter y deportividad con los detalles específicos M Sport, naciendo de él unas nervaduras que continúan por el capó.

Mientras tanto, la vista lateral es elegante por la línea de su silueta y por la poca altura libre al suelo. Sí, hay que tener cuidado con los bordillos al aparcar en batería si no queremos dejarnos medio paragolpes en el intento. Además, las puertas no tienen marco superior, haciendo honor a esa denominación de Gran Coupé. Personalmente me gustan mucho estas llantas de cinco radios dobles bicolor.

Y aunque sobre gustos no hay nada escrito, la zona trasera es la que menos me convence. Se ve demasiado grande y alta por la forma de la tapa del maletero y el ligero spoiler añadido sobre la misma. El diseño de los pilotos LED es alargado y tiene un estilo que no termina de encajarme. Pero como digo, cuestión de gustos. Seguro que las dos salidas de escape circulares, bien marcadas en el difusor, encajan mejor con la mayoría del público.

Las dimensiones son 4.526 mm de longitud, 1.800 de anchura (sin espejos), 1.420 de altura y tiene una batalla de 2.670 mm.

Gran calidad y buena lógica en el interior del BMW Serie 2 Gran Coupé

Más me convence el habitáculo. Hace años BMW pecaba de hacer unos interiores sobrios y de materiales bastante mejorables. No es que ahora hayan integrado una revolución en diseño, pero la calidad percibida es muy alta; tanto que a mi modo de ver queda por encima de Mercedes y de Audi.

Y es que el tacto del volante, de los principales mandos, de la pantalla táctil y del propio salpicadero es realmente bueno. Muy bien por la marca bávara en ese sentido, han logrado situarse como la referencia entre las marcas premium.

Puede que visualmente no resulte excesivamente atractivo, pero su pantalla táctil horizontal cumple más que satisfactoriamente en todos los sentidos, pudiéndose manejar de forma sencilla con la ruleta y los botones de la consola central sin distracciones. Además, ahora permite conectar nuestro smartphone sin cables, mientras lo dejamos en la superficie de carga inalámbrica. Otro gran acierto.

Tal vez el cuadro de instrumentos sí esté un punto por debajo de las posibilidades que ofrecen los modelos de la competencia antes citada, como los A3 y Clase A. No tiene tanta personalización y el navegador que se ve entre medias no está del todo logrado.

Y para finalizar con este apartado, tenemos un climatizador bizona automático sencillo de manejar por sus teclas físicas (aunque estaría mejor tener ruletas para el ajuste de temperatura), un volante con mandos intuitivos y una sensación buena en todos los sentidos. Por cierto, estos asientos deportivos con eléctricos son un acierto tanto por diseño como por confort y ajustes.

No es la mejor opción para viajar cuatro adultos

En el apartado de habitabilidad hay que tener en cuenta que es un cuatro puertas, pero con cierto estilo coupé. Esto significa que vamos cerca del suelo, así que personas mayores o con poca agilidad tendrán que esforzarse para entrar y salir de las plazas delanteras.

Una vez dentro, vamos sentados bajitos, con una posición un tanto deportiva, pues las piernas se encuentran bastante estiradas. A mí eso me gusta, pero entiendo que no será cómodo para todos.

Más complicaciones hay en las plazas traseras, pues el acceso no es sencillo ya que tenemos el techo muy bajo y el paso de rueda posterior molesta. Hay que doblar más el tronco y tener cuidado para no golpear con la cadera y la cabeza.

Cuando ya estamos en el interior, tampoco hay demasiado espacio para la cabeza, es decir, si superamos el 1,80 de altura iremos un tanto encajonados. Para las piernas hay algo más de holgura, pero la sensación es de poca amplitud, y esto también viene dado porque la forma del techo y la poca superficie acristalada. Por supuesto, la plaza central no es precisamente práctica.

En estas plazas traseras hay dos tomas USB tipo C, salidas de aire centrales, bolsas en los respaldos delanteros, reposabrazos central y un pequeño compartimento en las puertas.

Maletero: en el punto intermedio

Mientras tanto, el maletero del BMW Serie 2 Gran Coupé cuenta con apertura eléctrica y, como en todos los cuatro puertas, la boca de carga no es tan generosa como en los cinco puertas. Esto nos limitará a la hora de cargar objetos grandes.

Respecto al volumen en sí, hablamos de 430 litros, que quedan justo entre medias de los 380 litros que cubica el Serie 1 y los 480 del Serie 3 berlina. Tenemos suelo a doble altura plegable para descubrir un segundo fondo, así como asientos traseros abatibles desde el propio maletero.

Lo que me parece un error en un coche de esta categoría es que queden chapa y tornillos a la vista en la parte superior del cofre.

¿Qué oferta de motores tiene el BMW Serie 2 Gran Coupé?

Pasando ya al apartado de mecánicas, este modelo cuenta con cinco opciones en su listado. En gasolina aparecen los 218i y M235i, con 140 y 306 CV respectivamente. Algo más variedad tenemos en diésel, con las denominaciones 216d, 218d y 220d, rindiendo 116, 150 y 190 CV respectivamente.

En la actualidad, y según el configurador, solo puede llevar cambio manual el menos potente de los gasolina, siendo el resto de “dos pedales” con transmisión por doble embrague o automáticos. Eso sí, me parece un poco “cutre” que BMW nos pida casi 200 euros más a estas alturas por las levas…

Datos y prestaciones del BMW 218d Gran Coupé

Como habíamos dicho al inicio, para esta prueba nos hemos decantado por la versión mecánica 2.0 diésel de 150 CV, que se conoce comercialmente como 218d. Es un cuatro cilindros turbodiésel que da su potencia máxima a 4.000 rpm, mientras que su par máximo de 350 Nm se ofrece entre 1.750 y 2.500 vueltas. Y sí, toda esta energía pasa al tren delantero…

De este modo, el BMW Serie 2 GC 218d homologa una aceleración de 0 a 100 en 8,5 segundos, una velocidad punta de 222 km/h y su consumo mixto homologado es de 5 litros a los 100, aunque, como siempre, variará alguna décima en función del equipamiento seleccionado. Y dicho todo lo anterior, pongámonos al volante.

Al volante del BMW Serie 2 GC

BMW históricamente se ha caracterizado por ofrecer un comportamiento muy deportivo en todos sus modelos. En los últimos años ese carácter tan dinámico se ha suavizado, más aún en estos coches compactos de tracción delantera. Pero, por suerte para la firma alemana, siguen siendo los que ofrecen un tacto más emocional a la hora de conducir, sólo seguidos bajo mi punto de vista por Mazda.

Estamos ante un compacto de cuatro puertas, con motor diésel, tracción delantera y cambio automático. ¿Se percibe deportividad? Pues sí, y no. Me explico. Este BMW Serie 2 Gran Coupé no puede igualar el tacto del Serie 2 Coupé (de dos puertas y propulsión trasera). Se siente más filtrado y, además apuesta algo más por el confort.

Aplomado y firme, además de bien equilibrado

De todos modos, sigue teniendo esa firmeza de suspensiones sin llegar a resultar seca, un buen tacto de dirección y mucha precisión en curva. Pero claro, no podemos esperar que un tracción delantera tenga ese picante único de los coches de propulsión, y menos con el sonido a diésel cuando lo llevamos más allá de las 2.500 vueltas.

Mientras tanto, por lo demás resulta un coche sencillo de conducir en todos los aspectos. La caja de cambios automática y el motor diésel se llevan muy bien, buscando siempre la eficiencia pero con un buen par motor desde abajo para recuperar con mucha solvencia. Prácticamente nunca será necesario ver la aguja digital por encima de las 2.500 rpm, pues entre ese régimen y las 2.000 hay suficiente empuje para la mayoría de situaciones.

A la hora de viajar es una delicia porque tiene un buen aplomo y confort, estando también bien aislado a nivel acústico, aunque las ventanillas sin marco superior dejan algún ruidito a alta velocidad. Claro, que ahí no lo podemos comparar con su hermano mayor, el Serie 3, que está a otro nivel. En cualquier caso, puedes llevar ritmos alegres por autopista y el coche se muestra siempre a gusto y con confianza.

Lógicamente esta suspensión deportiva del paquete M Sport no es la más indicada para callejear por poblaciones adoquinadas o con muchos resaltos, como tampoco lo es si conducimos habitualmente por carreteras demasiado rotas. Citaba antes que no es seca ni incómoda, y es así, pero ante este tipo de suelos el tarado firme de la amortiguación no es ideal.

Y con unos consumos envidiables

Lo mejor de todo es que con este motor tenemos una gran solvencia y muy bajos consumos. En autovía a ritmo legal esta BMW Serie 2 Gran Coupé 218d se conforma con unos 4,5 l/100 km, que es una cifra realmente buena. En ciudad sí sube, alrededor de los 6 o 6,5 dependiendo de la conducción y el tipo de ciudad, así como en carreteras reviradas si vamos a ritmo alegre.

De hecho, durante toda nuestra prueba, con prácticamente 600 kilómetros recorridos, el consumo medio total se ha situado en tan solo 5,2 l/100 km. Es un dato realmente bajo y por lo que será más que recomendable esta motorización si realizamos muchos kilómetros a lo largo del año, especialmente fuera de la ciudad. Y ahora, os dejo con los equipamientos de serie y precios.

Equipamientos BMW Serie 2 Gran Coupé

Acabado base

Llantas de 16 pulgadas
Tapicería de tela
Detalles interiores mate granulado
Climatizador
BMW Live Cockpit Professional
Volante deportivo de cuero multifunción
Control de crucero
Sensores de aparcamiento
Servicios ConnectedDrive
Connected Package Professional
Kit de reparación de pinchazos
Tornillos antirrobo para las llantas
Radio DAB
Alarma

Sport

Llantas de 17 pulgadas
Tapicería tela / Sensatec
Paquete de iluminación ambiental
Faros antinieblas de LED
Molduras exteriores en negro brillante
Asientos delanteros deportivos
Paragolpes y detalles exteriores específicos

Executive

Llantas de 17 pulgadas específicas
Cuero Dakota con perforación en negro
Molduras exteriores en aluminio satinado
Acabado específico para el exterior con toques más lujosos
Detalles e inserciones más elegantes en el habitáculo

M Sport

Llantas deportivas en 18 pulgadas
Paragolpes específicos
Volante M Sport de cuero
Asientos deportivos para conductor y acompañante
Techo tapizado en negro
Molduras exteriores en negro brillante
Dirección deportiva M
Suspensión deportiva M Sport
Paquete aerodinámico M

Precios BMW Serie 2 Gran Coupé

Versión	Motor	Cambio	Tracción	Precio
Versión	Motor	Cambio	Tracción	Precio
218i	1.5 gasolina tres cilindros 136 CV	Manual 6v	Delantera	37.449 €
218i	1.5 gasolina tres cilindros 136 CV	Steptronic doble embrague	Delantera	39.439 €
M235i	2.0 gasolina cuatro cilindros 306 CV	Automático	xDrive	62.450 €
216d	1.5 diésel tres cilindros 116 CV	Steptronic doble embrague	Delantera	39.234 €
218d	2.0 diésel cuatro cilindros 150 CV	Automático	Delantera	43.950 €
220d	2.0 diésel cuatro cilindros 190 CV	Automático	Delantera	49.350 €