Tata Motors es una de las firmas más importantes de la India y parte de Asia. El problema es que su suerte en Europa, aunque la han luchado mucho, no ha sido buena. La prueba está en que abandonaron nuestro continente por la puerta de atrás y sin hacer siquiera ruido. Con todo, sus modelos lo tenían muy complicado para gustar pues a su extrema sencillez técnica había que sumar que sus diseños no entraban por el ojo del público.
No en vano, hubo una denominación comercial que caló hondo entre el público rural. Nos referimos al Tata Safari, un todo terreno duro que gracias a sus cualidades off road se hizo un hueco en el mercado. Como ya os contamos, hace unos días, la actual generación ha estado en activo desde el año 1998 pero ya es historia. La marca acaba de presentar uno nuevo que nada tiene que ver más que por el hecho de mantener su denominación.
El nuevo Tata Safari deriva de la plataforma D8 de Land Rover
De entrada la imagen del Tata Safari 2021 da un salgo de gigante que lo acerca a rivales europeos. Cuenta con un poderoso frontal presidido por unos grupos ópticos divididos. La parrilla también es nueva y, salvando las distancias, se parece a la que montan los modelos de Land Rover. Su impronta se complementa con líneas sencillas y poco recargadas que le permiten ofrecer un habitáculo y maletero de gran capacidad.
La zaga es muy moderna, sobre todo por sus grupos ópticos Full LED y la firma diurna. Como curiosidad, las barras de techo aportan un diseño similar al que lucía la primera generación. En el habitáculo también han puesto gran empeño, sobre todo en aspectos como la calidad de materiales y tecnología. Esto podemos verlo en sus materiales o la llegada de una gran pantalla central táctil.
Como se puede apreciar, la evolución del Tata Safari es exponencial y deja a su predecesor a años luz. Pero además, bajo su piel tenemos cimientos nuevos que llegan de Land Rover. Nos referimos a que el equipo de ingeniería de la marca ha modificado la plataforma D8 de la casa inglesa. Ahora toma por nombre OMEGARC y le permite la posibilidad de incluir en su gama modernas y eficientes mecánicas.
Por ahora se conforma con el bloque diésel 2.0 Kryotec dotado de turbo con 170 CV y 350 Nm de par. Para su gestión confía en una transmisión manual con 6 relaciones y otra automática, opcional, con el mismo número de enclaves. Como complemento, los modos de conducción del motor (Eco, City, Sport) combinados con los modos del ESP (normal, irregular y húmedo) le permiten afrontar terrenos difíciles.
Su llegada a la India ha tenido lugar en estos días aunque no creemos que llegue a Europa. Una pena.
Fuente – Tata