El Grupo Volkswagen está viviendo un momento de caos. La casa de Wolfsburg es uno de los principales actores para el sector del automóvil europeo pero parece un gigante con pies de barro a punto de desplomarse. Como ya sabéis en la marca alemana se han centrado mucho en la electrificación de su gama. Para ello el grupo alemán dio una mayor importancia al desarrollo de su propia tecnología con inversiones que, hasta el momento, no han recuperado.
La venta de sus vehículos eléctricos nunca ha sido destacada y la invasión de eléctricos chinos tampoco van a su favor. A ello se suma que la situación socio-económica no ayuda a los clientes a renovar sus coches térmicos para pasarse a los eléctricos. Y ahora estamos en esta situación. Se dice, se comenta, se rumorea que Volkswagen podría o estaría evaluando la idea de cerrar una o varias fábricas en su propio país. Te contamos qué está pasando.
Volkswagen ha apostado por la electrificación pero no le ha salido muy bien…
Como ya hemos dicho antes, y todo el mundo sabe, Volkswagen ha apostado muy fuerte por la electrificación. Con el desarrollo de la familia ID pensaron que iban a triunfar pero no ha sido así. Los ID.3, ID.4 e ID.5 con variantes y versiones de corte deportivo añadidas no han sido capaces de plantar cara a los MG4 o BYD Dolphin. Luego tienen a sus «primos» del Grupo Volkswagen con los Cupra Born y Skoda Enyaq que de una u otra forma les restan brillo.
En último lugar tenemos a los ID.7 e ID.Buzz dos modelos que por posicionamiento y precio están muy lejos de todo lo que buscan, y necesitan, los clientes. No, no decimos que todos sean malos modelos (ni mucho menos) pero en un mercado que aún está en sus inicios el factor precio-autonomía es vital. Y hoy día los modelos eléctricos que se ofrecen en Volkswagen están muy lejos de lo que presentan MG o BYD junto a la larga terna de rivales chinos.
Teniendo en cuenta que el negocio de eléctricos no va como debería, en la marca están tomando medidas para evitar que sus finanzas se resientan. Si echamos la vista atrás debemos recordar cómo era el sector justo antes de que el Covid-19 llegara a nuestras vidas. Se trabajaba con grandes volúmenes y por ende las firmas tenían fábricas gigantescas que hoy día, tras el hundimiento del sector, no son capaces de completar porque no se venden coches.
Pues bien, Volkswagen es una de esas marcas que tiene fábricas sin llegar al mínimo de la capacidad para un funcionamiento óptimo. Y ahora que está atravesando un mal momento económico se ha puesto sobre la mesa la necesidad de ver cuáles son las que están funcionando a menor rendimiento para echar el cierre. Todo ello, como un salvavidas desesperado al plan de recortes que la marca presentó hace unos meses y que no les está funcionando.
Y ahora necesita reducir costes para ajustar sus cuentas…
Gracias a los compañeros de Autocar hemos sabido que Volkswagen estaría evaluando la situación de varios centros en los que monta modelos de escaso volumen. En primer lugar está el centro de Dresde que se conoce como la fábrica transparente y que fue inaugurada en 2002 para el Phaeton. Hoy en ella se monta el ID.3 y debido a que sus números no son buenos, podría ser una firme candidata a cerrar sus puertas y trasladarse a otra fábrica.
En segundo lugar está la fábrica de Osnabrück. En ella se fabrican tres modelos que, aunque a priori sin un éxito, sus volúmenes no justificarían tener una fábrica en exclusiva para ellos. Se trata de los Porsche 718 Boxster y Porsche 718 Cayman en asociación con el Volkswagen T-Roc Cabrio. De hecho, las ventas de este último en lo que va de año a nivel europeo se sitúan en poco más de 6.100 unidades que lo convierten en el cabrio más popular de toda Europa.
Sea como fuere, la situación para Volkswagen y su grupo matriz es cuanto menos complicada. Por una parte son una institución en su país natal y cerrar fábricas en suelo patrio no les daría buena imagen ante su mayor mercado. Y sus problemas no paran ahí porque habría un plan de Seguridad Laboral vigente desde 1994 que no aprobaría el cierre de sus fábricas y despidos en el país hasta 2029 que ya está denunciando el sindicato IG Metall.
Habrá que estar al tanto de las novedades que se den pero el director ejecutivo de Volkswagen, Thomas Schafer, dijo a los medios alemanes que la situación era «extremadamente tensa y que no se podría superar con simples medidas de reducción de costes». Veremos en qué queda…
Fuente – Autocar
Imágenes | Volkswagen – Porsche