Tras una etapa complicada en Kawasaki, Jorge Prado confirma su vuelta a la estructura Red Bull KTM para continuar su proyecto en Estados Unidos. El movimiento, esperado desde hace semanas, sitúa al lucense de nuevo en una casa que conoce bien y con la que afrontará el campeonato americano bajo techo y al aire libre.
Según ha comunicado la marca austriaca en Norteamérica, Prado pilotará la KTM 450 SX-F de última generación con el dorsal 26 y ya ha tomado contacto con la moto en el circuito de pruebas RD Field. Llega tras un debut parcial en 450SX en 2024 con cuatro salidas y un séptimo puesto como mejor resultado, un bagaje que servirá de base para su adaptación definitiva.
El anuncio y el contexto
La presentación oficial del equipo se ha realizado en las instalaciones de prueba de KTM en Estados Unidos, donde se subrayó que el cuatro veces campeón del mundo afronta esta etapa motivado para asentarse en el país. La firma recordó que el gallego ya trabajó con ellos a inicios de 2024, por lo que los procesos y la metodología le resultan familiares.
En el trasfondo queda una salida tensa de Kawasaki, condicionada por problemas físicos y desencuentros que hicieron inviable continuar una relación que estaba firmada a más largo plazo. Prado, pese a tener opciones para volver a Europa, apuesta por seguir en el exigente calendario estadounidense y dar continuidad a su aprendizaje en pistas de Supercross y Pro Motocross.
Equipo, compañeros y moto
El español compartirá box con Aaron Plessinger y Eli Tomac en la estructura oficial. Con ese trío, KTM aspira a presentar batalla frente al dominio que han mostrado los hermanos Lawrence y a la potente armada de Yamaha, en un contexto de cambios de cromos en el que, además, Chase Sexton ha puesto rumbo a Kawasaki.
En lo técnico, la KTM 450 SX-F llega como una base probada al máximo nivel, una moto con la que la marca peleó por todo y que encaja con una forma de trabajar más cercana a la que Prado conocía en MXGP. También recupera colores con los que ya triunfó: en su día, logró los títulos de MX2 de 2018 y 2019, un vínculo que refuerza la sensación de retorno a un entorno favorable.
- Dorsal 26 para su nueva etapa en la categoría reina estadounidense.
- Equipo presentado en RD Field, pista de pruebas de KTM Norteamérica.
- Arranque previsto en Anaheim, con la primera cita del calendario de Supercross.
- Precedente cercano: cuatro participaciones en 450SX en 2024 y un P7 como mejor resultado.
Calendario, exigencia y rivales
El gran desafío del gallego será consolidar ritmo y consistencia en los trazados técnicos del AMA Supercross y el AMA Pro Motocross, donde los errores se pagan caros y la regularidad marca la diferencia. En Kawasaki dejó destellos, pero la continuidad se vio lastrada por contratiempos que ahora buscará dejar atrás con un paquete más afín.
Enfrente estarán los Lawrence, referencia del momento, además de un nutrido bloque de Yamaha y otros aspirantes de primer nivel. Para Prado, medirse de forma sostenida con esa élite será clave para calibrar dónde está su techo en Estados Unidos y qué pasos necesita para pelear por resultados mayores.
Antecedentes y vínculo con KTM

El regreso tiene una fuerte carga simbólica: Prado creció en la órbita de KTM desde los 11 hasta los 23 años, etapa en la que coleccionó éxitos en Europa y más tarde compitió con los colores de GASGAS. La marca, que también produce modelos como el KTM X-Bow, le brindó estructuras competitivas en distintas disciplinas. Cerró su ciclo en el Mundial con dos coronas consecutivas de la clase reina, a las que se suman sus dos títulos previos de MX2.
Desde la dirección del equipo, Ian Harrison ha destacado que el lucense ha formado parte de la familia KTM durante mucho tiempo, que entrenó con ellos en 2024 y que el reencuentro es una oportunidad para ubicarle donde se siente cómodo y acompañarle en sus objetivos en el campeonato estadounidense.
Impacto para la afición en España
Para el público español, ver de nuevo al lucense de naranja en el escaparate americano supone un aliciente deportivo y mediático. España recupera a uno de sus nombres propios compitiendo en la liga más seguida del mundo en motocross y supercross, con mayor visibilidad y la expectativa de que su adaptación, esta vez, sea más rápida.
Con el fichaje ya anunciado, Prado afrontará su nueva etapa con KTM montando la 450 SX-F y el dorsal 26, arropado por una estructura sólida y dos compañeros de nivel. La prioridad será asentarse en el calendario estadounidense, elevar su consistencia y pelear de tú a tú con la referencia actual de la categoría en un movimiento que, por contexto y antecedentes, encaja con su trayectoria.