Los coches eléctricos tienen peculiaridades bastante interesantes, y cambios importantes respecto a los de combustión interna. No solo por el tipo de motor o fuente de energía que usan, también hay otros cambios como la ausencia de caja de cambios.
Es precisamente por ello que una pregunta frecuente es por qué los vehículos eléctricos no tienen transmisión. Esto tiene sus consecuencias, tanto positivas como negativas, como vamos a ver…
Los motivos de la ausencia de caja de cambios
Las razones por las que estos coches eléctricos no tienen transmisión o caja de cambios convencional es por varios motivos, como son:
- Par motor constante: una de las principales razones por las que los vehículos eléctricos no necesitan una transmisión es el par motor constante que proporcionan sus motores eléctricos. Desde el momento en que un motor eléctrico comienza a funcionar, ofrece un par motor constante. Esto significa que puede entregar una gran cantidad de fuerza incluso a bajas revoluciones, eliminando la necesidad de una transmisión para ajustar la entrega de potencia de forma gradual. Mediante el control de la electricidad suministrada a los motores, se puede cambiar la velocidad y el par motor de estos motores, y no necesitan de cajas como las convencionales.
- Velocidades altas: otra razón por la que los vehículos eléctricos no tienen transmisión es su capacidad para funcionar a velocidades extremadamente altas. La mayoría de los motores eléctricos pueden operar a velocidades de hasta 10.000 RPM o incluso más, ya que no dependen de la velocidad de las explosiones como en el caso de los de combustión, sino que se basan en otras propiedades eléctricas como los campos electromagnéticos. Esto hace que no sea necesario un conjunto de engranajes para poder alcanzar altas velocidades en los vehículos eléctricos.
Aunque los coches eléctricos tienen limitaciones en cuanto a la autonomía, potencia, etc., lo cierto es que tienen capacidades con las que un motor de combustión no podría soñar, como la rapidez de entrega de potencia, la forma de controlarlos, etc.
Ventajas de los coches eléctricos sin transmisión
Ahora que sabes por qué los vehículos eléctricos no tienen transmisión, vamos a ver las ventajas que supone la ausencia de este componente:
- Mayor eficiencia: la primera ventaja que vamos a mencionar es que los vehículos eléctricos sin transmisión son más eficientes en comparación con los vehículos de combustión interna. Las transmisiones en los vehículos convencionales son elementos mecánicos que introducen pérdidas de energía, por rozamiento, por los retrasos en el proceso de embragado, etc. Al eliminar la necesidad de una transmisión, los vehículos eléctricos pueden ser más eficientes en el consumo de energía. Esto significa que pueden aprovechar al máximo su energía eléctrica y recorrer más kilómetros con la misma cantidad de electricidad. La eficiencia de los vehículos eléctricos contribuye a una conducción más económica y ecológica, lo que es especialmente relevante en un momento en que la sostenibilidad es una preocupación importante.
- Menor peso: la ausencia de una transmisión o caja de cambios resulta en una reducción de peso en los vehículos eléctricos. Las transmisiones son componentes mecánicos pesados que añaden peso extra al vehículo. Al eliminar este componente, se vuelven más ligeros y, por lo tanto, más eficientes en el consumo de energía. En este sentido, un vehículo más ligero puede acelerar más rápido y tiene un mejor rendimiento en términos de consumo de energía. Esto se traduce en una experiencia de conducción más ágil y eficiente. La reducción de peso también tiene un impacto positivo en la autonomía de los vehículos eléctricos, ya que un vehículo más ligero consume menos energía para moverse. Además, al evitar este elemento, se puede dejar más espacio para las baterías, por ejemplo.
- Menor mantenimiento: este tipo de vehículos presentan una ventaja en términos de mantenimiento. Las transmisiones son componentes mecánicos que requieren un mantenimiento regular. Como no tienen este componente complejo, los vehículos eléctricos pueden requerir menos mantenimiento, lo que reduce los costes y la necesidad de visitar el taller con tanta frecuencia, es decir, tienen un plus de fiabilidad. El menor mantenimiento también se traduce en una mayor durabilidad de los vehículos eléctricos, lo que puede hacer que sean una opción más atractiva a largo plazo.