La electrificación está llegando a todas las marcas, incluso a la más exclusivas y lujosas. Tanto es así que incluso Bugatti se está llegando a plantear la creación de un coche eléctrico. Sí, Bugatti. La marca francesa perteneciente al Grupo Volkswagen lo ha confirmado en palabras de Winkelmann.
En una reciente entrevista con nuestros compañeros británicos de Autocar, Stephan Winkelmann ha dicho que sería posible la llegada de un segundo modelo a la compañía gala para acompañar al Bugatti Chiron, pero que sería un producto muy diferente. Se alejaría de ser un hiperdeportivo, tomando una dirección distinta. Sin embargo, el Grupo Volkswagen es quien tiene la última palabra, y aún no hay nada claro.
“Estoy convencido de que no tenemos que hacer un automóvil que sea solo para los fines de semana. Tiene que tener una forma y planteamiento diferente al Chiron”. “Si hacemos algo fuera de los coches deportivos, habrá un coche que no esté en la dirección del W16. En mi opinión, la electrificación sería el enfoque correcto”.
De confirmarse el lanzamiento de un segundo producto en la gama Bugatti, vistas las declaraciones del jefe de la compañía, podría ser que la firma gala optara por una carrocería más práctica y polivalente. Tal vez un GT de cuatro puertas o, por el contrario, un SUV. De hecho, no es la primera vez que se rumorea la llegada de un segundo modelo, más práctico y aprovechable en el día a día para los posibles afortunados clientes de la marca.
Seguramente, de producirse, sería un coche más fácil de vender. Bugatti es una compañía automovilística centrada en el lujo más extremo, en la exclusividad y en las altas prestaciones. Una marca con mucha imagen. En cualquier caso, y según Stephan Winkelmann, el objetivo sería mantener la alta exclusividad de la marca. No sería un coche de tan alto volumen como un Lamborghini Urus, por ejemplo; pero sería más fácil de ver que un Chiron.
Por otro lado, parece que la apuesta iría más enfocada a un vehículo totalmente eléctrico que a un coche híbrido. Al fin y al cabo, en este tipo de productos no importa tanto el alto rango de autonomía. Quien compra un Bugatti ya tiene un buen número de coches de todo tipo, algunos más enfocados a la practicidad y otros a las prestaciones. Un Bugatti, como citaba más arriba, es un coche muy de imagen. Y eso es lo que busca el cliente de la marca.
El fabricante alemán, el Grupo Volkswagen, es quien maneja los hilos y quien tendrá que valorar, tras “echar números”, si un segundo modelo que acompañe al Chiron con un planteamiento totalmente diferente será rentable. Y es que, como dice Winkelmann, ofrecer un segundo coche supondría, al menos, duplicar el tamaño de la empresa (Bugatti), con todo lo que ello conlleva. Incluso crearían una plataforma específica que no se compartiría con un Audi o Porsche.
Fuente – Autocar