El Ferrari Purosangue inaugura una nueva era para la marca de Maranello. Es su primer automóvil de cuatro plazas con carrocería de cinco puertas y, al mismo tiempo, un Ferrari en el sentido más estricto del término. Su planteamiento se aparta de los arquetipos tradicionales de los SUV de lujo para abrazar la arquitectura de coche deportivo con motor delantero central, caja de cambios trasera y un sistema de tracción total muy particular. Es, en definitiva, un Ferrari concebido para convivir con el uso diario, el confort y la practicidad sin renunciar a la emoción, la precisión y el carácter de un Cavallino Rampante con todas las letras.
Presentado en 2022 y con entregas desde 2023, el Purosangue se distingue por ser el único modelo de su categoría que apuesta por un motor V12 atmosférico de 6,5 litros. Este propulsor, con la denominación interna F140IA, no solo sitúa al coche en la cúspide de la potencia de su segmento, sino que también aporta una respuesta lineal, un tacto de acelerador instantáneo y una banda sonora inconfundible que forma parte esencial de la experiencia Ferrari. El resultado es un GT deportivo muy especial: rápido, comunicativo y tecnológicamente muy avanzado, pero también amplio y utilizable por cuatro adultos con un nivel de refinamiento de primer orden.
La clave del proyecto reside en una arquitectura transaxle típica de los deportivos de motor delantero central de la casa, un chasis y una carrocería trabajados con minuciosidad aerodinámica. Pero, sobre todo, un arsenal de soluciones de dinámica heredadas de los superdeportivos más recientes de Ferrari. A ello se suman unos interiores de concepto “doble cabina”, con cuatro butacas individuales y equipamientos de lujo, incluyendo tecnologías orientadas a la participación activa del pasajero. Con el Purosangue, Ferrari no solo crea un coche singular; redefine qué puede ser un gran turismo de altas prestaciones con espacio y confort reales para cuatro.
Diseño del Ferrari Purosangue
El Purosangue presenta proporciones únicas que lo alejan del SUV convencional. Ferrari prescinde de la típica parrilla frontal en favor de un tratamiento de superficies que integra un diedro suspendido en la parte inferior y carcasas que forman una especie de disco central donde se alojan cámara y sensores, perfectamente integrados. Los grupos ópticos se estructuran en dos niveles, con los DRL en la parte superior y las unidades principales en un plano inferior. En los extremos, tomas de aire funcionales refuerzan su imagen atlética a la vez que cumplen con exigencias aerodinámicas y de refrigeración del V12 y sus auxiliares.
En el lateral, el aerobridge canaliza el flujo bajo el capó y genera un marcado diedro que desemboca en los potentes pasos de rueda traseros, creando la sensación de un “coupé suspendido”. Uno de los rasgos de diseño más carismáticos son las puertas traseras de apertura inversa con accionamiento eléctrico, que facilitan el acceso y, al abrirse junto a las delanteras, desvelan un interior sorprendentemente amplio sin que el coche pierda compacidad visual. El techo puede ser de fibra de carbono, reduciendo masa en la parte alta del vehículo y rebajando el centro de gravedad.
La zaga combina musculatura y precisión. Una línea de corte horizontal integra los pilotos traseros y por debajo se abren dos rejillas de ventilación que, junto con un difusor de gran tamaño, acentúan la anchura visual. Ferrari ha renunciado al limpiaparabrisas trasero tradicional: la luna se mantiene limpia gracias a un elaborado trabajo de gestión de flujos de aire (el llamado limpiaparabrisas virtual) que guía el aire desde el alerón suspendido y contrarresta las vorticidades del pilar C para barrer la superficie del cristal.
Características técnicas del Ferrari Purosangue

El corazón del Purosangue es un motor V12 atmosférico a 65 grados de 6.496 cm³ (familia F140IA), con 725 CV a 7.750 rpm y 716 Nm a 6.250 rpm. Entrega el 80% del par a solo 2.100 rpm, lo que asegura una respuesta poderosa desde bajas vueltas sin perder el crescendo lineal característico de los V12 de aspiración natural. Dispone de inyección directa a 350 bar mediante dos bombas de alta presión y un sistema de encendido con control iónico que optimiza el avance y la calidad de combustión. La relación de compresión es muy elevada (13,6:1) y el corte de inyección se sitúa en torno a 8.250 rpm.
La transmisión es una caja de doble embrague en baño de aceite de 8 velocidades. Los embragues admiten cambios de par dinámicos de hasta 1.200 Nm y la relación más larga está pensada para reducir consumo en autopista. La arquitectura transaxle ubica esta caja en el eje posterior y se complementa con una unidad de transferencia delantera (PTU) de dos relaciones que conecta con el motor, conformando un sistema de tracción total 4RM-S de respuesta muy rápida. El reparto de masas logrado es 49% delante y 51% detrás, ideal para un deportivo de motor delantero central.
En dinámica el Ferrari Purosangue estrena la suspensión activa F.A.S.T. (Ferrari Active Suspension Technology), con actuadores eléctricos de 48 V en cada amortiguador que pueden aplicar fuerza en el sentido del movimiento para controlar balanceos y transferencias con una velocidad y precisión superiores a los sistemas activos clásicos. También tiene dirección a las cuatro ruedas (4WS), diferencial electrónico (E-Diff) y vectorización de par en el eje delantero, todo ello regido por una gestión electrónica que coordina la generación de fuerzas longitudinales y laterales en cada fase de la trazada.
En el capítulo de chasis y dimensiones, mide 4.973 mm de longitud, 2.028 mm de anchura y 1.589 mm de altura, con una batalla de 3.018 mm. El depósito de combustible es de 100 litros y el maletero cubica 473 litros, la mayor capacidad en un Ferrari de serie. Monta frenos carbocerámicos (398 mm delante y 380 mm detrás) y neumáticos de gran diámetro: 255/35 R22 en el eje delantero y 315/30 R23 en el trasero, con dirección a las cuatro ruedas para combinar agilidad a baja velocidad y estabilidad en alta.
Gama mecánica del Ferrari Purosangue

La gama mecánica del Purosangue se articula en torno a una única motorización: el motor V12 atmosférico F140IA de 6,5 litros y 725 CV, acoplado a la transmisión de doble embrague de 8 relaciones y al sistema de tracción total 4RM-S. No hay opción a motores híbridos ni sobrealimentados, ni alternativas de menor cilindrada. Esta filosofía persigue preservar la personalidad sonora, la progresividad de la entrega y el carácter de alta rotación propio de los V12 de Ferrari. La tracción integral 4RM-S se activa y dosifica de manera inteligente, privilegiando el eje trasero para mantener el comportamiento tradicional de un deportivo transaxle.
Las prestaciones están a la altura del empaque técnico: acelera de 0 a 100 km/h en 3,3 s y alcanza 310 km/h de velocidad máxima. El 0 a 200 km/h se completa en torno a 10,6 s. Su consumo y emisiones homologados en ciclo WLTP reflejan el enfoque de altas prestaciones: combinado de 17,3 l/100 km y 393 g/km de CO2, con cifras por fases que van desde 14,7 l/100 km (velocidad muy alta) hasta 27,8 l/100 km (baja), según datos oficiales.
Equipamientos del Ferrari Purosangue

El interior del Purosangue adopta un planteamiento de “doble cabina” que involucra al pasajero casi tanto como al conductor. No hay una pantalla central tradicional. En su lugar, el acompañante dispone de una pantalla táctil de 10,25 pulgadas con acceso a información dinámica, audio y navegación, mientras que el conductor cuenta con un cuadro digital configurable de gran formato. Los cuatro asientos son independientes, con ajustes eléctricos y calefacción. Los traseros pueden reclinarse para generar un plano continuo con el maletero y ganar capacidad de carga. La posición de conducción es más elevada que en otros Ferrari, pero con la ergonomía característica de la marca, que busca una conexión directa con el chasis y los mandos.
La dotción puede incluir techo de fibra de carbono para reducir peso alto y mejorar el centro de gravedad, además de opciones de acabados de lujo con materiales de primera calidad. Ferrari ha puesto el acento en la sostenibilidad de los revestimientos: buena parte de las tapicerías emplean poliamida reciclada procedente de redes de pesca recuperadas y Alcantara con certificación RCS. Entre los socios tecnológicos del proyecto aparecen proveedores como Burmester (audio premium), Brembo (frenos), Multimatic (tecnología de suspensión), Bridgestone/Michelin (neumáticos) y ZF, entre otros.
En el ámbito de asistentes y control dinámico, incorpora ABS evo con sensor de chasis de 6 vías, control de estabilidad de última generación, control de descenso de pendientes, dirección a las cuatro ruedas, diferencial electrónico, vectorización de par y la suspensión activa F.A.S.T. con actuadores eléctricos de 48 V. El apartado de conectividad e infoentretenimiento centra su experiencia en el binomio conductor-pasajero, con interfaces digitales específicas y control táctil para la climatización y funciones del vehículo.
Ferrari Purosangue en vídeo
El Ferrari Purosangue según EuroNCAP
El Ferrari Purosangue no cuenta con una calificación oficial de Euro NCAP, ya que no ha sido sometido a sus pruebas. Aun así, incorpora avanzados sistemas de asistencia como frenada automática, control de crucero adaptativo y cámara 360°. Su estructura combina acero de alta resistencia y aluminio, e incluye diez airbags. Aunque sin test formal, el diseño y la tecnología del Purosangue reflejan un enfoque moderno en seguridad y protección de los ocupantes.
El Ferrari Purosangue de Km0 y segunda mano

El mercado de ocasión y Km0 del Ferrari Purosangue en España muestra una disponibilidad creciente desde el año 2024, con unidades mayoritariamente de ese mismo año. En portales especializados se han llegado a listar ofertas con precios que oscilan, en función de kilometraje y equipamiento, desde cifras próximas a los 475.000 hasta picos en torno a 850.000. En todos los casos con kilometrajes medios por debajo de los 10.000 km y una presencia notable del color negro como la opción preferida. Sea como sea la disponibilidad puede variar debido a que Ferrari limita la producción anual del modelo. Su objetivo es no superar el 20% del total de su fabricación.
Rivales delFerrari Purosangue

Por posicionamiento, prestaciones y precio, los rivales naturales del Purosangue son los SUV de lujo y altas prestaciones más exclusivos del mercado. Entre ellos destacan:
- Lamborghini Urus (S y Performante). Enfoque deportivo, V8 biturbo y un tarado muy agresivo; más radical en circuito, menos singular por carecer de V12 atmosférico.
- Aston Martin DBX707. Una de las referencias por potencia, con un V8 sobrealimentado y un chasis muy afinado; gran equilibrio entre lujo británico y rendimiento.
- Bentley Bentayga (Speed o V8). Más orientado al lujo y al confort supremo, con altísima calidad de rodadura; menos incisivo dinámicamente, pero muy capaz en largas distancias.
- Porsche Cayenne Turbo GT. Relación precio-prestaciones notable, con un comportamiento muy afinado y tiempos de circuito sobresalientes; menor exclusividad percibida frente al Ferrari.
- Rolls-Royce Cullinan (Black Badge). Rival en lujo extremo y presencia, aunque con un planteamiento menos deportivo y un enfoque más señorial y distinguido.
Puntos a destacar
- Único en su segmento con V12 atmosférico: respuesta lineal, sonido icónico y prestaciones de primer nivel.
- Arquitectura transaxle y arsenal dinámico (4RM-S, 4WS, E-Diff, suspensión activa F.A.S.T.) que logran una agilidad sorprendente para su tamaño.
- Habitabilidad real para cuatro adultos, puertas traseras de apertura inversa y maletero de 473 litros: el Ferrari más práctico hasta la fecha.
Puntos a mejorar
- Precio de adquisición y coste de propiedad muy elevados, con mantenimiento y seguros acordes a su exclusividad.
- Consumo y emisiones altos (WLTP combinado 17,3 l/100 km y 393 g/km de CO2), penalizados además por normativa y fiscalidad.
- Disponibilidad limitada por política de producción y alta demanda, con plazos de entrega y precios en mercado secundario al alza.
Precios del Ferrari Purosangue

En España, el precio de partida comunicado se sitúa en el entorno de los 500.000 euros, sin incluir opciones ni personalización a medida. La rareza del modelo y la producción limitada por parte de Ferrari contribuyen a sostener precios muy elevados. Todo ello sin posibilidad ni opción a descuentos ni campañas de financiación.