Nissan mira al futuro con despidos masivos y el cierre de dos fábricas

Desde que Carlos Ghosn se fugara de Japón a su país natal, el Líbano, la situación de Renault y Nissan se complica. Por un lado, como si nada fuera con ella, está la casa del rombo. Es más, ya ha nombrado oficialmente a Luca de Meo director general de Renault S.A. y presidente de Renault s.a.s. Por otra parte está la firma nipona, pensando qué hacer si al final la Alianza salta por los aires y se queda «compuesta y sin socia».

Hace unos días os contábamos que varias fuentes habían apuntado a que ya estaría pergeñado un plan de contingencia. Pero no es lo único, pues otros apuntan a que si finalmente se separa de Renault, podría poner sus ojos en su compatriota Honda. Ahora, nos enteramos que de cara a los próximos años habrían establecido un férreo plan de reducción de costes. La cifra ascendería a unos 4,4 mil millones de dólares y sería a nivel global.

Nissan estaría perfilando su plan de contingencia y ahorro

Como es lógico, el primer punto donde pondrían la atención sería en reducir los costes laborales. En julio del pasado año, anunciaron que eliminarían unos 12.500 empleos de 14 centros productivos. Esta reducción afectaría a empleados de cuello blanco y producción de centros situados en Reino Unido, España, México, Japón, India e Indonesia. Sin embargo, en aquel momento no se habló nada de cerrar fábricas al completo.

Ahora sí. Según varias fuentes, cercanas a Nissan, habrían pensado cerrar dos centros además de eliminar algunas líneas de producción. La razón, es sencilla: algunos están trabajando muy por debajo del umbral de rentabilidad. Pero esto no es todo, pues la segunda parte del plan afectaría a varios modelos. Según Reuters, habrían pensado reducir su portfolio en un 10 por ciento.

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Esta medida afectaría, únicamente, a aquellos segmentos donde su presencia sea testimonial. Por último, la nueva directiva de Nissan habría decidido cambiar su forma de actuar. En primer lugar, eliminar directamente aquellos modelos que no son rentables o no tienen objetivos de ventas. En segundo lugar, acelerar el ciclo comercial de sus productos estrella a la par que el lanzamiento de nuevas tecnologías.

Con todo, Nissan persigue un objetivo muy claro: alcanzar un margen operativo del 6 por ciento en 2023. Habrá que ver si son capaces de hacerlo y lo más importante, si es sola o acompañada con otro socio. Sea como fuere, el culebrón con Renault parece que va para largo.

Fuente – Reuters