Prueba BMW 118d Sport 5 puertas (parte I)

El BMW Serie 1 ha sido renovado en profundidad con la clara intención de atacar los puntos débiles de la anterior generación (habitabilidad interior principalmente) y manteniendo los puntos fuertes (imagen de marca, tacto de conducción, calidad percibida). La versión de tres puertas era especialmente floja en habitabilidad, sobre todo las plazas traseras, tanto por tamaño como por facilidad de uso. No he probado todavía la versión de tres puertas del nuevo modelo, pero según la marca se ha mejorado bastante. El maletero de 360 litros tiene unas formas muy aprovechables.

En esta ocasión probamos el motor más demandado en el mercado, el motor 2.0 Diesel con motor de 143 CV y 320 Nm de par. El cambio automático es una delicia, pero no es barato…casi 2.500€ extra.

Diseño exterior

El aspecto exterior del BMW Serie 1 es bastante continuista respecto a su predecesor. Conversando con compañeros del sector y amigos, llegamos a la conclusión de que el Serie 1 tiene un diseño que o gusta o pasa con indiferencia, pero a casi nadie le disgusta. Desde los acabados más básicos ofrece un exterior  bastante cuidado, salvo la equipación más básica de llantas.
Exteriormente ha crecido respecto al modelo anterior, aunque este aumento no se nota tanto en el interior del coche. De largo mide 4,32 m (antes 4,24 m), con una distancia entre ejes de 2,69 m (antes 2,66 m) y una anchura de vías aumentada en ambos ejes. La altura se queda en 1,42 metros, con un buen CX (aerodinámica) de 0,30.

Diseño interior

Interiormente es amplio en las plazas delanteras, y como viene siendo habitual en BMW, todo parece estar hecho a medida del conductor. La ergonomía está muy lograda y los mandos, tanto por tacto como por sensación al accionarlos emanan una gran calidad. Los guarnecidos interiores han ganado puntos al tacto respecto a la versión anterior, aunque visualmente son muy parecidos. En general, la sensación de calidad percibida es muy buena; el tacto del volante de cuero de aro grueso y acolchado ayuda mucho a esta sensación. La espectacular tapicería en cuero Dakota con costuras en rojo también impresiona…pero claro, es un extra de casi 2.000 euros.

Aunque realmente el coche es amplio en las plazas delanteras y medio en las traseras, es fácil pensar que estamos en un coche más pequeño por algunos detalles, como por ejemplo la sensación de que el cristal delantero queda muy cerca. La línea de cintura elevada también ofrece poca sensación de amplitud. Atrás solo dos personas podrán sentarse correctamente ya que el túnel central es demasiado voluminoso para que el pasajero de la plaza central pueda ir cómodo.

Volviendo a los asientos delanteros, hay tres tipos de asientos: normales, deportivos y deportivos con regulación eléctrica. Los últimos son carísimos. Los deportivos son una opción a tener en cuenta por los múltiples reglajes que ofrecen, incluido la regulación en anchura de la espalda y longitud de la banqueta. Los asientos del acabado más básico no llevan ni regulación lumbar, un detalle cutre en un coche de esta categoría. En cualquier caso, los reglajes son amplios para permitir acomodarse a personas de tallas muy dispares, con preferencia para las personas de más estatura.

El diseño del salpicadero es muy similar al del modelo anterior, aunque con algunos cambios importantes como por ejemplo la pantalla del salpicadero que puede ser de hasta 10 pulgadas (existen otras dos de 6,5” y 8,8”). También puede llevar el mando “i-Drive” para manejar múltiples funciones del coche, siempre que el coche lleve navegador o el equipo de sonido opcional.

Motores y conducción

La gama de motores es muy amplia y algunos convierten al BMW Serie 1 en un misil. Los motores de acceso de gasolina pueden parecer algo cortos de empuje, pero los Diésel mueven el coche con bastante alegría. De cualquier forma, los motores básicos de gasolina tienen mucha más fuerza y son mucho más agradables que los anteriores propulsores. Todos los motores son relativamente nuevos salvo el 135i de 320 CV, con el que el Serie 1 se convierte en un deportivo interesante (este motor sólo lo he probado en la versión anterior). El motor Diésel del 120d de 184CV satisfará a quienes demanden dinamismo y aun así todavía queda otro motor Diésel más potente.
En cualquier caso, la gama está muy bien estructurada y creo que es complicado no encontrar la combinación de motor-cambio adecuada a nuestras necesidades, tanto en Diesel como en gasolina.

En gasolina tenemos los motores 114i (102CV), 116i (136CV), 118i (170CV), 125i(218CV) y 135i M (320CV)
En Diésel tenemos los motores 114d (95CV), 116d y 116d Efficient Dinamycs Edition (116CV), 118d (143CV), 120d (184CV) y 125d (218CV).

Salvo los motores de acceso de gasolina y Diésel, todos los demás están disponibles con el cambio automático de 8 velocidades Steptronic. Este cambio es de convertidor de par, no de doble embrague tipo DSG que tan de moda están ahora. Realmente el cambio es una delicia y no se echa de menos la tecnología de doble embrague.
Nuestra unidad de pruebas llevaba el motor Diesel de 143CV, posiblemente la opción más equilibrada por precio y prestaciones de la gama. Este motor, asociado al cambio automático de 8 velocidades mueve el Serie 1 con bastante fuerza y un consumo bajísimo.

Gracias al cambio automático de 8 velocidades Steptronic el motor siempre se encuentra en un régimen de giro adecuado para proporcionar fuerza. El desarrollo de la 8 marcha es muyyy largo con el fin de reducir aún más el consumo. ¿Son necesarias tantas marchas? En mi opinión no, pero ya que las tenemos y además el coche las selecciona de forma automática… Este cambio automático es muy recomendable si vamos a utilizar mucho el coche en ciudad. También lo recomiendo si lo va a conducir una persona con poca fuerza, ya que el cambio manual tiene un funcionamiento bastante duro que puede agradar a algunas personas (a mi, por ejemplo), pero resultar un incordio para otras (mi madre, por ejemplo).

La suspensión del BMW Serie 1 es más suave que la de modelos precedentes, según sus creadores. Personalmente no he notado apenas diferencias, posiblemente debido a los neumáticos tipo RunFlat que llevaba nuestro coche (el flanco del neumático es muy duro). Estos neumáticos de medidas 225/45/17 pueden ser algo excesivos y si queremos buen confort quizá debamos quedarnos con las llantas de serie de 16 pulgadas. No hay que olvidar que las llantas opcionales en BMW cuestan mucho dinero y son un extra a valorar.
El Serie 1 es un coche con el que se puede disfrutar al volante. La posición de conducción puede ser baja, el coche es muy dinámico y responde bien a los cambios de dirección. No es un coche deportivo, pero si que ofrece sensaciones que otros coches de su categoría no tiene. Si estás pensando en la tracción trasera, te aseguro que en conducción normal e incluso rápida, el BMW Serie 1 no se manifiesta como un coche de propulsión, en ese sentido puedes estar tranquilo.

Los frenos son bastante contundentes y aguantan suficientemente el trato duro, no vamos a fatigarlos con facilidad. El coche acelera hasta 100 km/h en menos de 9 segundos y supera holgadamente los 200 km/h, pero los frenos están bien dimensionados para estas prestaciones.
Existen 4 modos de conducción que modifican parámetros del ESP, la dirección, la suspensión variable (si la lleva) y la respuesta del acelerador y caja de cambios. En el modo normal (llamado Comfort), el coche se comporta como cualquier otro compacto normal. Existen otros tres modos más (Sport, Sport+ y Eco-Pro). Con el Sport el coche permite un pequeño derrapaje en aceleración, pero nunca pérdida de trayectoria. El motor responde de forma más directa, la suspensión y dirección se endurece y el cambio tiende a seleccionar marchas más cortas. Con el Sport+ se pueden conseguir espectaculares cruzadas (por ejemplo acelerando mucho en carretera mojada) mientras el ESP ayuda un poco a controlar la maniobra.
Aunque en este modo indica que el ESP está  totalmente desconectado, en realidad si la situación se descontrola mucho se nota claramente que el ESP vuelve a actuar.

El modo ECO-PRO actúa en el alternador y los sistemas que consumen energía eléctrica del coche para minimizar el gasto de combustible. También incluye el Start&Stop (que dicho sea de paso, es muy brusco para tratarse de un BMW). Un indicador nos va informando de la autonomía extra que vamos logrando gracias al funcionamiento del modo ECO-PRO.

Continuará…