Prueba Fiat Ducato Panorama 150 CV ComfortMatic, 9 plazas para viajar

En nuestro afán por probar todo tipo de vehículo, en ActualidadMotor hemos decidido probar uno de los vehículos de pasajeros más grandes que se comercializan actualmente. Durante una semana hemos viajado con una Fiat Ducato Panorama, la versión de pasajeros más equipada de la furgoneta. Nuestra unidad era la de batalla larga y techo alto y estaba equipada con el motor diésel MultiJet de 150 CV y el cambio pilotado ComfortMatic de seis relaciones.

Hemos recorrido cerca de 2.200 kilómetros, tanto en vacio como con los nueve pasajeros que puede albergar y el maletero cargado para poder ofrecer una valoración exhaustiva sobre esta Fiat Ducato Panorama, que por el tipo de vehículo que es puede resultar interesante para vehículos tipo transfer, transporte de personas en el entorno rural o directamente, familias numerosas con imperiosas necesidades de espacio.

Este es sin duda el vehículo más grande que he conducido. La Fiat Ducato Panorama de techo ato y batalla media (que realmente es la opción más grande) mide 5413 mm de largo, 2050 de ancho y 2524 de alto. Su batalla es de 3450 metros. El modelo corto no llega por poco a los cinco metros de longitud, con 45 cm menos de batalla y una altura de 2,25 metros. La diferencia de precio entre ambas carrocerías es de unos 2.200 euros.

Nuestra unidad luce un color plateado, luces diurnas LED y llantas de aleación, consiguiendo un aspecto más atractivo para lo que a fin de cuentas no deja de ser una caja con ruedas. Excusas de perder mucho tiempo contemplando el diseño. Aquí prima la función. Las Ducato Panorama se diferencian del resto de Ducato de pasajeros por contar con un interior completamente recubierto, mejores asientos y una suspensión más cómoda.

Un microbús para 8 o 9 pasajeros

No hay una palabra mejor para definir a la Fiat Ducato Panorama que nos acompaña esta semana que la de microbús. De serie ofrece espacio para 8 pasajeros en configuración 2+3+3, pero nuestra unidad de pruebas está equipada con la banqueta de copiloto doble, por lo que tiene nueve plazas. Este es uno de los microbuses más grandes que podremos conducir con el carné B1, circulando a 120 km/h ya que es un turimos.

Si transportar el máximo número de personas es lo imprescindible, es interesante optar por la banqueta doble, pero en caso de no se necesario, es mejor prescindir de ella. La banqueta doble tiene un respaldo que no es regulable en inclinación y es más duro, además de que las plazas no son tan anchas como en los asientos individuales. Además, el pasajero central se encontrará con menos espacio para las piernas, por las formas del salpicadero pero especialmente por un posavasos que hay en la parte inferior. El asiento individual es igual que el del conductor y ofrece más reglajes.

Donde no habrá problemas de espacio es en las plazas traseras. Las seis butacas tienen regulación individual del respaldo y apoyacodos (los centrales compartidos). Por espacio para las piernas, los extremos de la última fila son los que más espacio tienen por el diseño de los asientos y de la cabina, que no permite que los pasajeros de la segunda fila puedan extender mucho las piernas. En cualquier caso, el espacio es más que suficiente en todas las cotas y se viaja con comodidad.

El acceso a las plazas delanteras se realiza mediante un pequeño escalón integrado en el marco de la puerta y lo cierto es que puede costar a quien no sea muy ágil. Para las plazas traseras también hay que sortear un escalón tras la puerta, aunque esta unidad equipa un escalón retráctil opcional (se despliega al abrir la puerta) que hace mucho más fácil la maniobra de subir. Acceder a la tercera fila de asientos no es complicado, ya que el asiento derecho del centro bascula hacia delante dejando hueco suficiente para entrar con comodidad. La altura del techo permite, prácticamente, ponerse de pie.

El maletero tiene unas dimensiones absolutamente descomunales, pudiendo acoger sin problemas el equipaje de los 8 o 9 pasajeros. La boca de carga y el suelo están mucho más abajo que el resto del habitáculo y aún por encima de la bandeja de carga se puede colocar equipaje con seguridad ya que los asientos hacen de barrera ante los movimientos del mismo en las frenadas. La puerta trasera es de doble hoja.

Un furgón en esencia

El habitáculo de la Fiat Ducato Panorama toma como punto de partida las versiones furgón del modelo. En el salpicadero encontramos unos detalles en marrón y negro piano que tratan de mejorar la calidad visual, aunque es difícil cuando todo son plásticos duros, algunos de aspecto y calidad mejorable. Son vehículos hechos para soportar el trato duro y por eso los materiales no son los más atractivos, además de que algunos ajustes podrían mejorar y no es difícil, en ocasiones, escuchar algunos grillos.

Todo el interior está revestido, pero especialmente en la parte trasera el plástico de la parte baja y el tapizado del techo muestran unos ajustes claramente mejorables. Desde luego la calidad de acabados no es el principal argumento de la Ducato Panorama, que sí, destaca, en cambio, por un precio más competitivo que el de otros rivales.

El cuadro de relojes ofrece una información completa y de fácil lectura y los mandos están todos dispuestos de forma ergonómica, aunque algunos de la consola central quedan algo lejos del alcance del conductor debido a la anchura de esta Ducato. Sería interesante una consola central algo más cercana al puesto de conducción y ligeramente orientada hacia este.

Chofer por una semana

Llega el momento de arrancar el motor y comenzar a ejercer de chofer. No podemos sentirmos de otra forma con semejante autobús. Los primeros kilómetros por ciudad resultan tremendamente fáciles. Circulamos con un vehículo de grandes dimensiones, pero tenemos como punto a favor un puesto de conducción muy elevado que nos permite anticiparnos a las reacciones del tráfico y tener buena visibilidad en los cruces.

Un gran aliado es la dirección, desmultiplicada y con mucho radio de giro, que nos permite maniobrar en muy poco espacio dadas las dimensiones. Es un vehículo maniobrable teniendo en cuenta su tamaño. La referencia que más nos costará será la anchura. Para aparcar en nuestra unidad contamos con unos sensores de aparcamiento y una cámara trasera que me parecen, ambos, opcionales imprescindibles a la hora de la compra.

Cuando circulamos por carreteras secundarios lo que más notaremos será el elevado centro de gravedad de la furgoneta. En las curvas se notan los balanceos de la carrocería y es importante trazar adecuadamente, sin brusquedades, también pensando en el confort de los pasajeros. Hay que evitar las maniobras bruscas, en las que la carrocería tiene amplios movimientos, aunque la Ducato Panorama permanece estable.

En cuanto a rumorosidad lo más destacado es el ruido aerodinámico, debido a su gran superficie frontal y a los generoso espejos retrovisores. Por lo demás el aislamiento es bueno y se puede conversar con facilidad, incluso escuchando a los pasajeros de la última fila. El equipo de sonido es para todas las plazas y tiene una buena calidad, para amenizar momentos del viaje. Sorprende muy gratamente, pese a la gran superficie lateral, que es poco sensible al viento gracias a los sistemas electrónicos de control de la trayectoria.

Motor MultiJet de 150 CV y cambio ComfortMatic

La Fiat Ducato Panorama está disponible con dos motorizaciones diésel MultiJet de 2.3 litros de cilindrada. Son las variante denominadas comercialmente MultiJet 130 (131 CV) y MultiJet 150 (148 CV). Nuestra unidad de pruebas es la más potente y además está asociada a la caja de cambios robotizada ComfortMatic de seis velocidades, con un sobrecoste de unos 1.500 euros. De serie el cambio es manual de seis relaciones en ambos motores.

El motor se deja sentir al ralentí o en fases de aceleración, pero a velocidades de crucero su ruido es muy bajo y es digno de destacar la ausencia de vibraciones en el habitáculo (volante y pedales incluidos). El motor brinda una buena aceleración y facilidad para ganar velocidad dadas las características de esta Ducato Panorama, pero el principal problema radica en la caja de cambios manual pilotada que Fiat denomina ComfortMatic.

Este cambio deja sentir las transiciones entre marcha y no funciona mal, pero el cambio de primera a segunda es el más lento y brusco y muchas veces nos puede dejar un poco «vendidos» en incorporaciones. Si levantamos ligeramente la presión del gas en los cambios de marcha, los cambios fluyen mejor. La caja de cambios tiene un modo denominado Up, en el que se retrasan los cambios para tener una mejor respuesta. Ese modo es el que hemos usado durante casi todo el recorrido, ya que mantiene el motor en un rango de par más óptimo y se agradece cuando vamos cargados.

Si que es digna de alabar la suavidad con la que el cambio pilotado funciona cuando circulamos a baja velocidad, no da ningún tipo de tirón e incluso maniobrando en pendientes funciona muy bien. Realmente el cambio aporta confort a la conducción y es un opcional muy a tener en cuenta. Con el uso nos habituaremos a sus carencias en el funcionamiento. Hay manejo secuencial desde la palanca de cambios.

A la hora de circular con el control de crucero, ha quedado patente que este no funciona de forma óptima. En pendientes ascendentes la Ducato Panorama pierde velocidad con facilidad, mientras que en las bajas se embala, pudiendo incluso alcanzar los 140 km/h. Es un fallo incomprensible y todo es por una mala gestión del cambio ComfortMatic, que no reduce al afrontar pendientes (hasta que ya ha perdido bastante velocidad) ni tampoco al bajarlas para frenar con la retención del motor. Al menos es de agradecer que el conductor puede cambiar las marchas desde la palanca sin que el control de crucero se desactive.

La Fiat Ducato Panorama de nuestra prueba equipaba algunos elementos opcionales cuyo funcionamiento vamos a repasar. El avisador de cambio involuntario de carril emite sonidos por los altavoces del lado en el que nos aproximamos a las líneas de la carretera, pero resulta ruidoso y molesto. Ha ido desconectado toda la prueba, aunque requiere pulsar el botón cada vez que arrancamos. Las luces cortas-largas automáticas tienen muy buen funcionamiento y la iluminación es correcta. El navegador tiene buen funcionamiento y marca los radares, del mismo modo que el sistema de reconocimiento de señales de tráfico puede ser interesante.

Consumo de combustible

Durante la prueba, hemos podido comprobar con exactitud el consumo de combustible en distintas circunstancias de uso. Lo cierto es que la Fiat Ducato Panorama 150 CV ConfortMatic es bastante estable en este aspecto, siendo poco sensible al uso. Circulando por autovías y autopistas a 120 km/h con uno o dos pasajeros nos encontraremos con una media de consumo de 8,6 litros, mientras que con nueve ocupantes y el maletero cargado gastaremos sobre los 9,1 litros cada 100 kilómetros. En nuestra prueba, con 2.270 kilómetros, el consumo medio quedó fijado en los 9 litros.

En entornos urbanos el consumo se dispara algo más (no tiene Stop & Start) y puede llegar sin excesiva dificultad a alcanzar los 11 litros. El factor que más afecta a los consumos es el viento, dada su gran superficie. Teniendo en cuenta el volumen de la Ducato Panorama media de techo alto y su peso de 2.375 kilos (en vacío), los registros obtenidos durante la prueba nos parecen satisfactorios.

Concluyendo

Llegando al término de la prueba, hay mucho a favor de la Fiat Ducato Panorama. No es bonita, ni pequeña, ni sus acabados son lujosos, aunque es cómoda y ofrece una buena economía de combustible, mientras que su precio de 26.400 euros (sin extras, 150 CV y carrocería Media-Alta) es competitivo. Es interesante optar por una serie de opcionales que hacen la conducción más cómoda y segura. El cambio automatizado ComfortMatic no es una mala opción pese a algunos fallos en su funcionamiento.

Equipamiento Fiat Ducato Panorama

El equipamiento de la Fiat Ducato Panorama incluye de serie elementos como:

• Faros halógenos
• Ventanas traseras deslizantes
• Suspensión confort (optimizada)
• Asiento de conductor regulable en altura y con ajuste lumbar
• Guantera refrigerada
• Reposacabezas acolchados
• Ordenador de abordo
• Tomas de 12V
• ABS, ESP y control de tracción
• Airbags frontales

Opcionalmente se pueden equipar elementos como la suspensión trasera neumática, el control de crucero, la advertencia de cambio involuntario de carril, el reconocimiento de señales de tráfico, equipo multimedia Uconnect con navegador, luces cortas-largas automáticas, luces diurnas LED, asiento de conductor calefactado, climatización para las plazas traseras, sensores de aparcamiento y cámara trasera, entre otros elementos.

Opinión del editor

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