Stefano Domenicali se está perfilando como el futuro director ejecutivo de la F1. Es decir, podría ser el nuevo al frente de la Fórmula 1. Sustituiría así al americano Chase Carey, que ha ocupado el puesto desde que Liberty Media comprase los derechos de este deporte a Bernie Ecclestone. Según han informado desde Reino Unido esto podría producirse antes de la temporada 2021, lo que sería casi inminente. Pero aún solo es un rumor y habrá que esperar confirmación oficial.
No obstante, cuando el río suena… agua lleva. Además, los británicos también aseguran que Chase Carey pasaría a ocupar un rol externo, cediendo así esta responsabilidad en el italiano. Como sabes, Stefano Dominicali conoce bien la F1, ya que fue exjefe de Ferrari en la época en la que estuvo Fernando Alonso vestido de rojo (sustituyendo a Jean Todt). Por cierto, un deporte en el que ha estado inmiscuido dentro de Maranello desde 1991. Luego pasó por Audi en 2014, para después terminar en 2016 siendo CEO de Lamborghini…
La tesis de que Stefano Domenicali ocuparía el puesto de Carey ha llegado del reputado periodista Dieter Rencken que escribe para el medio digital Race Fans. Así que podría ser una fuente bastante fiable… Así que estaremos atentos para contarte cualquier novedad si en las próximas semanas se hace el comunicado oficial.
Lo curioso es que parece que todos los ex-jefes/personal importante de Ferrari, o algunos de ellos, parecen tener asientos en las altas esferas. De hecho, si lo piensas bien, formará un buen tandem junto con Jean Todt, la persona al frente de la FIA, y junto con Ross Brawn, también ex-ingeniero de Ferrari. Parece que la Scudería es una fábrica de altos cargos.
Lo cierto es que si se confirmase la noticia, parece que ese trío se entenderá bastante bien. Y espero que seo sea bueno para el futuro de la Fórmula 1, que buena falta le hace…
- ACTUALIZACIÓN: Hoy mismo, 25 de septiembre de 2020, se ha hecho oficial. La noticia se ha confirmado. Así que ya no es un rumor, es una realidad… Ojalá que traiga aire fresco a esta categoría.