El equipo Haas F1 afrontará una profunda transformación a partir de la temporada 2026 gracias a un acuerdo de patrocinio de gran calado con Toyota Gazoo Racing, la división deportiva del fabricante japonés. La escudería estadounidense, única representante de Estados Unidos en la parrilla, adoptará una nueva identidad comercial y deportiva en la que la marca nipona tendrá un protagonismo muy visible dentro del campeonato.
Tras varios meses de rumores en el paddock, Haas ha confirmado que Toyota será su nuevo patrocinador principal en Fórmula 1, lo que implicará un cambio oficial de denominación a TGR Haas F1 Team desde 2026. El movimiento da continuidad y, al mismo tiempo, eleva la alianza técnica sellada previamente, y refuerza la presencia de Toyota en la categoría sin necesidad de entrar con un equipo de fábrica propio.
Un cambio de era: llega TGR Haas F1 Team
El acuerdo suscrito sitúa a Toyota en la posición de title sponsor del proyecto de Gene Haas, reemplazando a MoneyGram, empresa que había ejercido como patrocinador principal durante los últimos tres años y medio. Con esta sustitución, la marca japonesa gana un escaparate privilegiado en la F1, mientras que el equipo norteamericano obtiene un socio con peso tecnológico, industrial y deportivo para afrontar el nuevo reglamento técnico de 2026.
La nueva denominación TGR Haas F1 Team se utilizará de manera oficial a partir del arranque de la próxima normativa, en la que los monoplazas y las unidades de potencia cambiarán de forma notable. La operación no implica por ahora que Toyota aporte motor propio, pero sí refuerza la vertiente de desarrollo, formación y recursos, de la mano de la estructura que dirige Ayao Komatsu y bajo la supervisión del propietario del equipo, Gene Haas.
Uno de los puntos clave del pacto es que la decoración del coche de 2026 tendrá una presencia muy destacada de Toyota, algo que la propia escudería ya ha avanzado. El nuevo monoplaza, denominado VF-26, se desvelará mediante un lanzamiento online el 23 de enero, antes de ponerlo en pista en una serie de pruebas privadas.
De la colaboración técnica al patrocinio principal

La relación entre ambas partes no nace de cero. En octubre de 2024 se firmó un acuerdo de colaboración técnica entre Haas y Toyota Gazoo Racing, centrado en el intercambio de conocimiento, apoyo en ingeniería y distintas sinergias en áreas de desarrollo. Desde entonces, el logotipo de TGR ya tenía visibilidad en los coches y en la estructura del equipo.
Durante la temporada 2025 esa colaboración dio un salto cualitativo con el programa TPC (Testing of a Previous Car), en el que se utilizó el monoplaza VF-23 para jornadas específicas de pruebas. Haas y Toyota organizaron 14 días de test repartidos por circuitos de referencia como Silverstone, Paul Ricard, Fuji, Imola y Mugello, lo que permitió a la marca japonesa acumular datos y, sobre todo, dar kilómetros a sus pilotos bajo condiciones de Fórmula 1 real.
En esas sesiones tomaron parte nombres muy vinculados al programa de Toyota en competición, como Ryo Hirakawa, Ritomo Miyata, Sho Tsuboi y Kamui Kobayashi. El objetivo no se limitó a exprimir un coche anterior para ajustes de puesta a punto, sino que se convirtió en un banco de pruebas para talento emergente y una herramienta de formación intensiva para ingenieros y mecánicos de ambas estructuras.
A partir de 2026, ese plan de trabajo se renombrará como Programa de Desarrollo de Pilotos TGR Haas, dejando claro que la intención es consolidar una ruta reconocible desde las categorías en las que compite Toyota hasta la F1. Para la marca japonesa, el lema interno “Personas, Producto, Pipeline” se traduce en un ecosistema real donde personal técnico y deportivo puede crecer con vistas a un escenario global.
El foco en la formación de pilotos e ingenieros
Más allá de la parte publicitaria, la alianza se apoya en un eje que ambas partes repiten constantemente: invertir en personas. Toyota quiere utilizar la Fórmula 1 como una plataforma donde sus jóvenes pilotos, ingenieros y mecánicos adquieran experiencia de primer nivel, sin necesidad de crear una escudería oficial desde cero. Haas, por su parte, encuentra en este enfoque una forma de reforzar su base de personal especializado en un momento en el que la complejidad técnica de la categoría sigue creciendo.
En ese sentido, la escudería con sede en Banbury subraya la importancia de la colaboración en el desarrollo del simulador. Como parte del acuerdo, Toyota ha contribuido a la instalación y evolución de un simulador de última generación en las instalaciones británicas del equipo, pensado específicamente para las exigencias del reglamento de 2026. Este recurso es clave para la preparación de los pilotos titulares y de los jóvenes del programa TGR, y para optimizar el trabajo de ingenieros de pista y de fábrica.
La cooperación también se extiende al llamado crecimiento del personal, con equipos mixtos de Haas y TGR trabajando de manera conjunta. Esta metodología permite que técnicos europeos y japoneses compartan procedimientos, herramientas de análisis de datos y métodos de trabajo, algo que, según la dirección del equipo, ya se ha traducido en mejoras tangibles en el rendimiento del coche y en la eficiencia operativa en los últimos meses.
Las palabras de Ayao Komatsu y Akio Toyoda
El responsable máximo en pista de Haas, Ayao Komatsu, ha sido uno de los mayores defensores de llevar la relación con Toyota un paso más allá. El ingeniero japonés ha señalado que la asociación ha cumplido e incluso superado las expectativas iniciales, señalando como ejemplo el éxito del programa TPC y los avances logrados en el simulador de Banbury.
Komatsu insiste en que lo más valioso es el factor humano: el trabajo conjunto entre las plantillas de Haas y TGR ha permitido pulir procesos internos, acelerar tareas de desarrollo y generar un entorno donde los jóvenes ingenieros pueden asumir responsabilidades de forma progresiva. De cara a la nueva etapa bajo el nombre TGR Haas F1 Team, el jefe del equipo recalca que el programa de pilotos seguirá ampliándose y que Toyota está poniendo especial atención en nutrirlo con talento con opciones reales de llegar a la parrilla.
Desde Japón, el presidente de Toyota Motor Corporation, Akio Toyoda, ha explicado que la experiencia compartida durante la temporada 2025 fue determinante para dar este nuevo paso. Según el máximo dirigente, los resultados del trabajo conjunto han servido para que los jóvenes pilotos e ingenieros de TGR tomen confianza en sus capacidades y aspiren a metas mayores dentro del automovilismo internacional.
Toyoda insiste en que esta nueva fase de la alianza con Haas acelera el mantra “Personas, Producto, Pipeline” como nunca antes, y que el objetivo es crear “una cultura y un equipo para el futuro” junto a Gene Haas, Komatsu y el resto de la estructura. Aunque el fabricante no habla de un regreso oficial como constructor, el tono de sus mensajes muestra una implicación creciente en la categoría, algo que no pasa desapercibido para el resto de la parrilla.
Impacto en la parrilla y continuidad de otras alianzas
La llegada de Toyota como patrocinador principal supone también un reajuste en el ecosistema comercial de Haas. MoneyGram, que había ostentado el rol de title sponsor en las últimas campañas, dejará de ocupar ese puesto protagonista, cerrando así una etapa de algo más de tres años en los que su logotipo fue uno de los más visibles en el monoplaza estadounidense.
Este movimiento no implica, no obstante, una ruptura con otros socios técnicos del equipo. Haas mantiene acuerdos clave para el suministro de componentes y unidades de potencia con otros fabricantes, unas relaciones que se han mostrado fundamentales desde su desembarco en la F1. El papel de Toyota se centra en la esfera del patrocinio principal, el desarrollo tecnológico compartido y la formación de personal, mientras que la estructura deportiva seguirá apoyándose en la actual red de colaboración que ha permitido al equipo consolidarse en la zona media de la parrilla.
En términos competitivos, la escudería llega a esta nueva etapa con uno de sus mejores registros recientes. Con más de 70 puntos en el campeonato de constructores de 2025 y su mejor cosecha desde 2019, Haas confía en que el refuerzo de recursos e infraestructura que aporta Toyota ayude a dar un salto adicional en la lucha por posiciones más altas, especialmente en un contexto donde el límite presupuestario obliga a optimizar cada inversión.
Presentación del VF-26 y test privados en Barcelona
El primer gran hito visible de esta nueva era será la puesta de largo del VF-26, el coche con el que TGR Haas F1 Team afrontará el comienzo del nuevo ciclo reglamentario. El equipo ha confirmado que la presentación se hará de manera virtual el 23 de enero, en un evento online en el que se espera ver por primera vez la nueva imagen con la marca Toyota muy presente en la decoración.
Tras ese lanzamiento digital, la escudería tiene programados tres días de pruebas privadas en el Circuit de Barcelona-Catalunya, entre el 26 y el 30 de enero, aprovechando la climatología y la variedad de curvas del trazado catalán para recopilar información de cara a la pretemporada oficial. Esta elección refuerza el peso de Europa, y en particular de España, como escenario clave en la fase de desarrollo inicial del nuevo monoplaza.
En esos test, además de rodar con los pilotos titulares, se espera que los jóvenes del programa de desarrollo de TGR continúen sumando kilómetros y experiencia, enlazando el trabajo realizado con el VF-23 en los TPC con los requisitos específicos del nuevo coche. Para el público europeo, y para la afición española que sigue de cerca los entrenamientos en Montmeló, será una de las primeras oportunidades de ver en acción la alianza Haas-Toyota en configuración prácticamente definitiva.
Todo este entramado de acuerdos comerciales, colaboración técnica y programas de formación dibuja un escenario en el que Toyota refuerza su peso en la Fórmula 1 sin comprometerse todavía con un proyecto de fábrica clásico. Para Haas, supone probablemente el respaldo más sólido que ha tenido desde su llegada al campeonato, en un momento en el que los cambios reglamentarios pueden barajar de nuevo la jerarquía de la parrilla. Si la asociación cumple lo que promete sobre el papel, el nuevo TGR Haas F1 Team puede convertirse en uno de los focos de atención tanto en la pista como en los despachos durante los próximos años.