El sector del automĂłvil en Venezuela lleva varios años de capa caĂda. La situaciĂłn que vive el paĂs, con el enrocamiento en el poder de Nicolás Maduro, es insoportable. La economĂa de uno de los paĂses más ricos del mundo (en materias primas) está hundida y su recuperaciĂłn no parece visible en el corto plazo. Máxime cuando están asfixiando a las multinacionales con elevados impuestos, imposibilidad de acceder a divisas extranjeras y en Ăşltimo extremo les expropian sus instalaciones productivas.
General Motors es la empresa agraviada por el gobierno de Venezuela en esta ocasión. Al parecer, un concesionario de la capital, Caracas, la denunció hace 17 años porque el grupo americano le retiró la licencia de concesionario por un «ineficiente desempeño». Este proceso judicial lleva abierto más de una década y parece que se ha resuelto a favor del denunciante pues General Motors ha visto cómo pierde su fábrica de Valencia.
El conglomerado americano iniciĂł su actividad industrial en Venezuela en el año 1948 y durante estos años su actividad ha sido estable. La situaciĂłn que vive ahora General Motors es similar a la que otras empresas extranjeras han vivido. En base a la resoluciĂłn judicial, que señala a la multinacional americana como culpable, el gobierno venezolano ha expropiado su fábrica. Además, esta no ha sido la Ăşnica instalaciĂłn que ha caĂdo en manos del gobierno, pues tambiĂ©n se habrĂan quedado con un concesionario de Chevrolet situado en la ciudad de Maracaibo.
La planta de Valencia (situada a unos 150 kilĂłmetros de Caracas) tiene una capacidad productiva de 45 mil unidades anuales y da trabajo a unos 2.700 trabajadores. Tras su cierre por parte del gobierno del paĂs Ă©stos han perdido su puesto de trabajo y han quedado en la calle. Además, no sĂłlo afecta a lo trabajadores, sino que los 79 concesionarios de General Motors en el paĂs tendrán que cerrar sus puertas en un corto periodo de tiempo.
En vista de la situaciĂłn, y los 95 millones de dĂłlares que se le piden a General Motors en concepto de costas judiciales, la multinacional ha decidido marcharse del paĂs. Cancelar sus operaciones ha sido lo más fácil, pues la situaciĂłn en el paĂs es muy delicada y en cualquier momento esta situaciĂłn podrĂa darse. La Ăşnica actividad que se mantendrá por parte de General Motors en el paĂs es el servicio post venta y la venta de repuestos y piezas para sus vehĂculos.
Fuente – General Motors