Fernando Alonso ha vuelto a ganar en la tercera carrera del mundial de resitencia o WEC 2018. El Toyota nº8 pilotado por Fernando Alonso, Kobayashi y Buemi ha sido el que ha conseguido la victoria a pesar de salir segundo y de haber caído a una distancia de unos 20 segundos por el pobre ritmo del piloto japonés. El coche 7 de Kobayashi, Conway y Pechito hizo ayer la pole, saliendo desde la primera posición y marcando siempre un buen ritmo. En cambio, en el relevo de Alonso ha conseguido acercarse y meterle el morro a Conway para adelantarlo y posicionar al 8 primero.
Después, un buen relevo de Buemi los ha acercado de nuevo tras los problemas del relevo del japonés que ha perido muchísimo tiempo. El piloto suizo se ha acercado y adelantado al nº7 porque se le veía presionado y ha cometido un error que le ha costado una salida de pista y una reincorporación brusca a la pista rozando el fondo y dañando el fondo y difusor del coche, además de algunos apéndices aerodinámicos. Eso le ha costado algunas décimas de tiempo por vuelta al final de la carrera para que el nº8 se escapase aún más. No obstante han tenido un doblete… así que bien por los Toyota TS050 Hybrid.
Una carrera que parecía difícil o imposible para Fernando Alonso, pero que nuevamente han vuelto a conseguirlo. Así que esta victoria se suma para el LMP1 de Alonso junto con Spá y Le Mans, ahora también en lo más alto del podio de las 6 horas de Silverstone del WEC 2018. La distancia entre ambos Toyota en puntos se hace mayor con una ventaja de unos 26 puntos con respecto al segundo, pero aún quedan más carreras y muchos puntos en juego…
Eso en cuanto a los LMP1 de Toyota, pero los LMP1 preivados también han tenido sus más y sus menos, al igual que las luchas de los LMP2, GTE-P y GTE-A. Los Rebelion han sido los dos LMP1 privados siguientes, con el Jackie Chan LMP2 como ganador de su categoría seguido por el Signatech. Luego vienen los GTE-Pro con victoria de AF Corse seguido del Porsche 91, en los GTE-Am han ganado los Dempsey 77 seguido por TF Sport 90. Una pena lo que le ha ocurrido al coche de Jenson Button en su casa, con una rotura de motor ante su público. Hemos visto varios trompos, accidentes y toques en la salida y a lo largo de la carrera, etc. No han sido para nada aburridas y con emoción hasta el final.