Continuando con los consejos a la hora de verificar visualmente las bujías y saber cuándo cambiarlas, en esta ocasión nos toca hablar sobre cuestiones que afectan al encendido y fallas eléctricas que dañan rápidamente las bujías.
Muy diferente a los problemas relacionados con depósitos, las fallas eléctricas que pueden llegar a destruir una bujía son un serio problema para el motor, pudiendo inclusive ocasionar graves daños a la integridad del coche.
Lo recomendable siempre es verificar los cables de las bujías, evitando así los cortocircuitos y daños mayores.
Una de las fallas más comunes es la existencia de excesivo calor en la zona de las bujías, causado por existencia de agua en el sistema de refrigeración, mezclas muy pobres (que generan una excesiva temperatura en la combustión), y fallas relacionadas al encendido del motor.
Esto es diagnosticado visualmente notando el aislador completamente blanco, sin depósitos ni daños, en contraste con electrodos complétamente erosionados, con daños muy avanzados.
Cuando encontramos fallas de pre-encendido, la bujía presenta el electrodo central completamente derretido, dañado o ausente, con el aislador negruzco o semi-derretido.
Esta falla es causada debido a un pre-encendido en la cámara de combustión, por lo que debemos verificar si la bujía es apta para ese coche, adecuada para el normal funcionamiento del motor y si la cantidad de chispa que produce es tolerada por la cámara.
Si esto es así, entonces la falla es relacionada a una mala mezcla, o a la acumulación de partículas en la cámara de combustión.