Bajo el lema «Precision Crafted Performance» Acura busca resucitar a su aletargado espíritu deportivo. La firma premium de Honda siempre se ha caracterizado por ofrecer modelos muy bien puestos a punto. Sin embargo, al tener su mercado centrado en Estados Unidos, ha ido dulcificando sus maneras con el paso del tiempo. Pero esto ha sido hasta ahora, que llega al mercado una nueva generación del sedán medio Acura TLX.
El destape, no oficial, del nuevo Acura TLX arrancó hace unas semanas. En concreto, con la filtración de su diseño a través de la documentación presentada en el registro de la oficina de patentes americana. Cuando la marca fue consciente de la situación, lanzó un par de vídeo teasers y algún dato oficial. Por último, anunció que su técnica no tendría nada que ver con su predecesor, al hacer uso de una plataforma inédita. Pero hay más…
Al final, el Acura TLX es más atractivo que el Opel Insignia
Como hemos mencionado, el diseño del Acura TLX se escapó gracias a su patente. En esos bocetos pudimos ver cómo evolucionaba el código estético de la firma, pero nos llevamos una sorpresa. Parecía que el sedán nipón se acercaba a la estética del Opel Insignia. No sería la primera vez que un modelo se inspira en otro, pero ahora que tenemos la versión definitiva, nos damos cuenta que hay más distancia de la que creíamos en principio.
El diseño del Acura TLX es deportivo, agresivo y musculoso. Como antaño, hace uso de líneas afiladas y marcadas para resaltar los diferentes planos de la carrocería. Destaca la característica parrilla Diamond Pentagon que evoluciona respecto a otros modelos de la marca. Los grupos ópticos, con tecnología LED, cuentan con luz de conducción diurna que se inspiran en las que lucía el Acura ARX-05 Prototype.
La vista lateral es una obra de arte y disimula muy bien los 4,95 metros que mide. El elemento que le da personalidad es la línea de tensión que nace tras el paso de rueda anterior y acaba en el posterior. Además, integra las manillas de las puertas, situando las delanteras más bajas que las traseras. Aquí también encontramos otra de las novedades del TLX: la caída de la línea del techo, la integración del tercer volumen y el alerón que lo corona.
Por último debemos echar un vistazo a la zaga. Dependiendo de la versión elegida los adornos y terminaciones pueden ser en fibra de carbono o piano black. Estos, se extienden por zonas como el alerón, el paragolpes o el difusor. El cromado, tan recurrente, también estará presente, repartiéndose por las salidas de escape o el logo de Acura. Ah, las llantas de aleación, de nuevo diseño, pueden ser de hasta 20 pulgadas.
Interior de calidad y diseño cuanto menos original
Si el diseño exterior del Acura TLX es deportivo y musculoso, en el interior pasa algo parecido. La originalidad se respira en todos y cada uno de sus rincones, básicamente, porque no recordamos a otro modelo que se le parezca. Destaca por incluir líneas rectas que, como ocurre en la carrocería, delimitan claramente qué zonas del salpicadero y túnel central estamos tocando. En particular, resalta la zona central media del salpicadero.
La conectividad estará garantizada a través del sistema infotainment True Touchpad Interface. Cobra vida gracias a una pantalla de 10,25 pulgadas que puede gestionarse a través de los mandos del túnel central o los ubicados en los brazos del volante. Este presenta una configuración deportiva, como los asientos tapizados en piel. Dependiendo de la terminación tenemos apliques en madera, piano black o fibra de carbono y aluminio.
El cuadro de instrumentos evoluciona respecto a su predecesor, incluyendo una pantalla de 7 pulgadas. Opcionalmente existe uno más completo y de 10,5 pulgadas. La conectividad es otro de sus puntos fuertes, estrenando la última evolución del sistema AcuraLink con WiFi 4G-LTE y actualizaciones remotas por aire. Por último, tampoco faltarán elementos como el sistema de audio premium Acura ELS Studio 3D.
Oferta mecánica y técnica moderna, poderosa y puntera
Para mejorar el posicionamiento del Acura TLX sus creadores han desarrollado una plataforma completamente nueva. Ya os hablamos de ella hace un par de días, principalmente del nuevo esquema de suspensión delantera que reemplaza a la más común McPherson. Gracias a la doble horquilla mejorará el paso por curva a elevada velocidad, sobre todo por aportarle una mejor adaptación a las iregularidades del firme.
Con todo, lo verdaderamente importante está bajo su capó. La gama arranca con el 2.0 litros turboalimentado que entrega un rendimiento final de 203 kW (276 CV) y 380 Nm de par máximo. Sin embargo, la salsa llega con la motorización que anima a la versión Type S. Encontramos un 3.0 litros V6 dotado de turbo. Su potencia no ha sido anunciada, pero los rumores apuntan a que superará, sin esfuerzo, los 380 CV y 475 Nm de par máximo.
Para gestionar semejante potencial, los ingenieros de Acura confían en una transmisión automática de 10 relaciones. La versión de acceso envía la fuerza del motor al eje anterior, pero el Type S cuenta con el sistema de tracción total a las cuatro ruedas Super Handling All-Wheel Drive (SH-AWD). Por ahora no se espera la llegada de versiones híbridas o eléctricas, aunque una vez supere el ecuador de su ciclo podrían arribar.
Y si te gusta, lo sentimos, el Acura TLX no llegará a Europa
Con todo, si el Acura TLX te ha gustado, tenemos una mala noticia. Como bien sabes, esta firma tiene limitada su actuación a un puñado de mercados. Por tanto, en Europa y España no está, ni a corto ni a medio ni a largo plazo, prevista su venta. Será prácticamente imposible que los veas circulando por nuestras carreteras, aunque si la red comercial de Honda en países como Alemania o Francia importan algunas unidades, quizá sí.
A EEUU llegará a inicios de 2021. Otros países como México o Canadá lo recibirán a lo largo del primer trimestre. ¿Su precio? Arrancará en los 35 mil dólares, aunque a quien importa si no lo podemos conducir.
Fuente – Acura
