Tras varios amagos a lo largo de la última década, el Ford Mustang híbrido vuelve a estar sobre la mesa. Fuentes especializadas y próximas a la firma apuntan a que trabajan en una variante híbrida de la actual generación S650. Pero no solo se quedan ahí ya que apuntan a que los prototipos ya están rodando en una fase conocida internamente como Technology Prove-Out. Por tanto, si te gusta el Mustang y sigues todo su legado igual te estás tirando de los pelos. Aunque cuidado, a veces la evolución no es mala per sé…
Aunque la compañía no ha realizado un anuncio oficial ni ha detallado un calendario, hay indicios sólidos de que el proyecto avanza. El programa se identificaría como S650E y, por ahora, sigue sin definirse públicamente el tipo exacto de hibridación que empleará. Con todo, en Ford quieren guardarse muy bien de cometer errores que acaben con la imagen de su modelo más mítico. Eso sí, con el Mach-E no se lo pensaron dos veces y, aunque les dieron, han logrado ganar la batalla al relato. Toma nota de todo lo que pasa.
Qué se sabe del proyecto S650E del Ford Mustang híbrido…
Según información publicada por medios como Ford Authority, ya existen mulas de pruebas que evalúan distintas soluciones de electrificación. Esto no implica un lanzamiento inmediato, pero sí que el desarrollo ha pasado del papel a la carretera, un paso clave para cualquier proyecto de producción. En paralelo, la cúpula de Ford ha reiterado su intención de mantener vivo el carácter de la saga Mustang a gasolina.
Por el momento no hay confirmación oficial del esquema técnico. Las opciones barajadas incluyen desde un sistema microhíbrido sobre el 2.3 EcoBoost hasta un híbrido convencional o enchufable unido al V8, algo que varios analistas ven con especial sentido para conservar el ADN del modelo.
- Híbrido ligero con función de apoyo eléctrico y mejora de respuesta a bajas vueltas.
- Híbrido autorrecargable con motor eléctrico que aporte par instantáneo y eficiencia.
- Híbrido enchufable con cierta autonomía en modo eléctrico, a costa de más peso.
Prestaciones y experiencia de conducción: qué podría cambiar…
La electrificación parcial abre la puerta a varios beneficios tangibles. El apoyo del motor eléctrico puede dar más par desde cero, mejorar recuperaciones y reducir consumos sin apagar el carácter del V8. También permitiría estrategias de control de tracción más finas y un funcionamiento más redondo en conducción diaria.
La contrapartida probable sería el incremento de masa total y el reto de integrar batería, electrónica de potencia y refrigeración sin comprometer el reparto de pesos ni la habitabilidad. El equilibrio entre prestaciones, eficiencia y sensaciones será el núcleo de la decisión técnica.
Y ¿por qué ahora podría llegar?
El encaje de un Ford Mustang híbrido se explica por un contexto cambiante. Por un lado, en Europa las exigencias de emisiones de CO2 cada vez más estrictas, con la normativa Euro 7 en el horizonte, empujan hacia la electrificación. Por otro, en Estados Unidos ha habido periodos de relajación regulatoria que enfrían la urgencia, aunque la tendencia global sigue siendo clara. Además Ford ha esbozado una hoja de ruta en la que su división Ford Blue contempla añadir alguna versión híbrida en toda la gama a medio plazo.
En ese marco, el Mustang figura como candidato natural para una variante electrificada que permita alargar su ciclo de vida sin por ello renunciar a su carácter. Medios como InsideEVs recuerdan que históricamente la mayoría de clientes del Mustang optan por el V8. Además dan datos publicados por Associated Press que sitúan esa preferencia en torno al 67% de las ventas. Bajo ese prisma, una hibridación alrededor del ocho cilindros encajaría mejor con la demanda real.
Cronología y vaivenes del proyecto…
La historia viene de lejos. En su día se anunció una gran inversión para preparar la fabricación de un Mustang V8 híbrido con un lanzamiento inicialmente previsto pocos años después, pero aquel plan no cuajó del todo. Posteriormente, la séptima generación del Mustang se presentó sin variantes electrificadas, lo que muchos interpretaron como un frenazo definitivo. El estado del desarrollo y avance sugiere que Ford está explorando soluciones técnicas en vehículos reales, un indicador más firme que los simples rumores.
Competición y sinergias internas en Ford…
Ford Performance (Ford Racing) reconoce que experimenta con trenes motrices híbridos. Esto permite trasladar aprendizaje a la calle y viceversa. Esa base técnica puede acelerar la madurez del proyecto y establecer una continuidad con enfoque de producto, manteniendo al Mustang competitivo en una década de transición. Todo ello se plantea sin interferir con el camino del Mach-E, el SUV eléctrico de la casa, que seguirá su propia evolución.
El coupé de dos puertas preservaría su identidad con una hibridación enfocada a rendimiento y eficiencia, más que a maximizar la autonomía eléctrica. Con la información disponible, la foto que se dibuja es la de un proyecto que ha pasado de los rumores a las pruebas reales, con el S650E como banco de ensayo y una solución de electrificación compatible con el V8. Quedan incógnitas clave por despejar, pero los movimientos recientes indican que esta vez el plan tiene más visos de convertirse en realidad.
Qué falta aún por confirmar…
No hay cifras oficiales de potencia, consumo o autonomía eléctrica, ni un posicionamiento definido entre HEV y PHEV. Tampoco se sabe si está cerrada la ventana de lanzamiento. Obvio que no es inminente y podría encajar en un restyling de mitad de ciclo o ya en la próxima evolución del modelo. Otra duda es su disponibilidad por mercados. Si la firma prioriza EEUU, una hipotética llegada a Europa dependería de cómo vean sus objetivos de emisiones, precio y volumen, además de la aceptación del cliente tradicional del Mustang.
Fuente – Ford Authority
Imágenes | Ford
Más información sobre este modelo
- Plazas 4
- Potencia 450 - 460 cv
- Consumo 8,9 - 12 l/100km
- Valoración 4,7