Ya se conoce el aspecto casi definitivo del Aston Martin Valkyrie. Un auténtico coche de carreras homologado también para calle, con más de 1.000 CV de potencia y las últimas tecnologías pensadas para batir todos los récords de velocidad. Con un precio estimado de 2,8 millones de euros nosotros no esperamos nada menos de él.
Según sus responsables, el modelo presentado ante los clientes preferentes de Aston Martin tiene casi el aspecto final que tendrá en producción. Los afortunados que asistieron a la demostración pudieron probar el Valkyrie en la pista, para ir abriendo boca antes de poder llevarse una de las 150 unidades para calle o de las 25 para circuito que se van a fabricar.
El jefe de Aston Martin, Andy Palmer, declaró que el Valkyrie «recorrerá el circuito de Silverstone tan rápido como un coche de F1». Un objetivo que permite entender las radicales características del superdeportivo, como su bajo peso de 1.000 kg o las inusuales formas de la carrocería, pensadas para optimizar al máximo su aerodinámica.
La aerodinámica del Aston Martin Valkyrie
Cuando se diseña un coche tan rápido la aerodinámica es crucial. No hay que olvidar que alcanzan una velocidad que puede mantener a muchos aviones en el aire. La diferencia es que en este caso el objetivo es mantener pegado el coche al suelo, no solo en las rectas sino también en las curvas. Un buen ejemplo del trabajo realizado en esta materia es que, bajo los dos asientos del Valkyrie, se encuentran dos grandes túneles que atraviesan el coche longitudinalmente para alimentar el enorme difusor trasero.