Mary Barra, CEO de General Motors, ya confirmó que apostarán todo su futuro a los vehículos eléctricos, conectados y con tecnología de auto conducción cuando comunicó que están sopesando la vuelta de Chevrolet, de nuevo, al mercado europeo. Tras esta confirmación hay mucho más que una simple cuestión de estrategia, y no es otra que lograr la masa crítica que necesitan para que sus inversiones sean rentables en el menor tiempo posible.
Con la venta de Opel (Vauxhall) al Grupo PSA han perdido un volumen productivo considerable (independientemente de que la firma alemana estuviera en números rojos) por lo que a la hora de realizar inversiones, han de repartir los costes entre un número menor de vehículos fabricados. Siendo de esta manera, no es de extrañar que los próximos lanzamientos de General Motors vayan por el camino de la electrificación y los todo camino y más si hablamos de uno de sus modelos estrella, el Chevrolet Volt.
El Chevrolet Volt (con «V», no con «B») fue el primer modelo híbrido-eléctrico de rango extendido que comercializó la nueva General Motors. Opel contó con su propia versión, el Ampera, aunque al igual que el modelo de la casa de la pajarita, su éxito fue nulo. Su relevo generacional llegó al mercado en 2015 y en esta ocasión, su hermano en lugar de estar en Opel, se posicionó en Buick (igual ya sabían en General Motors que se desprenderían de Opel).
En todo caso, y a pesar de que la actual generación lleva a la venta un par de años, Chevrolet ya ha confirmado que la tercera entrega de este modelo, abandonará la actual carrocería de forma fastback para pasarse a la moda SUV. Con esta migración de cuerpo, que no de alma, buscan la comentada masa crítica, pues no es lo mismo vender berlinas (que actualmente no gozan de buena salud) que vender todo caminos a casco porro, pues son los reyes del mercado.
Además, General Motors, no sólo piensa en las ventas, sino en las ganancias. Los SUV´s son los productos estrella en todos los mercados y los clientes han asumido como válido que deben pagar un precio más elevado por algo que realmente no existe. Por tanto, las cuentas ahora sí cuadrarían para la matriz de Chevrolet: mayor número de unidades vendidas por un mayor precio, es igual a una mayor rentabilidad y por tanto, recuperación en menor tiempo de la inversión realizada para su desarrollo.
2022 es el año elegido para que el nuevo Chevrolet Volt llegue al mercado americano. Habrá que ver si realmente se convierte en la gallina de los huevos de oro de la firma, o si por el contrario, con tanto cambio de cuerpo, el público al final lo rechaza.
Fuente – Chevrolet
