Me vais a perdonar el atrevimiento, pero esta carrera no me ha gustado. Es que ha sido tan buena y tan impresionante, que el destino, los elementos, equipos o pilotos, se podrían haber guardado algo del espectáculo demostrado hoy para futuras carreras. Estoy seguro que de muchos de los aficionados a este deporte coincidiremos en que es la mejor carrera que hemos visto esta temporada. Porque si ayer, en el repaso a la calificación os decía que numerosos títulos épicos que ponerle se pasaban por mi cabeza, la carrera de hoy da para un «best seller». El aguante y la casta frente a los todopoderosos, junto con una de las mayores remontadas que se han visto, mezcladas con la tímida lluvia que no llegaba, pero que empapó el asfalto para preparar los caóticos accidentes.
Hemos pasado de una carrera vendida a la seguridad del primero, a un caos donde todo podía pasar. Superar la calificación se mostraba tarea difícil, pero los truenos y el agua caída antes del inicio de la misma, puso nervioso a más de uno. El primero fué Kvyat que no consiguió arrancar el coche y acompaño en la salida desde el pit lane a un Lewis Hamilton con más hambre que cabeza en los primeros metros convirtiéndose en el segundo en cometer errores. Mientras, la carrera se lanzaba en intermedios, Fernando Alonso ya nos daba a entender el carrerón que iba a hacer ganando posiciones y peleando nuevamente contra Vettel por la posición, por su parte Rosberg ponía tierra de por medio en busca de la tranquilidad ante la amenazante lluvia que pronosticaban los equipos, y solo habían pasado tres vueltas.
Las vueltas pasaban y el asfalto se secaba, los equipos se volvían a equivocar en sus predicciones metereológicas, pero el circuito aun guardaba pequeños secretos. Uno de ellos se produjo cuando Ericsson pisaba de más el mojado piano y se iba directo contra las protecciones lo que obligó a salir el Safety Car y también a relucir la inteligencia de algunos como Ricciardo y Button que arriesgó más de la cuenta su confianza en el radar meteorológico y volvió a apostar por intermedios inútilmente. Mejor jugada le salió al australiano de RedBull que se encontró con el liderato de la carrera. Pero pero le salieron a Grosjean, que tendrá el honor de haberse accidentado con su Lotus con el ritmo del Safety Car en pista. Mientras, los cuatro primeros entraban en la siguiente vuelta, Williams sepultaría las aspiraciones de Bottas para la carrera y Fernando volvería a encontrarse con Vettel ganándole la partida esta vez.
Con este comienzo de carrera, mirábamos las vueltas que aún quedaban, pero mientras Alonso volaba y quitaba las vueltas rápidas que Ricciardo conseguía, aún estábamos transcurriendo las vuelta 17. En ese instante Vettel se encontraba entre los dos Mercedes y seguro que al pobre de Rosberg se le pasó alguna palabra mal sonante, cuando le dijeron por radio las ansias de su compañero por llegar a la estela de su monoplaza, pero resultaba bastante difícil adelantar al bueno de Vettel y su RedBull, no por el coche, si no por el delgado carril de asfalto seco que se había formado. Intento tras intento Hamilton salía de la aspiración del alemán, pero la humedad de la pista se comía la tracción de sus neumáticos.