El Salón del Automóvil de Barcelona acaba de abrir sus puertas esta misma mañana, aunque ayer ya hubo algún que otro evento a puerta cerrada y con algunos medios invitados. Nosotros estuvimos en la Group Night del Grupo Volkswagen en el Automobile Barcelona, donde hubo alguna declaración oficial más que interesante sobre los objetivos del grupo en España.
Luca de Meo, CEO de Seat y máximo representante de las marcas del Grupo Volkswagen en España, anunciaba que durante los próximos dos años llegarán a los concesionarios nada menos que 35 coches electrificados, de los cuales 20 son vehículos totalmente eléctricos. Las intenciones del grupo VAG son más que claras en todo el continente, con una fuerte apuesta en la movilidad sostenible.
De Meo estaba acompañado por Oliver Plume, CEO de Porsche AG y responsable de producción del Grupo Volkswagen, y Stefano Domenicali, CEO de Lamborghini. Entre los tres protagonizaron un coloquio sobre el futuro de la movilidad, la transformación de la industria del automóvil y hacen dónde se dirigen.
“Como veis, tenemos preparada una gran ofensiva eléctrica. Ahora necesitamos una red de infraestructura de recarga suficiente, apoyo multisectorial y el respaldo firme de la Administración”, declaraba Luca de Meo refiriéndose a las infraestructuras que necesitan los distintos países y que en España, como sabéis, no estamos precisamente muy bien preparados.
Algunas de las más interesantes novedades del Grupo que se pueden ver en el 2.500 metros cuadrados de los que dispone el fabricante en el Automobile Barcelona son el Lamborghini Terzo Millennio, los Porsche Mission E Cross Turismo y 911, los Seat Minimó y el-Born, los Cupra Formentor y e-Racer, los Audi e-tron y Q4 e-tron concept, los Volkswagen ID Buzz y ID Crozz, los Skoda Vision X y Vision RS, o el Bentley Continental GTC. Todos ellos bajo el lema “Future is On”.
El Grupo Volkswagen va a invertir 30.000 millones de euros en los próximos cinco años en movilidad eléctrica, teniendo el compromiso de ser una empresa neutral en cuanto a emisiones de CO2 en el año 2050. Y es que, después del escandaloso caso Dieselgate, el fabricante continúa limpiando su imagen poco a poco.