Mercedes-Benz se centrará en el desarrollo de nuevos motores eléctricos

Los vehículos eléctricos han llegado para quedarse. Esta frase, o expresión, la hemos oído miles de veces, pero para los fabricantes esconde un gran reto. El desarrollo de esta tecnología es muy costosa, y más, cuando deben compaginarla con los compromisos que ya tienen adquiridos. Éstos, son muchos y muy variados, pero los dos más importantes son: la hibridación y la evolución de sus actuales motores térmicos.

Por tanto, no es extraño que algunos fabricantes hayan decidido qué hacer en el presente para vivir en el futuro. Así, aparece el Grupo Volkswagen como el adalid de la electrificación, anunciando que a partir de 2040 no fabricará motores endotérmicos. A él, se han sumado otros, como Toyota, dispuesta a ser cien por cien híbrida. En tercer lugar está Mercedes-Benz, que se suma a la moda y anuncia que no evolucionará más sus motores de combustión.

Mercedes-Benz no evolucionará más sus motores endotérmicos

Es en estos días cuando Mercedes-Benz está presentando la última generación de sus motores «clásicos». Según el jefe de desarrollo de Daimler AG, Markus Schaefer, los esfuerzos de la firma deben ir dirigidos hacia la electrificación. Por ello, se van a tomar un descanso en cuanto a la familia de motores térmicos. De esta forma, podrán destinar gran parte de sus recursos económicos al desarrollo de nuevos motores eléctricos y las correspondientes baterías.

Esta paralización en el desarrollo de motores térmicos no es definitiva. Según Schaefer, si en un futuro se dieran las condiciones necesarias, reactivarían el trabajo, pues los propulsores actuales están a gran nivel tecnológico. Por tanto, podrán disminuir sus inversiones en esta parcela de la ingeniería. Aún así, no desaparecerá, pues hasta la completa implantación de los vehículos eléctricos, podrían necesitarlos.

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Habrá que ver hasta qué punto Mercedes-Benz puede acometer esta transformación. Por ahora, la oferta de modelos eléctricos EQC está teniendo buena acogida por parte del mercado. La contra parte está en unos precios elevados y unos niveles de autonomía, que siendo muy correctos, aún están lejos de lo que seria óptimo. La prohibición de venta de vehículos térmicos en gran parte de Europa llegará en 2040, por lo que aún tienen tiempo para decidir su futuro.

Fuente – Auto Motor un Sport