Michelin ha dado un paso adelante en la industria sostenible al anunciar la construcción de una innovadora planta para la producción de la molécula 5-HMF en Francia. La decisión forma parte de su apuesta por materiales de origen biológico, con vistas a reemplazar ingredientes derivados del petróleo utilizados en múltiples sectores. Esta iniciativa, además de impulsar el compromiso medioambiental de la compañía, abre la puerta a mercados en plena transformación ecológica.
El desarrollo de esta planta, ubicada en la plataforma Osiris en Péage (Roussillon), representa una inversión de 60 millones de euros, en parte subvencionada por organismos franceses y europeos dedicados a la innovación y la economía circular. Está previsto que la planta esté operativa en 2026 y ofrezca una capacidad de producción anual de 3.000 toneladas de 5-HMF, posicionándose como la mayor planta de este tipo a nivel mundial.
Características y ventajas de la molécula 5-HMF
El 5-HMF, conocido científicamente como 5-hidroximetilfurfural, es una molécula de origen renovable, no tóxica y obtenida a partir de la transformación de fructosa mediante química verde. Su estructura la convierte en una pieza clave para sustituir productos químicos de origen fósil, a la vez que permite crear derivados útiles en sectores tan variados como la cosmética, la industria, la agricultura o la electrónica.
Esta sustancia, apodada “el gigante dormido” por su amplio margen de aplicación, es considerada una de las pocas que combina disponibilidad industrial, seguridad y origen europeo. Michelin ha apostado por ella, buscando no solo mejorar las condiciones laborales y de salud de los operarios mediante resinas adhesivas no tóxicas, sino también extender su uso a nuevas áreas de negocio.
Alcance del proyecto y socios estratégicos
La iniciativa, denominada CERISEA, se enmarca en una colaboración que reúne a empresas industriales, entidades académicas y organismos públicos, todos ellos volcados en la promoción de la innovación industrial y la transición ecológica. El respaldo financiero de la ADEME y del Circular Bio-based Europe Joint Undertaking (CBE JU) ha sido clave para la viabilidad del proyecto. Se espera que la planta genere 30 empleos directos y sirva de palanca para el desarrollo de una cadena de suministro europea firme, con una proyección de mercado que podría superar las 40.000 toneladas para el año 2030.
Actualmente, la disponibilidad europea de 5-HMF es limitada, ya que la mayor parte se produce en Asia y a precios elevados, lo que dificulta su adopción masiva. Con la puesta en marcha de esta planta, Michelin pretende asegurar el suministro para su filial ResiCare y reducir los costes, al mismo tiempo que se incrementan las posibilidades de experimentar con nuevos materiales sostenibles.
Evolución de Michelin en el uso del 5-HMF
Michelin ha recorrido un largo camino desde que, en 2008, empezó a buscar alternativas ecológicas para sus resinas adhesivas, tradicionalmente basadas en formaldehído y resorcinol. Fue en 2016 cuando la empresa incorporó el 5-HMF a sus fórmulas para productos fuera del ámbito del neumático, como tableros contrachapados. Desde entonces, la colaboración con instituciones como el IFPEN ha permitido avanzar en los procesos de obtención de esta molécula a partir de materias primas más accesibles y sostenibles.
Hoy por hoy, el 5-HMF se emplea en distintas aplicaciones desarrolladas por Michelin ResiCare, incluyendo abrasivos y compuestos técnicos. La perspectiva de aumentar la escala de producción supone un impulso adicional para emplear esta molécula en productos industriales aún más diversos, reduciendo progresivamente la dependencia de componentes fósiles considerados preocupantes para la salud y el medio ambiente.
Imágenes | Michelin