Prueba Subaru XV 2.0D, todocamino de verdad

Los tiempos han cambiado y en casas en donde tradicionalmente descansaba en el garaje un monovolumen, hoy en día es muy normal que lo haga un todocamino. Lo mismo pasa con quien vive en la ciudad y siempre ha conducido un utilitario, ahora puede tener un SUV con medidas compactas y capacidades urbanitas. La fiebre del SUV parece que no tenga cura, no hay fin para este ascenso que se nutre de nuevos segmentos en cuanto pestañeamos. El Subaru XV es una de las apuestas más interesantes del mercado. No es el más barato, ni tampoco es más equipado. Quizás tampoco sea el más atractivo, pero se coloca entre los más polivalentes del mercado. Bienvenidos a la prueba del Subaru XV 2.0D.

El modelo nipón lleva en el mercado desde 2012. Desde entonces ha sufrido un restyling que ha mejorado su apariencia estética, aunque tímidamente, y sus capacidades así como el equipamiento interior. La gama de motores igualmente fue revisada para que sus mecánicas se adaptasen a la legislación Euro6, pero se mantuvieron las mismas opciones que ya ofrecía, un diésel de 2.0 litros y 147 caballos de potencia y dos gasolina de 114 y 150 CV. Según la propia Subaru el 90% de las piezas del bloque diésel son de nueva factura, pese a que los números sean las mismos. Todos ellos son de cuatro cilindros y están dispuestos en una configuración bóxer.

El más fornido

El diseño del Subaru XV puede no ser el que más cabezas haga girar en la calle, pero su apariencia musculosa es capaz de robarle a tu atención algunos segundos. Nos encontramos con una parte frontal realmente atractiva, te diría que incluso es poderosamente deportiva. La mirada del todocamino tiene mucha personalidad, y pese a que comparta rasgos con su hermanos el Forester, consigue dotar al XV de carácter propio. Estos faros están perfilados y se colocan a ambos lados de una pequeña calandra. Si miramos hacia abajo nos fijaremos en los cromados y las protecciones bajas del paragolpes y si llevamos nuestra mirada hacia arriba nos llamará la atención los nervios del capó, un recurso que siempre regala al conjunto un aspecto más fornido.

En líneas generales lo que vemos es eso, un coche fornido y con apariencia de todocamino compacto. La línea del perfil puede confundirnos, pues el camino esbelto de esta deja en nuestra retina un modelo con aspecto de hatchback pero con altura y atuendo de crossover. En esta zona destacan las llantas de 17 pulgadas de genial diseño y alerón rediseñado en la luneta trasera. En cuanto a la parte trasera, lo peor en el diseño del XV en mi opinión, hablamos de una estética con líneas rectas, con unos pilotos con formas cuadradas y paragolpes muy musculado. En resumen, 4,45 m. de largo, 1,78 m. de ancho y 1,57 m de alto para un coche que a pesar de tener la altura libre al suelo más dilatada del segmento, 22 cm., derrocha más carácter crossover que todocamino.

Interior mejorable pero bien equipado

A primera vista, el interior del Subaru XV está muy bien terminado. Cuenta con una consola central ordenada, con una pantalla de siete pulgadas y control táctil y poca botonería que agobie al conductor. Encima de la mencionada pantalla que controla el sistema de info-entretenimiento se instala otra más de dimensiones más pequeñas que nos da información relevante al vehículo como el consumo de combustible o la eficiencia de la tracción total permanente. Los materiales que recubren el salpicadero son duros en su mayoría, combinando tonos entre negro brillante y gris. La calidad no es mala aunque, como todo en esta vida, es mejorable. Por último, en el túnel de transmisión encontramos varios huecos portaobjetos y la palanca de accionamiento del freno de mano colocada en una posición molesta para el conductor.

El puesto de conducción te sitúa en una posición típica off-road y desde aquí tienes muy buena visibilidad para controlar lo que ocurre delante de ti y detrás, con una luna trasera que deja ver correctamente el tráfico. El volante, lucido por costuras en contraste naranjas, tiene un diseño atractivo y buenas dimensiones. Tras él encontramos el cuadro de instrumentos con fondo azul que también nos informa a través del ordenador de a bordo de algunos parámetros del vehículo o de nuestro viaje.

Parece más pequeño de lo que es

En apariencia el Subaru XV parece ofrecer menos habitabilidad de la que realmente ofrece. En las plazas delanteras el espacio es bueno. Si bien, he de decir de nuevo que por culpa de la colocación palanca de freno de mano el espacio reservado para el conductor puede estar algo comprometido, aunque no puedo decirte que la parte delantera sea incómoda. En las filas traseras se viaja con comodidad, y es que el espacio es respetable incluso en la plaza del medio en donde normalmente las dimensiones están limitadas. Eso sí, hay que tener en cuenta que la altura libre al techo es solo correcta y que el túnel de transmisión puede molestar al tercer ocupante. Para terminar, el maletero cuenta con 380 litros que se amplían a 1.270 litros si plegamos los asientos, que terminan dejándonos un suelo totalmente plano. Un baúl de lo más justo del segmento.

Motor diésel bóxer de 147 caballos de potencia

Como te he anunciado en las primeras líneas, el Subaru XV cuenta con una única opción diésel dentro de su gama mecánica. Hablamos de su bloque de cuatro cilindros y disposición bóxer con 2.0 litros de cubicaje y 147 caballos de potencia, una energía que a priori parece suficiente para mover con soltura los 1.520 kg. de peso que declara el japonés. Este motor cuenta también con una cifra de par de 350 Nm disponibles a 1.600 rpm, una fuerza que gestiona la caja de cambios manual de seis relaciones. El Subaru XV cuenta con tracción total permanente, por lo que en este caso quien se encarga de transmitir la potencia al asfalto son sus cuatro ruedas.

Potencia poco apreciable

Pese a que contamos con nada menos que 147 caballos de potencia bajo el capó, este motor no parece ofrecer una cifra tal de caballos. Además de que tratamos con una mecánica lineal, hasta pasar las 2.000 vueltas el XV 2.0D es tímido en reacciones. Pasando esa cifra parece despertar, aunque tampoco nos sorprende. Ojo, no estoy diciendo que el Subaru XV no corra o no acelere como debería, es más, completa el 0-100 km/h en unos 9,3 segundos, mucho mejor que algunos, pero sí necesitamos apurarlo para sacarle el jugo a su motor de 2.0 litros.

Un coche cómodo y de reacciones suaves

La clave de este Subaru XV es lo bien que se viaja con él. Si sumamos el buen mullido de los asientos al tarado de las suspensiones, nos da como resultado un coche muy apto para viajes largos. Y es que me ha recordado por comodidad incluso al Kia Sorento, un SUV más grande que el XV. La configuración de las suspensiones no nos dejan reacciones drásticas, son tan suaves en gestión de irregularidades que me han decepcionado en este apartado. Realmente me esperaba un coche “más duro”, más deportivo en conducción pues la suavidad de esta suspensión no permite que juegues en enlazadas más rápido de la cuenta.

Pero claro, esto no es un contra en el Subaru XV pues estamos en un segmento SUV y aquí la deportividad no tiene por qué estar presente. La dirección también tiene un tacto cómodo, suave, es muy apta para incursiones diarias en la ciudad. El único apartado que nos deja un lado deportivo es el de la caja de cambios, pues el tacto de la palanca es firme, con recorrido cortos y un guiado perfecto.

De lo mejor en conducción off-road

Que tengamos una suspensión en líneas generales blandas es un “daño colateral” de sus grandes capacidades de todocamino. El Subaru XV cuenta con la mejor conducción off-road del segmento, gracias a su tracción total permanente y su tarado. En pistas puedes ir realmente rápido con él, no aprecias los baches engullendo las irregularidades del camino sin despeinarse. Su altura libre al suelo, de 22 cm., es de las más altas del segmento y permite que ataquemos entradas de caminos, pendientes y demás exigencias con las que nos encontramos fuera del asfalto sin problemas.

Sistema All-Wheel Drive

El Subaru XV cuenta con el sistema All-Wheel Drive, la tecnología de tracción total permanente que lleva en la compañía desde 1972. Este sistema es de los más eficientes que encontramos en el segmento, pues cuenta con un desempeño óptimo en prácticamente cualquier situación. Una de sus virtudes en la gestión del balanceo del vehículo, el cual ayuda a que en ningún momento el XV pierda tracción aunque se encuentre balanceado en términos de peso. A través de la pequeña pantalla que se sitúa por encima de la consola central podemos informarnos del trabajo de este sistema, controlando en todo momento la gestión de potencia y la adherencia de las ruedas.

Consumos correctos

El Subaru XV anuncia un consumo medio de 5,4 l/100 km, hablando de 4,6 l/100 km en consumo extraurbano y de 6,8 l/100 km en ciudad. La realidad de nuestra prueba ha sido que el japonés ha marcado unos consumos extraurbanos de unos 6 l/100 km en autovía a 120 km/h y de 5,5 l/100 km en carretera secundarias. En ciudad se ha mantenido rondando los 7 litros en todo momento.

Conclusiones

El Subaru XV no es el más atractivo del segmento, el más habitable o el más barato, pero tiene personalidad y unos acabados correctos. Su motor diésel de 147 CV no te dejará pegado al asiento pero bastará para completar adelantamientos con soltura, y sus capacidades off-road te dejarán completamente prendado. Tiene que mejorar en calidad y en el diseño de su interior, además de ajustar su precio.

Acabados Subaru XV

El Subaru XV ofrece en su gama hasta tres niveles de equipamiento. Si bien, el modelo japonés comienza ofreciéndonos el acabado Sport, un paquete que por 25.275 euros incluye llantas de 17 pulgadas o la pantalla táctil de siete pulgadas. Más arriba nos encontramos con el Executive, que incluye entre otros accesorios el sistema de info-entretenimiento Subaru Starlink o el encendido de faros. Por último, en la cima de la lista de equipamiento se sitúa en Executive Plus que nos ofrece asientos de cuero o techo solar.

Sport

• Faros HID
• Cristales sobretintados
• Asientos térmicos
• Lavafaros
• Encendido automático de faros
• Volante y pomo de cambio en cuero
• Climatizador automático bizona
• Retrovisores térmicos
• Seis altavoces
• Cámara de visión trasera
• Control de crucero

Executive

• Navegación Subaru Starlink
• Audio de alta calidad
• Detalles decorativos

Executive Plus

• Tapizado en piel
• Techo solar eléctrico
• Asiento del conductor eléctrico
• Acceso y arranque sin llave
• Acceso con código PIN

Precios Subaru XV

Opinión del editor

Galería de imágenes