A pesar de su tamaño y excesiva opulencia, el Rolls Royce Ghost es el modelo de acceso al catálogo de la firma inglesa. La primera generación del «Fantasma» nació en el año 2009 y con varias actualizaciones ha llegado hasta nuestros días. Sin embargo, debemos mencionar que este modelo resurgió para rendir sentido homenaje al mítico Silver Ghost de 1906. Ahora, la casa de Goodwood presenta su segunda generación.
Cuando Rolls Royce inició la campaña de teasers hizo un anuncio: el nuevo Ghost sería el más avanzado y tecnológico de su segmento. Además, no compartiría ningún elemento estructural, técnico o de acabado con su predecesor. Tan sólo habría dos excepciones a esta importante evolución: el Spirit of Ecstasy y los paraguas que se alojan en la parte interior de las puertas. Si quieres conocer en qué cambia, no te pierdas un detalle, te sorprenderá.
La principal evolución del Rolls Royce Ghost 2020 está en su frontal
Lo primero que impacta al ver al nuevo Rolls Royce Ghost es el tamaño de su carrocería. Alcanza los 5,55 metros de longitud, es decir, 9 centímetros más que su predecesor. La anchura crece en tres centímetros para alcanzar los 1,98 metros y la altura se queda en 1,57 metros. Pero el dato más llamativo tiene que ver con la distancia entre ejes que se sitúa en nada menos que 3,3 metros. Sin embargo, su diseño compensa a la perfección estas cotas.
El principal cambio en la fisonomía del Ghost lo encontramos en el frontal. Los responsables han apostado por mantener la verticalidad del conjunto, aunque han añadido unos grupos ópticos con tecnología Láser LED y una parrilla de gran tamaño. Este elemento mantiene le diseño y tamaño visto en otros Rolls. Por último, tenemos un paragolpes discreto que incluye una generosa toma de aire inferior que se extiende bajo los faros.
La vista lateral tiene un formato similar al del actual Ghost. Esto es, que cuenta con puertas traseras de apertura suicida. Para ayudar en la entrada y salida tienen sistema automático eléctrico que se activa al tirar de la maneta. Desde fuera, cuenta con un botón para que la puerta se cierre de forma automática. Por último tenemos la zaga. La caída del techo es más estilizada, como los grupos ópticos o paragolpes con doble salida de escape.
Interior de ejecución sublime y tecnología a la última
De puertas adentro la evolución del nuevo Rolls Royce Ghost es notable. Como era de esperar, las líneas básicas de diseño mantienen la elegancia y sobriedad que todo aficionado de la marca espera encontrar. Sin embargo, huye de las últimas modas imperantes en el sector. Esto es, que el salpicadero está estructurado en tres zonas bien diferenciadas a la par que mantiene los controles justos y necesarios.
Así, en la zona superior tenemos una pantalla central táctil para gobernar el sistema infotainment y los principales parámetros de conducción. La parte media está ocupada por las salidas de ventilación y los controles de acceso directo al sistema infotainment. Ya, en la zona baja encontramos los mandos físicos para regular la climatización. Por último, y sobre el túnel central aparecen el selector del cambio y ajustes de la suspensión.
Tampoco podemos pasar por alto el cuadro de instrumentos digital configurable que ha tras el nuevo volante. A todo ello, debemos sumar un arsenal de ayudas activas a la conducción como alerta de peatones y fauna salvaje (diurno y nocturno), control de crucero adaptativo, cámaras 360º o alerta de colisión. Tampoco faltarán Head-Up Display, un hotspot WiFi, sistema de aparcamiento automático o la última tecnología en navegación 3D.
Otras novedades que llegan al Ghost son el sistema de purificación del aire interior (MEPS) o el sistema de sonido premium Bespoke Audio con 18 altavoces y 1.300 vatios. Todo, aderezado con hasta 100 kilos de material aislante para reducir el ruido exterior y de rodadura. Además, dispone del programa Bespoke de personalización que puede crear hasta un techo estrellado con más de 850 estrellas gracias a 152 LED´s.
Mecánica potente y soluciones técnicas de vanguardia
A nivel técnico, el Rolls Royce Ghost 2021 está basado en la plataforma de aluminio que da vida al Cullinan. Sin embargo incorpora elementos inéditos, como una suspensión denominada Magic Carpet Ride, un eje trasero direccional o un renovado sistema de tracción total a las cuatro ruedas. Otra de las novedades está en la suspensión neumática autonivelante que junto al sistema de dirección trasera mejora la maniobrabilidad del conjunto.
En cuanto a la oferta mecánica se refiere, el nuevo Ghost recurre al bloque 6.75 litros V12 Bi-Turbo con 571 CV de potencia y 850 Nm de par motor. Esta «bestia» está gestionada a través de una transmisión automática de 8 relaciones que le permite acelerar de 0 a 100 kilómetros por hora en 4,8 segundos. Además, firma una velocidad máxima de 250 kilómetros por hora, cifras nada desdeñables para un modelo que pesa 2.500 kilos.
Fuente – Rolls Royce