Toyota, reconocida por su liderazgo en tecnología híbrida, parece estar dando un giro importante en su estrategia de electrificación. Aunque la compañía logró establecerse como un referente en el mundo de los híbridos, su incursión en los vehículos eléctricos con el Toyota bZ4X ha enfrentado múltiples desafíos, comenzando por la dificultad del nombre. Ahora, Toyota ha decidido dar un paso inusitado: cambiar completamente la denominación de este coche, con la intención de mejorar su aceptación en el mercado.
El Toyota bZ4X, lanzado en 2022 como el primer SUV eléctrico de la marca en mercados clave como Europa y EEUU no ha conseguido el nivel de ventas esperado. Una de las razones principales de este fracaso podría estar en el propio nombre. Según explicó Patrick Ryan, director regional de Toyota Canadá, el complejo término «bZ4X» ha sido un obstáculo para que el público lo reconociera como tal. Y es que para muchas personas es más difícil recordar un nombre alfanumérico que una denominación clara y sencilla.
El significado detrás del nombre del Toyota bZ4X…
El nombre de este modelo no fue elegido al azar, aunque poca gente lo sabe. En la presentación del vehículo, Toyota explicó que «bZ» es la abreviatura de «Beyond Zero» (Más allá de cero emisiones), haciendo referencia a su compromiso con la movilidad sostenible. El número «4» indica el tamaño del vehículo, similar al RAV4, mientras que la «X» denota que es un SUV crossover. Sin embargo, esta explicación técnica no ha sido suficiente para captar la atención del consumidor medio, que prefiere nombres más familiares y fáciles de recordar.
El resultado ha sido evidente: las ventas del bZ4X están muy lejos de alcanzar las cifras de otros modelos eléctricos. En Europa, por ejemplo, se han registrado apenas 22.559 unidades en lo que va de año 2024, un dato ínfimo en comparación con las más de 180.000 unidades del Tesla Model Y en el mismo período. En países como EEUU y Australia, los números son igualmente bajos al compararlos con las ventas de otros vehículos dentro del mismo segmento.
¿Cuándo llegará el nuevo nombre?
Según las últimas palabras de Patrick Ryan recogidas en Motor Illustrated, Toyota ya trabaja en el cambio hacia un nuevo nombre para este modelo, el cual podría concretarse en 2026. Aunque no se ha anunciado cuál será el nuevo nombre, existen especulaciones sobre la posibilidad de utilizar términos más simples y reconocibles, como el recientemente relanzado «Urban Cruiser» para otros modelos eléctricos de la marca en Europa.
El cambio no se limitaría al nombre, pues podría coincidir con un rediseño del bZ4X o la llegada de nuevas características técnicas. Actualmente, el vehículo se ofrece en España con versiones que varían entre 204 y 218 CV, y una autonomía que oscila entre los 416 y 504 kilómetros dependiendo de la configuración, todo a un precio que ha bajado significativamente desde su lanzamiento. Mientras que inicialmente superaba los 49.000 euros, gracias a las últimas ofertas, ahora puede adquirirse por menos de 35.000 euros en algunos casos.
Un cambio estratégico en Toyota para enfrentar desafíos
El renombramiento del bZ4X no es solo una cuestión de lenguaje. Es una estrategia para revitalizar las ventas de un modelo cuya complejidad en la denominación podría haber alejado a muchos compradores potenciales. Toyota también busca competir mejor frente a rivales que han sabido conectar eficazmente con el mercado, como Tesla, Hyundai o Kia, quienes apuestan por nombres más directos y comerciales.
Además de esto, el nombre «bZ4X» enfrenta otro reto de percepción: la relación con casos iniciales de fallos en su diseño, como problemas en la fijación de los tornillos de las ruedas, lo que obligó a una llamada a revisión apenas unos meses después de su lanzamiento. Si bien esos problemas ya están resueltos, cambiar el nombre podría ser una forma de marcar un nuevo comienzo para el modelo y limpiar cualquier asociación negativa que persista.
En cuanto a los nuevos nombres, muchos analistas sugieren que Toyota podría abandonar por completo su esquema de denominación alfanumérica con el prefijo «bZ». El objetivo sería simplificar el proceso de compra para los consumidores, quienes no tienen que descifrar códigos para entender qué ofrece cada modelo. Al mismo tiempo, esto permitiría a Toyota seguir una línea más coherente con el resto de su gama.
Fuente – Motor Illustrated
Imágenes | Toyota