Hasta hace unos cinco años Volvo estaba en una situación complicada. Geely, su nueva matriz, había invertido una ingente cantidad de dinero en el desarrollo de sus nuevas plataformas modulares. Gracias a ellas, ha podido actualizar su oferta, que si bien era atractiva, estaba un paso por detrás de sus rivales. Todo ello, repercutía en unas ventas que no terminaban de acercarse a los números que sus responsables estimaban oportunos.
Ahora, tras tanto esfuerzo, están disfrutando de las mieles del éxito. Para muestra, las más de 340 mil unidades que han vendido en la primera mitad del año. Esta cifra, la han alcanzado, en parte, gracias a la llegada a la oferta del todo camino compacto XC40. Aún así, el resultado económico de Volvo se ha visto resentido, pues mercados como China están en declive. Por ello, ya estarían pensando qué hacer para expandir sus ventas y recuperar sus ganancias.
Volvo quiere un baby XC40 y un XC100 para acompañar al XC90
Volvo, siguiendo el camino que marca el mercado, estaría pensando en ampliar su gama todo camino. A día de hoy, excepto en ciertos mercados, los SUV´s parece que tienen cuerda para rato. Teniendo en cuenta que sus ventas, a nivel global, están sustentadas en este tipo de vehículos, no sería descabellada esta apuesta. Prueba de ello, es que Geely y las firmas subsidiarias que tiene alrededor, no dejan de desarrollar y presentar vehículos de este tipo.
Esta idea de expansión ha salido pública a la luz a través de una entrevista en Auto Express. El CEO de Volvo, Håkan Samuelsson, ha admitido que están estudiando incrementar su portfolio. Para ello, reforzarán aquellos segmentos donde están, evitando aventurarse en aquellos que desconocen y suponen un riesgo. Uno de los nichos más importantes es el de los SUV´s.