La semana pasada la terminรกbamos con la presentaciรณn del nuevo Mercedes GLA por parte del Grupo Itra. Entonces te hablamos de su diseรฑo, las principales diferencias frente al Clase A y su equipamiento, pero hasta ahora no habรญamos podido conducirlo. Es el momento de poner a prueba el GLA en un pequeรฑo contacto.
La gama mecรกnica, vimos entonces, se componรญa de mecรกnicas diรฉsel y gasolina, con transmisiรณn automรกtica y manual, ademรกs de tracciรณn simple o total 4Matic. Nosotros hemos probado el GLA 220 CDI 4Matic, como tope de gama en el abanico diรฉsel, y un motor que ya hemos probado en otros modelos compactos de la casa como el CLA.
GLA 220 CDI, potente y poco bebedor
El Mercedes GLA 220 CDI cuenta con un motor diรฉsel de 170 caballos, una potencia que, a priori, puede resultar elevada pero que no lo es tanto por comportamiento ni por consumo. A la hora de probar el Clase A, ya se notaba que los 109 caballos se quedaban cortos para este chasis. El GLA, con el mismo chasis y 170 resulta mรกs equilibrado.
Sin embargo, estos 170 caballos llegan extremadamente pausados. Es un motor muy lineal, sin picos de potencia palpables que nos avisen de su potencial. De hecho, para saber si de verdad estamos rodando rรกpido o no, tendremos que mirar el velocรญmetro constantemente, pues el motor no ofrece ese empuje que esperamos. Cuidado, correr, corre.
La caja de cambios se deja a un sistema automรกtico de doble embrague y 7 relaciones que trabaja de forma rรกpida. Como suele ocurrir con estos cambios, a muy baja velocidad no se muestran tan suaves como los de convertidor de par mรกs tradicionales, pero su uso es agradable y preciso, mรกs con las levas que hay tras el volante.
Una de sus mayores bondades es el consumo. A pesar de los 170 caballos disponibles bajo el pie derecho, el GLA 220 CDI parece haber firmado una nueva ley seca, realizando medias cercanas a los 6 litros en conducciรณn mixta. Tampoco pudimos realizar muchos kilรณmetros para dar fe de ello, pero nuestra prueba del CLA 220 CDI puede ser un buen ejemplo.
SUV y dinamismo, ยฟpueden convivir?
En la primera parte de nuestra toma de contacto describรญamos al Mercedes GLA mรกs bien como un compacto sobre elevado que como un SUV al uso. Una vez en marcha nos damos cuenta de que esta teorรญa cobra fuerza, al estar sentados y conducir prรกcticamente un Clase A.
No lo digo sรณlo por el interior, calcado a รฉste. Sino por la posiciรณn de conducciรณn. Apenas se eleva respecto al Clase A. aunque sรญ notamos algo mรกs de altura, y esto beneficia las sensaciones una vez decidimos ir algo alegres. La postura sigue manteniendo ese toque deportivo, y el comportamiento del coche asรญ lo afirma. En esta ocasiรณn dejamos atrรกs el paquete AMG y el chasis dinรกmico.
Si a la hora de probar el Clase A con estas dos opciones, decรญa que la suspensiรณn era exageradamente rรญgida, ahora tengo que hablar de equilibrio, ofreciendo nuestro GLA un nivel de confort elevado. Todo ello no se ve perjudicado por unos balanceos excesivos gracias, en parte, a una carrocerรญa que no se aleja demasiado en altura del mรกs compacto de la gama.
La direcciรณn es bastante directa y con una dureza justa. No transmite demasiado, pero es uno de los detalles mรกs agradables del GLA. Por otro lado, nuestra unidad equipa la tracciรณn total 4Matic, para minimizar las pรฉrdidas de adherencia cuando se detecten. Lo que no hemos podido hacer es sacarlo del asfalto para comprobar sus aptitudes off road, aunque Mercedes propone una suspensiรณn especรญfica para estos menesteres en aras de mejorar la capacidad todoterreno del coche.
En esta primera toma de contacto hemos quedado convencidos, pues, de la buena dinรกmica del Mercedes GLA, muy similar a la de cualquiera de sus hermanos. Ofrece una imagen diferenciada, mรกs robusta y, ademรกs, un pequeรฑo plus en confianza si decidimos realizar alguna escapada sencilla al campo.
Agradecimientos al Grupo Itra Mercedes-Benz por facilitarnos el coche de pruebas.