Esta semana probamos un modelo que ha sido clave en la historia del fabricante checo. El Skoda Octavia nació en 1996, y supuso el primer proyecto desarrollado Ćntegramente bajo el paraguas de Volkswagen. El resultadoĀ fue abrumador: en su primera generación (1996-2010) la marca vendió 1.442.126 unidades, convirtiĆ©ndose en el favorito de los trabajadores del transporte pĆŗblico por su extraordinaria habitabilidad, robustez mecĆ”nica y su precio.
Volviendo al presente y tras una segunda generación (2004-2013) que no hacia sino mejorar sus argumentos de compra, llegamos a 2013; aƱo en que la marca nos presentó la tercera generación del Skoda Octavia. En Actualidad Motor nos hemos decidido a probar esta nueva generación en su versión familiar, para comprobar si la āestrellaā checa sigue manteniĆ©ndose en forma en un segmento que se presenta cada vez mĆ”s complicado. Nos hemos decantado por el Skoda Octavia Combi,Ā con motor TDI de 150 CV.
DiseƱo sencillo y elegante
Tras echarle un vistazo y comparĆ”ndolo con su predecesor, el Octavia es un modelo bastante continuĆsta. Sin embargo, se trata de una āsecuelaā bastante lograda, destacando sus formas mĆ”s afiladas y deportivas, que dan lugar a un modelo mĆ”s atractivo. Gran parte de su atractivo se debe a contar con un diseƱo atemporal que combina sencillez y elegancia a partes iguales.
Los mayores cambios se centran en el frontal destacando la nueva parrilla, que se separa del capó y pierde el logo pasando a posicionarse en la ānarizā de Ć©ste. Los faros cambian notablemente, adquiriendo formas mĆ”s cortantes para darnos lugar esa mirada mĆ”s agresiva y moderna. El frontal se completa con una toma de aire mĆ”s grande y que ahora se une a los pilotos antiniebla de nuevo diseƱo.
De perfil se contemplan menos diferencias; las formas y lĆneas son ahora mĆ”s rectas, pero no presentan ningĆŗn cambio acusado. Desde esta vista podemos apreciar las bonitas llantas de 18ā opcionales, que le dan ese toque deportivo que rompe con la seriedad. En la zaga, Skoda continĆŗa los pasos del anterior modelo; cambian los faros levemente, que ahora cuentan con formas mĆ”s rectas pero siguen conservando la forma deĀ C enĀ su iluminación, el portón adquiere dos triĆ”ngulos ātridimensionalesā en sus extremos; recurso que la marca utiliza en otros modelos, y el paragolpes ahora incluye un pequeƱo difusor.
Si hablamos de sus medidas, el nuevo modelo ha crecido notablemente, dejĆ”ndole hueco de esta manera al Skoda Rapid, la reciente berlina compacta de la marca que tambiĆ©n hemos podido probar. Cuenta con las mismas medidas que la carrocerĆa berlina, con 4,66 m de longitud y 1,81 m de anchura, variando en sólo 4 mm su altura. ComparĆ”ndolo con su antecesor, tiene 9 cm mĆ”s de largo y 4,5 mĆ”s de ancho, mientras que su distancia entre ejes Ā ha aumentado casi 11 cm, quedĆ”ndose en 2,69 m lo que se traduce en una mejora en la habitabilidad, ya de por si bastante buena en la anterior entrega.
Ello se debe a la incorporación de la nueva y moderna plataforma modular MQB, utilizada ya en el grupo por modelos como el León, A3 o el Golf, lo que le concede ademÔs un peso bastante contenido dadas sus dimensiones. Pesa 1347 kilos, 63 kilos menos que su antecesor, a pesar del aumento de todas sus dimensiones.
Interior espacioso y funcional
Si pasamos al habitĆ”culo, hay que decir que el Octavia sigue con esa lĆnea continuĆsta ya vista en su exterior. Posee un interior tĆpico de la marca, aunque dando un paso bastante importante en cuanto a la calidad de los materiales y terminaciones. Todo nos resultarĆ” familiar, con ese estilo simple y conservador caracterĆstico de las producciones delĀ grupo VAG. Aunque es un interior que no apasiona, hay que decir que cuenta con un diseƱo limpio, lógico y con una disposición de sus mandos bastante acertada, para que podamos utilizar todos sus sistemas de manera fĆ”cil e intuitiva, por lo que objetivamente no se le pueden poner pegas.
Une vez sentados en el puesto de conducción, nos encontramos con unos asientos tapizados en cuero opcionales que se muestran bastante cómodos, recogen bien el cuerpo y se muestran ideales para realizar largos trayectos. El volante recibe ahora un diseƱo mĆ”s estilizado y cuenta con un tacto muy agradable ā opcionalmente se puede montar unĀ volante de tres radios muy similar al del VW Golf ā Dicho esto, las sinergias del grupo Volkswagen estĆ”n mĆ”s presentes que nunca en esta generación, que se acerca āpeligrosamenteā a los acabados, terminaciones y equipamiento que puede montar el Golf.
Alzamos la vista y nos encontramos con un cuadro de mandos que mantiene el diseƱo tĆpico de Skoda, destacando su facilidad de lectura y su completa información, gracias a la pantalla multifunción que nos ofrece mĆŗltiples datos (temperatura refrigerante, consumos desde la salida, Ćŗltimo repostaje, asistentes activadosā¦) y funciones que podemos modificar con los botones integrados en el volante. Pasando a la consola central, bajo las salidas de aire se encuentra el sistema multimedia, con pantalla tĆ”ctil de 5,8ā y sensor de proximidad, de funcionamiento bastante intuitivo y bastante completo en sus funciones, contando ademĆ”s con sistema de navegación Admundsen āĀ opcional.
MĆ”s abajo, nos topamos con el climatizador bizona, de buen funcionamiento y fĆ”cil de usar. Una pequeƱa guantera con tapa para dejar objetos y dos entradas para USB y toma auxiliar finalizan verticalmente la consola. A la derecha, nos encontramos con una guantera de buenas dimensiones, ventilada y donde se encuentra el cargador de cdās y dos entradas para tarjetas SD.
La consola central se completa con una barra de botones, con el cierre de las puertas, desactivación/activación del stop&start, sensores proximidad⦠que añade mÔs o menos botones según el equipamiento que tengamos, detalle que no agrada mucho visualmente en caso de que nos falten muchas funciones. MÔs adelante hay dos posavasos, uno de ellos con un soporte para dejar el móvil sin miedo a posibles golpes, y finalmente el reposabrazos, de generosas dimensiones en su interior y ajustable en longitud y verticalidad, sin duda un detalle a agradecer.
Sobre huecos portaobjetos y soluciones prÔcticas, hay que decir que este Octavia es un verdadero campeón, contando con múltiples huecos repartidos por el habitÔculo para dejar multitud de cosas y una serie de ideas prÔcticas, que la marca denomina soluciones Simply Clever. Elementos como el soporte multimedia, el cajón para dejar el chaleco reflectante bajo el asiento del conductor, el portatickets o el rascador de hielo ubicado en la tapa del depósito se tratan de ideas ingeniosas que se agradecen y nos hacen la vida a bordo mÔs fÔcil.
Sobre su habitabilidad, hay que decir que el Skoda Octavia Combi sale del examen con nota, pues goza de una excelente habitabilidad para 4 adultos. Delante, sin problemas. DetrÔs, cuenta con bastante espacio para dos ocupantes, tanto en altura como en espacio para las piernas. Su peor medida en sus cotas es la anchura a la altura de los hombros, lo que unido al pronunciado túnel de transmisión y reposabrazos central y a la dureza de su reposabrazos trasero, plantean un viaje con tres adultos detrÔs como una opción algo incómoda.
Excelente maletero
Dada la versión familiar Combi ante la que estamos, el maletero merece mención especial. Su extraordinario cubicaje de 610 litros le posiciona como uno de los mÔs capaces de su segmento. AdemÔs, el maletero presenta formas bastante cuadradas y una excelente boca de carga dada su baja altura con respecto al suelo y anchura. Numerosos ganchos para bolsas, argollas, cintas elÔsticas, trampilla en los asientos posteriores, toma de 12v, cajones a los lados para meter pequeños objetos⦠sin duda no echaremos nada en falta.
Sobre el maletero, hay que destacar dos elementos ingeniosos que son la bandeja enrollable de un golpe, o los cómodos elementos de sujeción situados en los cajones. Ā Se trata de dos tiras de plĆ”stico con velcro en su parte inferior, que se pueden colocar en cualquier parte del maletero formando un Ć”ngulo y que sujetan los objetos que carguemos evitando que se muevan por el piso durante la marcha; gran idea sin duda de la marca checa. Abatiendo los asientos, conseguiremos unos extraordinarios 1.740 litros, aunque los asientos no dejan una superficie plana. Bajo el piso, encontramos una rueda de repuesto de tamaƱo convencional. Por Ćŗltimo, la versión que probamos del Octavia Combi tenĆa el portón de accionamiento elĆ©ctrico, que se ofrece de manera opcional. Nos hace mĆ”s cómoda la operación de abrir y cerrar el portón, pero personalmente no la considero una opción indispensable.
Puedes encontrar mÔs información sobre el Skoda Octavia Combi TDI 150 CV en la parte de comportamiento dinÔmico y consumos y en el anÔlisis de precio y equipamiento.