Durante las últimas semanas, el nombre Yangwang U9 ha sonado con fuerza en Europa por razones muy concretas. Dos hitos firmados en Alemania que apuntalan su estatus entre los hiperdeportivos eléctricos. Por un lado, la versión U9 Xtreme ha alcanzado 496,2 km/h en la pista de Papenburg. Por otro, ha bajado de los siete minutos en el Nürburgring Nordschleife con un tiempo oficial de 6:59,157. Dos cifras que, más allá del espectáculo, sitúan a la marca de lujo de BYD en el escaparate global.
El proyecto no nace de un golpe de efecto de Chery, sino de una hoja de ruta técnica ambiciosa. La base es el Yangwang U9, un cupé eléctrico de cuatro motores montados sobre la plataforma e⁴. Al que la firma ha sumado una variante de tirada cortísima, U9 Xtreme (30 unidades), con arquitectura de 1.200 V y una puesta a punto específica para circuito que ha servido de lanzadera para los récords. Con todo, los más puristas (con mucha razón) ponen en duda sus récords mundiales aunque aún así, mola ¿No?
Qué es el Yangwang U9 y qué cambia en el U9 Xtreme…
El U9 “convencional” ya juega en las grandes ligas. Cuatro motores independientes, 1.287 CV declarados y 1.680 Nm permiten una aceleración de 0 a 100 km/h en 2,36 segundos. La velocidad máxima se limita electrónicamente a 300 km/h, aunque sin ese tope la marca asegura que puede superar los 390 km/h. La estructura combina fibra de carbono y materiales ligeros, y la batería LFP (Blade) de 80 kWh promete hasta 450 km de autonomía, con el conocido enfoque de BYD en seguridad y gestión térmica.
Sobre esa base, el U9 Xtreme añade un paquete radical. La marca habla de más de 2.900 CV gracias a cuatro propulsores capaces de girar hasta unas 30.000 rpm, gestión de par por rueda de alta frecuencia (más de 100 veces por segundo) y una suspensión DiSus-X revisada para sostener ritmos de circuito. A nivel aerodinámico, incorpora un capó con doble canalización, splitter y difusor de carbono y un alerón tipo cuello de cisne que maximizan la carga a muy alta velocidad.
Récords en clave europea…
La vuelta certificada en el Nordschleife, 6:59,157, la firmó el piloto alemán Moritz Kranz, especialista del trazado. Con ese crono, el U9 Xtreme se asentó como «coche eléctrico de producción» más rápido en Nürburgring y desbancó registros previos de rivales directos. El nuevo hito, que no ha sido validado con pruebas independientes, llega tras una cadena de marcas. El modelo ya había superado antes los 472 km/h y culminó en Papenburg con 496,2 km/h, dato que lo lleva entre los automóviles más veloces.
La elección de escenarios no es casual. Nürburgring y Papenburg son laboratorios a cielo abierto para validar aerodinámica, estabilidad y gestión térmica. El conjunto de neumáticos GitiSport e·GTR2 PRO, homologados para trabajar cerca de 500 km/h, y los frenos con pinzas de titanio y discos carbono-cerámicos completan un hardware claramente enfocado a la fiabilidad a ritmos extremos.
Tecnología de chasis y control: e⁴ y DiSus-X…
Más allá de los titulares, el U9 brilla por su control de movimientos. La plataforma e⁴ permite que cada motor actúe como un módulo independiente, clave para vectorizar par al milímetro. El sistema DiSus-X actúa sobre cada rueda con ajustes verticales individuales para contener cabeceo, balanceo y transferencia de masas en frenada y apoyo. El resultado es un coche que puede «bailar» y ejecutar maniobras muy poco comunes en un turismo, incluidas exhibiciones de giro sobre su eje en espacios reducidos.
El control electrónico llega donde la física manda. La vectorización de par a alta frecuencia, junto con la altura variable y una amortiguación con amplio rango de firmeza, busca mantener la pisada estable cuando la carrocería encaja cambios bruscos. Todo ello, combinado con la arquitectura de 1.200 V y la tasa de descarga de la batería tipo Blade (30C en especificaciones de competición), explica por qué el U9 puede repetir aceleraciones fuertes sin desfallecer.
Desarrollo y validación: de China a Europa…
El programa de pruebas se apoya en un centro de I+D que incluye una pista propia en Zhengzhou, concebida para validar conducción inteligente y dinámica extrema. Según la marca, el complejo —construido en 20 meses y operativo desde julio de 2025— dispone de trazados de asfalto, zonas off-road y elementos singulares como una rampa que figura en los Guinness, útiles para afinar sistemas de suspensión y control.
Las sesiones europeas han permitido cerrar la puesta a punto con métricas comparables y repetibles. El objetivo, explican, no es solo firmar un número llamativo, sino medir cómo responden tren motriz, aerodinámica y frenos en la franja de uso donde se baten récords, justo donde más castigados están neumáticos, pastillas y flujo de refrigeración.
Habitáculo y experiencia de uso…
En el interior, el Yangwang U9 apuesta por una atmósfera de cupé biplaza con un puente central que conecta consola y túnel, y una pantalla táctil vertical de 12,3 pulgadas. La postura es baja, con butacas de contorno marcado y soporte lumbar activo que aprieta en curva para sujetar mejor el torso. Las puertas de apertura superior refuerzan el dramatismo de un coche que no renuncia al show incluso en parado.
La ergonomía coloca los mandos de conducción al alcance, mientras el software orquesta los modos dinámicos, la altura y la rigidez de la suspensión. En conducción urbana o de paseo, el coche puede rodar con perfiles más amables, y cuando toca exprimirlo, el conjunto libera las capacidades de sus cuatro motores con una precisión difícil de encontrar fuera del territorio de los prototipos.
Precio, disponibilidad y encaje comercial en España y Europa…
En China, el Yangwang U9 se comercializa desde alrededor de 252.000 dólares, una cifra muy contenida para su rendimiento. La edición U9 Xtreme, limitada a 30 unidades, queda orientada a coleccionistas y uso en circuito. La marca ha avanzado la llegada de Yangwang a Europa, con el U9 como estandarte; la homologación, los setups específicos para carreteras europeas y los costes de importación marcarán su precio final, que previsiblemente será más alto que en su mercado doméstico.
En España, el interés es evidente por su doble gesta en Alemania y habrá que ver cómo resuelve la marca la red comercial, posventa y carga de alta potencia para un modelo con demandas energéticas tan singulares. En cualquier caso, su desembarco supondrá un revulsivo en el segmento de hiperdeportivos eléctricos, hasta ahora dominio de actores muy exclusivos. Si termina poniéndose a tiro en nuestro mercado, será uno de esos coches que obligan a replantear qué esperamos de un hiperdeportivo eléctrico.
Fuente – YANGWANG (Chery)
Imágenes | YANGWANG (Chery)