En la actualidad muchos de los automóviles del parque móvil Español, cuentan con un turbocompresor los famosos dci, TDI etc. Esta pieza mecÔnica ha sido una de las grandes evoluciones dentro de los motores térmicos, puesto que, permiten a motores de poca cilindrada obtener mayores potencias fÔcilmente, con sus consiguientes beneficios de impuestos y consumos.
El funcionamiento de un turbocompresor o turbo, es relativamente sencillo. Esta pieza aprovecha los gases de escape del motor, para mover una turbina. Esta turbina al ser movida por los gases anteriormente citados, crea aire limpio que es introducido en el cilindro mejorando la mezcla aire combustible.
Hasta el momento la teorĆa es fĆ”cil, y prĆ”cticamente todos los consumidores solo conocen que su motor es turbo y punto. Pero el turbo, necesita una serie de cuidados simples para que tenga una larga vida Ćŗtil de funcionamiento.
Solo es cuestión de 2 minutos al dĆa
Tanto cuando arrancamos, como cuando vamos a apagar el motor, es imprescindible mantener el motor encendido durante 1 minuto, esto hace que el aceite del motor lubrique el eje de la turbina antes de empezar su tarea, o justo antes de darla por finalizada.
Si esta lubricación no se da adecuadamente, la turbina empieza a tener holguras y agarrotamientos acabando en una crónica de muerte anunciada.
MƔs vale prevenir que curar
Debido a la gran democratización y proliferación de esta innovación tĆ©cnica, en el mercado existen inventos como el Turbo timer, que bĆ”sicamente consiste en un contador que mantiene el motor encendido durante un tiempo, aunque retires la lleve de contacto, esto hace que la turbina baje paulatinamente de revoluciones y mientras, sea lubricada adecuadamente, estos dispositivos pueden costar entre 30⬠y 100ā¬.
El turbo ha muerto
El principal sĆntoma de la rotura de turbo, es la perdida de potencia, ya que, deja de aportar su parte al motor, tambiĆ©n es posible que el tubo de escape expulse humo blanco a causa del aceite de lubricación que ha entrado en los cilindros.
Los precios de los turbos pueden oscilar entre los 300⬠y 1000⬠en coches generalistas, por eso, la factura del taller puede acabar fĆ”cilmente en 2000ā¬.
Los turbos son una gran pieza de ingenierĆa, que nos ha permitido mejorar de una manera notable el rendimiento de nuestros motores, con estos simples consejos conseguirĆ”s alargar la vida de tu motor y todos dejaremos de oĆr frases comoā¦prefiero un motor atmosfĆ©rico debido a que es mĆ”s fiable que uno turboalimentado.