Por mucho que muchos, en Rusia, quieran justificarlo: no hay guerra buena. El país euroasiático se ha embarcado en una suerte de «vendetta» contra todos aquellos a los que ellos consideran sus rivales. Y en medio de este desastre que estamos viviendo están las empresas que tenían fuertes intereses en este país. El sector del automóvil, como bien sabes, es uno de los que peor lo está pasando y fabricantes como Renault o Nissan lo han perdido casi todo.
Sí, porque el mercado del automóvil en Rusia se ha hundido y las sanciones económicas internacionales a su gobierno no lo ponen más fácil. De ahí que tanto la gala como la nipona hayan tenido que vender sus estructuras a sus «socios» rusos del NAMI. Y como reza el dicho «a río revuelto ganancia de pescadores», las autoridades del país han decidido aprovechar la tecnología que dejan sus antiguos «socios» para resucitar a Moskvich ¿Te suena?
Moskvich quiere fabricar hasta final de año 600 vehículos de los que 200 serán cien por cien eléctricos…
De Moskvich y su posible «resurrección» te hablamos hace semanas. Como te contamos era una firma que dio el adiós al mercado en el año 2002, aunque su «muerte» no se llevó a cabo hasta 2006 que fue cuando acabó todo el proceso de la banca rota. Pues bien, aprovechando que Renault ha dejado la fábrica de Avtoframos, ahora llamada «Moscow Automobile Factory Moskvich» el NAMI ruso aprovechará para reiniciar la actividad de la finada Moskvich.
Según Automotive News Europe, el alcalde de Moscú ha confirmado que los modelos de la marca rusa saldrán de la cadena de montaje a partir de diciembre de este año 2022. Según palabras de Sergei Sobyanin el plan es que para final de año hayan salido de la fábrica 600 vehículos de los que 200 serán eléctricos. Pero hay más, pues para el 2023 tendrían la intención de ampliar la producción hasta llegar a 50 mil unidades.
Y te preguntarás ¿Cómo tienen pensado hacerlo? Pues según Automotive News Europe hay dos vías. La primera será porque estarían ultimando un acuerdo comercial y tecnológico con el fabricante chino JAC Motors. Según parece les darán soporte técnico a través de la cesión de las plataformas, el diseño y toda la ingeniería. Y no solo eso ya que también estarían en conversaciones para que los chinos les faciliten las herramientas que necesita la fábrica.
En segundo lugar, porque Rusia estaría invirtiendo unos 5 mil millones de rublos que en dólares es unos 82 millones. Para ello, además, habrían contado con la connivencia de otro fabricante de vehículos y camiones del país: Kamaz. Habrá que estar al tanto de los movimientos de Moskvich porque su vuelta podrían «levantar mucho polvo». Y no solo eso, si la jugada les sale bien, que lo dudamos mucho, podría quedarles en nada…
Fuente – Automotive News