No cabe la menor duda de que el Dacia Duster es un producto realmente exitoso a nivel global. Sus datos de ventas y las buenas críticas de sus clientes durante todos estos años lo abalan, siendo un producto con un precio económico y con el equipamiento justo y necesario. No tiene florituras, pero tampoco pagas por ellas.
Como muchos de vosotros sabéis, a finales del pasado verano el SUV compacto de la firma rumano se renovó. Bueno, más bien se actualizó con restyling incorporando nuevos faros y pilotos, retoques en la estética de las llantas y en el interior se introducen mejoras en los asientos y en algunos mandos.
Pero pese a que tampoco cambia demasiado respecto al lanzamiento de la segunda generación en 2018, sigue siendo un producto con muchísima demanda en nuestro país. Tanto es así que la propia marca nos ha informado de que el en estos seis meses desde la presentación del restyling acumula nada menos que 10.000 pedidos. Sí, estamos hablando del mercado español, por lo que la cantidad es muy, muy alta.
Especialmente querido en zonas rurales
Comenta Dacia que el Duster a nivel de ventas particulares tiene compradores algunas particularidades. Por ejemplo, muchos de ellos practican deporte u otras actividades al aire libre, como el senderismo o montar en bicicleta. También buena parte son aficionados a los viajes.
Además, es un vehículo muy demandado por quienes viven fuera de las grandes ciudades españolas. Concretamente, según el estudio que nos comenta la firma automovilística, casi la mitad de sus ventas van a parar a clientes que residen en medios rurales, mientras que otro 30 % viven en ciudades pequeñas.
Ni que decir tiene, como se puede ver por las carreteras, que muchas flotas apuestan por este modelo cuando sus tareas se realizan parcialmente fuera del campo. Podemos destacar servicios públicos como Conserjerías de Medio Ambiente y privados como empresas con labores en ambientes rurales.