Como ya sabemos, en agosto del pasado año se concluyó la integración de Opel (Vauxhall) en el Grupo PSA. Desde ese momento el consorcio galo controla, además, sus principales centros productivos, pasando a estar bajo su mano el centro aragonés de Figueruelas. En esta planta, que cuenta con una capacidad productiva instalada de 480 mil unidades anuales se ensamblan los Corsa en 3 y 5 puertas, Mokka X y los nuevos Crossland X y Citroën C3 AirCross.
El veterano Opel Meriva cesó su producción en el pasado mes de marzo con 17.910 unidades en el trimestre. Del resto de modelos que quedan en la planta, se han fabricado 196.424 unidades del Corsa (3, 5 puertas y versiones a GLP y Autogas), 68.172 unidades del Mokka X, 62.885 unidades del Crossland X y por último, del Citroën C3 AirCross un total de 37.034 unidades. Por conjunto, de las líneas productivas que tiene Figueruelas han salido durante el pasado año un total de 382.425 unidades.
Esta cantidad representa un 6 por ciento más que lo fabricado en el año 2016. Además, el crecimiento de la producción en esta planta va por su quinto año consecutivo, por lo que cada vez está más cerca de acercarse al máximo de su capacidad productiva. Del volumen total fabricado, el 89 por ciento de las unidades han ido a parar a otros países, siendo los principales destinos Alemania, Bélgica, Francia, Italia y Reino Unido.
El restante 11 por ciento de lo producido se ha quedado en el mercado nacional, demostrando la buena marcha comercial de los Corsa, Mokka X y la buena acogida que han tenido los Crossland X y C3 AirCross. Con el modelo de Citroën, la planta de Figueruelas ha acogido por primera vez en su historia a un modelo de una firma diferente a Opel siendo el primer paso para la integración total de la casa del rayo en el consorcio francés.
Habrá que ver la evolución que tiene su producción en el año 2018, pues junto a Vigo, se posiciona como los centros productivos del Grupo PSA mejor aprovechados en Europa. Teniendo en cuenta su funcionamiento y la situación que vive el centro de Villaverde (en Madrid) no sería de extrañar que finalmente se vea damnificada y a medio plazo cierre sus puertas para trasladar su producción a alguno de estos dos centros.
Tiempo al tiempo.
Fuente – Opel