Intentar separar al sector del automóvil de la política es como querer tapar el sol con un dedo: imposible. Las marcas no dejan de ser empresas que, aunque buscan satisfacer necesidades del público, quieren ganar dinero. Sin él no tiene sentido su funcionamiento y por tanto es mejor cerrar y dedicarse a otra cosa. El mejor ejemplo lo tenemos en el Brexit y los problemas que está ocasionando a los fabricantes que tienen intereses en Reino Unido.
Si hacéis un poco de memoria, podéis recordar que días atrás os contamos que Honda está moviendo la manufactura del Civic de Reino Unido a Japón. Este es solo el primer paso, pues el fin último llegará cuando echen el cierre a la fábrica que tienen en Swindon. Ahora es la nueva generación del Nissan Qashqai el que podría verse en peligro, pues habrían surgido una serie de problemas que estarían retrasando su llegada.
El Nissan Qashqai será otro damnificado por el Brexit
Según varias fuentes, entre las que estaría el diario económico The Financial Times, el nuevo Nissan Qashqai se retrasaría por dos razones. En primer lugar la pandemia provocada por el Coronavirus, y sus consecuencias socio económicas, habrían retrasado el desarrollo y modificado las prioridades de la marca. En segundo lugar, por la elaboración de un plan de contingencia que salvara la inversión de Nissan.
Meses atrás la firma anunció que había comprometido para Sunderland 400 millones de euros en inversiones. Esta cantidad iría directa a la actualización de la cadena de montaje de donde sale el actual Qashqai. Por tanto, en caso de que Reino Unido no llegue a ningún acuerdo con la Unión Europea tendrán que buscar la forma de minimizar las posibles pérdidas por un posible traslado de la producción.