En las recientes jornadas Volvo de conducción segura he tenido la oportunidad de probar prácticamente toda la gama Volvo y sus novedades. Estas jornadas de conducción segura se realizan en el circuito del Jarama y en las distintas instalaciones que allí posee la escuela del RACE.
Se trataba de probar diferentes modelos Volvo en el circuito del Jarama, dando un par de vueltas con cada coche y siguiendo a un monitor del RACE. Los modelos probados fueron S60, V60, S80, V40, C70, con diferentes motorizaciones, como los diésel D3 (136cv), D5 (215cv), o los gasolina T5 (240cv) T6 AWD (304cv) en las versiones 60 y 80 y el motor de gasolina T4 (180cv) en el V40. La mayoría montaba cambio automático, y en tan corto recorrido no se pueden sacar muchas conclusiones… No obstante, todos se comportaron aceptablemente, sin grandes diferencias, con un gran paso por curva, aunque la diferencia la marcó la versión AWD,más por la tracción total que por la potencia, bajo mi punto de vista.
También pude probar en el circuito el control de velocidad constante adaptativo, que es el Cruise de toda la vida, con la particularidad de que se adapta a la velocidad del vehículo precedente, llegando a detenerse si es necesario y reanudando la marcha sin la necesidad de tocar un solo pedal. Una gozada para disfrutarlo en las grandes salidas de vacaciones y puentes con gran trafico y retenciones constantes.
La segunda prueba la hice con el nuevo XC90 y el XC60 en un circuito off-road que consistía en bajar una fuerte pendiente. Al XC90 hubo que controlarle con el freno; en cambio, con el XC60 utilicé el control de descensos que lleva incorporado, di la vuelta y subí esa fuerte pendiente (podéis observarla en la foto) para pasar una curva con inclinación lateral del 30%, que podéis apreciar en el vídeo (aunque no tiene nada que ver con la sensación que se tiene desde el interior…). Continué por un camino con grandes baches en el que el coche quedaba constantemente en equilibrio sobre tres ruedas. Es sorprendente el comportamiento de estos modelos en este terreno, pues corresponden al segmento SUV, pero se defienden con suficiente holgura en terrenos escabrosos.
Volvo ha rejuvenecido el XC90 con pequeños cambios estéticos y nuevos materiales, pero lo más llamativo es una aplicación móvil para estar en contacto con el vehículo aparcado a través de un teléfono inteligente iPhone o Android. Ello nos permite una serie de posibilidades como:
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Localizador del vehículo: se muestra la ubicación del vehículo en un mapa. También incluye una brújula digital que indica al conductor la dirección correcta.
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Arranque a distancia del calefactor: si el vehículo está equipado con calefactor de estacionamiento, el conductor puede ponerlo en marcha o programarlo por temporizador a través de la aplicación móvil.
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Tablero de instrumentos del vehículo: esta función permite que el conductor acceda a una amplia gama de información: nivel de combustible, distancia que se puede recorrer hasta que se vacíe el depósito, consumo medio de combustible, velocidad media, lectura del cuentakilómetros y lectura del contador parcial de viaje.
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Chequeo del vehículo: la aplicación móvil realiza una evaluación del “estado de salud” del vehículo y muestra información sobre las bombillas, el nivel de líquido de frenos, el nivel de refrigerante, el nivel de aceite del motor y la presión de aceite del motor.
Continuando con la prueba, realicé también un circuito en pista deslizante en el que pude comprobar el funcionamiento del control de tracción en diferentes circunstancias como suelo deslizante con agua, frenada con las ruedas de un lado sobre firme deslizante y las otras en seco para simular la presencia de hielo en el asfalto. ¡Hay que ver lo que hace la electrónica: te haces con el control del coche en diferentes circunstancias que hasta hace poco era inimaginables…!
Para finalizar probé el Sistema de Detección de Peatones con frenado automático completo, una tecnología que puede detectar si un peatón se mete en la carretera delante del coche. Si no respondes a tiempo, el coche puede avisar y activar automáticamente los frenos. Consiste en una unidad de radar integrada en la parrilla del vehículo, una cámara situada enfrente del espejo retrovisor interior y una unidad de control central. En caso de emergencia, recibes una advertencia sonora acompañada de una luz parpadeante que aparece en el parabrisas. Si no reaccionas a la advertencia y la colisión es inminente, se aplica automáticamente toda la potencia de frenado. El sistema puede detectar peatones de, como mínimo, 80 cm de altura evitando una colisión con un peatón a velocidades de hasta 35 km/h . A velocidades más elevadas, se reduce la velocidad del coche tanto como sea posible antes del impacto. ¡Una novedad sorprendente!
Esta prueba la realicé a 25 km/h contra un maniquí hinchable o contra un panel con el logo de Volvo, y es curioso… Si no sigues las indicaciones de mirar fijamente al velocímetro y levantas la vista, instintivamente tocas el freno. No obstante, si superas la prueba sin tocar el pedal, el vehículo se detiene solo con un fuerte frenazo. Si todo falla, hay una sorpresa: el nuevoVolvo V40 incluye un Airbag para Peatones (Pedestrain Airbag) incorporado en el capó (el primero del mundo), con el fin de suavizar las consecuencias si finalmente no se consigue evitar la colisión con un peatón.
En estos tiempos difíciles que afectan gravemente a las ventas de automóviles, Volvo ha incrementado en 2011 un 20% sus ventas a nivel mundial, con un significativo aumento en el mercado chino del 54 por ciento, ademas del 23 por ciento en EEUU, este ultimo siempre un solido mercado para Volvo. De esta forma, se ha convertido en la marca perteneciente al sector premiun que más ha crecido. Gran parte del éxito se debe a los nuevos modelos S60, V60 y XC60.
Volvo también apuesta por la electrificación como parte de la estrategia de la empresa para los próximos años. Lo hace en colaboración con Siemens para desarrollar conjuntamente tecnologías de tracción eléctrica, electrónica de potencia y tecnología de carga, así como la integración de esos sistemas en los Volvo C30 eléctricos. La producción del Volvo C30 eléctrico comenzó en 2011. El C30 actualmente tiene una autonomía de 150 kilómetros, con 110 cv de potencia, alcanzando una velocidad de 130 km/h y con un tiempo de recarga de 7 horas (desde una toma eléctrica normal de casa). La flota de 250 vehículos se alquila en régimen de leasing a los clientes de algunos países europeos y también están funcionando en programas de demostración en Suecia, Bélgica y China
Estas jornadas de conducción segura organizadas por la marca sueca, perteneciente al grupo chino Zhejiang Geely Holding, van dirigidas a clientes, personal de los concesionarios y prensa.
