Rolls Royce es una de las firmas que más tiempo requiere para lanzar, y actualizar, sus modelos. No es extraño, pues la inversión, plazo de desarrollo y estudios de mercado que ha de realizar son sumamente importantes. El mejor ejemplo lo tenemos en el que es, por tamaño, su modelo de acceso, el Rolls Royce Ghost. La primera generación, del actual Ghost, llegó al mundo en 2009, vestido en forma de un elegante prototipo, el 200EX.
Cuando el próximo Salón del Automóvil de Frankfurt abra sus puertas, habrán pasado diez años de ese momento. Una década de vida comercial, para un modelo, es mucho, pero el Ghost ha sabido aguantar estoicamente. Para ello, ha contado con dos actualizaciones, una aplicada en 2013 y otra, un año más tarde, en 2014. Sin embargo, su relevo generacional está a punto de ser oficial, y por tanto, Rolls Royce ha iniciado la despedida del actual.
El Rolls Royce Ghost lleva a la venta desde 2009
Para ello, los responsables de producto de la firma asentada en Crewe han creado una serie muy especial. Se denomina «Zenith Collection» y su producción está limitada a sólo 50 unidades. Sin embargo, no será una serie en la que unas cuantas unidades luzcan entre ellas unas características similares. En este caso, cada modelo será único, exclusivo, y para ello se han basado en el concept que le dio la vida, el 200EX.
En el exterior no habrá grandes cambios, aunque los clientes podrán elegir entre varios tonos a contraste para la carrocería. Los más destacados son: Bohemian Red con Black Diamond, Iguazu Blue con Andalusian White y Premiere Silver con Arctic White. Con todo, es en el interior donde más énfasis han puesto sus creadores. Uno de los elementos estrella es la placa conmemorativa que señala ante qué unidad, de las 50 disponibles, estamos presente.