La marca checa lleva varios días lanzando pequeñas píldoras a modo de anticipo de la versión eléctrica de su modelo urbano, producto que fue presentado en la tarde de ayer en Bratislava, ciudad donde se producirá. Nos referimos al Skoda Citigoe iV, la nueva variante eléctrica del coche más pequeño en comercialización de la compañía automovilística.
Pero antes de entrar de lleno con el urbanita cero emisiones, tenemos que contaros que Skoda ha creado una submarca denominada iV enfocada en la movilidad sostenible y donde, por supuesto, se incluirán todos los vehículos electrificados como este Skoda Citigoe iV (100 % EV) recién presentado o el nuevo Skoda Superb iV (híbrido enchufable), que también se dio a conocer en la tarde de ayer.
Con el lanzamiento de este Skoda Citigoe iV, la marca checa se adentra en la producción de coches eléctricos 124 años después de la fundación de la empresa. Será el primer coche eléctrico de Skoda, contando con una buena autonomía y prestaciones suficientes para un coche que pasará la mayor parte del tiempo en ciudad.
Este modelo recurre a una batería de iones de litio de 60 Ah, con una capacidad de 36,8 kWh según ha afirmado Skoda. Como es de esperar, dicha batería se ubica en el piso del vehículo. La autonomía es de 265 kilómetros según el ciclo WLTP, por lo que para los recorridos urbanos diarios será una cifra suficiente para no tener que cargar el vehículo durante varios días.
Respecto a las prestaciones, el Skoda Citigoe iV tiene un motor eléctrico en el eje delantero que es capaz de desarrollar 61 kW, es decir, 82 CV, y un par de 210 Nm. Esto le permite acelerar de 0 a 100 en 12,5 segundos, recuperar de 60 a 100 km/h en 7,6 y alcanzar una velocidad máxima de 130 km/h. Cifras modestas pero bastante lógicas para un coche que en condiciones normales no saldrá de la urbe.
Hay varias opciones para recargar la batería. Con un cargador rápido de corriente continua de 40 kW se necesita una hora para cargar el 80 % desde descargada totalmente usando un cable CCS. En un wallbox de 7,2 kW en corriente alterna, tarda 4 horas y 8 minutos en cargarse el 80 %. En una toma doméstica de 2,3 kW tendremos que esperar 12 horas y media.