La llegada de Slate Auto al sector de los vehículos eléctricos ha despertado gran interés entre los que buscan opciones más económicas y funcionales. La nueva marca yanqui, respaldado por inversores como Jeff Bezos y nacida en 2022, ha generado expectación con el lanzamiento de su primer modelo, una pick up eléctrica conocida como Slate Truck, cuya propuesta gira en torno a la simplicidad, la personalización y un precio lo más accesible posible.
Slate Truck se ha diseñado para romper con la tendencia actual de coches eléctricos muy caros y sobrecargados de tecnología innecesaria. El coche adopta un aspecto retro, muy sencillo y funcional, recordando a las clásicas pick up de los años 80 y 90, aunque incorpora funcionalidades y materiales actuales. Su planteamiento es claro: ofrecer un vehículo con todo lo imprescindible, eliminando elementos prescindibles, de modo que cada cliente pueda personalizarlo a su gusto y necesidades.
Una plataforma flexible y modular…
El Slate Truck parte de una base muy versátil. La carrocería puede configurarse fácilmente para pasar de ser una pick up con dos asientos a un SUV con capacidad para cinco ocupantes. Todas las versiones parten de la misma plataforma modular, lo que permite añadir o quitar asientos, instalar o retirar el techo sobre la caja, modificar puertas, incorporar diferentes acabados y crear un vehículo casi único para cada comprador.
Para el exterior, se apuesta por paneles ligeros y resistentes, fáciles de desmontar con herramientas simples, lo que facilita tareas de reparación o personalización. Además, la oferta de colores se basa en vinilos adhesivos (wraps) en lugar de pintura clásica, permitiendo cambiar el aspecto del coche siempre que el usuario lo desee.
Personalización a medida desde casa…
Uno de los puntos fuertes del modelo es la amplia gama de accesorios y configuraciones. Slate Auto ofrece más de 100 elementos opcionales que se pueden añadir individualmente o en packs. El fabricante quiere que el cliente adapte el vehículo totalmente a su estilo de vida, ya sea añadiendo tapicerías desmontables, barras para el techo, nuevas llantas, o incluso cambiando la funcionalidad del vehículo de pick up a SUV o fastback. Tanto la compra como la personalización pueden realizarse online, y el propio usuario tiene la opción de completar las modificaciones en casa siguiendo un manual paso a paso.
En el interior predominan los mandos físicos y la simplicidad. Se obvian las grandes pantallas táctiles o los complejos sistemas de infoentretenimiento. El usuario puede usar su propio teléfono o una tablet, acoplándolo fácilmente a un soporte universal que también sirve para gestionar el aire acondicionado y otras funciones. En cuanto a equipamiento de confort, la empresa apuesta por soluciones tradicionales como elevalunas manuales y controles sencillos, aunque se mantienen elementos importantes como el aire acondicionado, hasta ocho airbags y sistemas de seguridad activa como el frenado autónomo de emergencia.
Prestaciones y autonomía para el día a día…
En lo referente a la mecánica, Slate Truck permite elegir entre dos baterías, de 52,7 kWh y 84,3 kWh. La versión básica, con la batería menor, promete una autonomía de hasta 241 kilómetros y una potencia de unos 200 CV. La batería más grande consigue 386 kilómetros de autonomía aproximada. El sistema de propulsión es de tracción trasera, y el peso del vehículo ronda los 1.633 kg. Modelos similares con mecánicas híbridas o eléctricas están ganando terreno en el segmento.
El vehículo no está pensado para trabajos pesados, pero sí para un uso diario práctico y sencillo. Cuenta con una capacidad de carga notable de hasta 650 kilos y puede remolcar hasta 453 kilos. La aceleración desde parado hasta 100 km/h se sitúa en torno a los 8 segundos en las versiones más potentes, mientras que la velocidad máxima ronda los 145 km/h.
Precio y enfoque para un público amplio…
El precio de entrada se sitúa oficialmente por debajo de los 27.500 dólares, aunque con los incentivos fiscales actuales de Estados Unidos podría bajar incluso a los 20.000 dólares. Esta estrategia busca atender la demanda creciente de vehículos eléctricos económicos, especialmente entre familias con recursos limitados que hasta ahora no encontraban oferta suficiente en el mercado estadounidense.
Slate Auto ha decidido vender directamente a través de su página web, sin red de concesionarios físicos, apostando por acercar el producto y la personalización al usuario final. Además, la marca confía en que el coste de los accesorios se mantenga bajo, permitiendo a los compradores adaptar el coche sin salirse del presupuesto. El gran truco estará en que alrededor del modelo habrá una amplia variedad de accesorios que, esos sí, serán la gallina de los huevos de oro por su precio y originalidad por su concepto.
Fuente – Slate Auto
Imágenes | Slate Auto