Hyundai tiene claro que, para ser una firma creíble, ha de invertir en modelos deportivos. Cierto es que la percepción que el público tiene de ella no es la misma de hace dos décadas, pero no puede dormirse o se la llevará la corriente. Máxime cuando sus principales rivales no dejan de lanzar productos de corte deportivo para conquistar a los clientes más dinámicos. Así es que siguiendo esta estrategia acaba de presentar en sociedad al Hyundai i20 N.
Del Hyundai i20 N os hemos hablado varias veces. La tercera generación del utilitario llegó a nuestras vidas hace escasos meses y respecto a su predecesor el salto cuantitativo y cualitativo fue exponencial. Pero lo mejor de todo es que, por primera vez en su historia, puede mirar de tú a tú a rivales como el Volkswagen Polo. Por tanto, era de necios que sus responsables perdieran la oportunidad de ir a por su versión más picante. Y promete…
La impronta del Hyundai i20 N es deportiva y descarada
La última vez que tuvimos noticias del i20 N pudimos hablar de su estética. Gracias a la publicación de algunas imágenes dejaron al descubierto ciertos detalles de su fisonomía. Sin embargo hasta ahora no hemos tenido todo el material para juzgarlo. En todo caso, el equipo de diseño de la firma ha llevado a cabo un trabajo muy minucioso pues, sin llegar a caer en el barroquismo presenta formas y planos muy estudiados.
En líneas generales los trazos básicos de su fisonomía no varían apoyándose en el código Sensuous Sportiness. No obstante, cuenta con elementos que enfatizan su deportividad, como un paragolpes frontal con toma de aire más generosa. La parrilla presenta un patrón inspirado en una bandera a cuadro e instala el logo «N» en uno de sus extremos. Ya, en la zona baja tenemos un splitter acabado en tono rojo intenso.
Pasando al lateral, llega de un nuevo faldón que enfatiza la anchura del conjunto. Presenta la misma librea en rojo intenso vista en el frontal y como complemento cuenta con unas llantas de aleación de 18 pulgadas con el logo «N» en el central. Por último debemos hablar de la zaga. Aquí es donde encontramos el mayor número de cambios y entre los más importantes está el gran spoiler que corona el portón de acceso al maletero.
Está inspirado en el WRC y mejora la aerodinámica del i20 N. En la zona media hay unas ópticas oscurecidas que se parecen a un diamante. La zona baja está dominada por un paragolpes deportivo que integra un difusor. En él están la luz antiniebla triangular y una salida de escape doble en el lado derecho. Todo envuelto en seis tonos nuevos entre los que no falta el exclusivo azul Performance N y el techo negro Phantom opcional.
En el interior del i20 N se respira una deportividad sobria
De puertas adentro la deportividad del Hyundai i20 N mantiene el nivel con detalles en Performance Blue y techo en negro. Siguiendo la estela de sus rivales, evita caer en el exceso y se limita a introducir sutiles pinceladas. Como elemento principal cuenta con unos asientos deportivos exclusivos que integran el reposacabezas. A modo de complemento tenemos un volante, pomo del cambio y pedales deportivos en metal firmados por «N».
El cuadro de instrumentos digital y la pantalla central táctil presentan menús actualizados. Entre las novedades hay una zona roja LED variable, que varía según la temperatura del aceite del motor, y el indicador de sincronización de cambios, que muestra al conductor el mejor momento para cambiar de marcha. Por último los controles para manejar los diferentes modos de conducción (Normal, Eco, Sport, N y N Custom) están ubicados en el volante.
Sus 204 CV y 275 Nm de par nacen del bloque 1.6 T-GDi Turbo
Con todo, lo importante del Hyundai i20 N está bajo su piel. Para dar vida a esta versión los ingenieros han confiado en el conocido bloque gasolina turboalimentado 1.6 T-GDi. El rendimiento final, tras muchas especulaciones, se queda en los 204 CV y 275 Nm de par máximo, cifra que lo posiciona a la altura del Fiesta ST o Polo GTi. Pero lo mejor es que su peso final en báscula es de 1.190 kilos, situándose por delante de sus principales rivales.
Para su gestión el i20 N se asocia a una transmisión manual de 6 velocidades. Además puede incluir un diferencial de deslizamiento limitado mecánico (m-LSD) que emplea un engranaje de torsión mecánico. Gracias a esta combinación mejora el agarre en situaciones de máximo rendimiento y una aceleración de 0 a 100 kilómetros por hora de 6,7 segundos. Por su parte, la velocidad máxima, se queda en 230 kilómetros por hora.
El Hyundai i20 N estará disponible en Europa a partir de la primavera de 2021. Será entonces cuando conozcamos sus precios y posibilidades de equipamiento. Mientras, toca esperar aunque seguro que en Ford y Volkswagen ya están pensando cómo ponerle la zancadilla.
Fuente – Hyundai