El último plan estratégico que presentó Sergio Marchionne para Fiat Chrysler Automóbiles (FCA) lo dejaba claro: Lancia tenía los días contados. De esta forma asistimos a la desaparición sistemática de los modelos que formaban la gama de la firma, así como su salida por la puerta de atrás de los mercados donde aún estaban presentes (España uno de ellos). Sin embargo, Italia se ha convertido en el último bastión de la marca, pues el Ypsilon, su único modelo, aún se vende relativamente bien.
La última generación de este modelo llegó al mercado en el año 2011 y, a pesar del tiempo que ha transcurrido, los italianos lo siguen demandando con ganas. Basta saber que durante el pasado año se comercializaron un total de 65.663 Ypsilon en el país de la bota. Teniendo en cuenta esta demanda, y que por diseño y gama mecánica el urbano de Lancia se mantiene joven, no es de extrañar que en la marca pudieran estar pensando en darle un nuevo restyling de cara al próximo año.
Como ya sabemos, el Lancia Ypsilon no se actualiza desde el pasado año 2015, por lo que según la rumorología que hay en la red, le podría llegar un nuevo rediseño el próximo año para que su estampa aguante bien el paso del tiempo. Cuando la firma italiana se retiró de los principales mercados comunicó que el Ypsilon estaría a la venta en Italia mientras la demanda perdurase, por lo que si los clientes siguen interesados en él lo lógico es que lo sigan manteniendo vigente.
Esta información aún no ha sido comunicada por la marca de FCA, pero de ser cierta los cambios en en Ypsilon le podrían volver muy interesante. De esta forma, podría recibir un nuevo frontal, nuevos tonos de colores, un interior renovado y con mayor calidad y una profunda puesta al día en cuanto a tecnología de seguridad y de infoentretenimiento. Con todo, esta lógica es aplastante, pues la base está más que amortizada, la fábrica cubre su capacidad productiva y la firma no termina de desaparecer por los restos.
Aquí todos salen ganando, ¿no os parece?