El Grupo Toyota, con Lexus a la cabeza, se ha granjeado una de las mejores famas en el sector del automóvil en cuanto a tecnología híbrida. No obstante, en cuanto a tecnología de conducción autónoma parecía que se había quedado algo rezagada frente a sus principales rivales. Por esta razón, se han puesto manos a la obra para solucionar este problema y ocupar el lugar que les corresponde en el mercado.
La forma en que Toyota y Lexus han trabajado para crear su propia tecnología de conducción autónoma se ha llevado a cabo a través del desarrollo de varias Plataformas, sobre las que han asentado la tecnología para perfeccionarla poco a poco y a la misma vez reducir su tamaño hasta el mínimo posible. Actualmente esta plataforma va por su tercera generación y como otras veces se sigue alojando sobre un Lexus LS 600h.
La Plataforma 3.0 ha sido desarrollada por Toyota en el centro técnico que tienen en Nueva York y a partir del próximo mes de abril se comenzará a fabricar en pequeñas series para implantarla en otros modelos. Con esta medida buscan realizar más pruebas y perfeccionar su precisión y tamaño, pues también podría llegar a modelos de corte compacto.
La principal diferencia que hay entre la nueva Plataforma 3.0 respecto a su predecesora es que los principales radares que hay en el Lexus LS han reducido su tamaño, especialmente el radar Lidar que ahora ha visto dividido su trabajo en cuatro áreas para que sea más efectivo. Además, y como obligan las diferentes legislaciones para pruebas de vehículos autónomos, el Lexus LS de Toyota está provisto de dos volantes, para que el copiloto pueda tomar el control del vehículo en caso de ser necesario.
Esta nueva base, será presentada en los próximos días en el CES de Las Vegas, pues ahora no sólo es una de las exposiciones tecnológicas más importantes del mundo, sino que se ha convertido en el escaparate para que las marcas de coches muestren todo su poderío tecnológico. En este caso Toyota junto a Lexus van a aprovechar la situación para demostrar a Tesla y las demás rivales, que quieren su sitio.
Fuente – Lexus