El refranero español es muy prolijo y puntilloso con temas relacionados con las declaraciones o juramentos, como por ejemplo, «las palabras se las lleva el viento» o «donde dije digo, digo Diego». En todo caso, más de una vez los responsables de las marcas de coches han tenido que tragar sus palabras, pues la hemeroteca está ahí, tras ellos, acechando cual vampiro, para recordarles que en algún momento de su vida declararon o juraron algo, de lo que tiempo después dijeron lo contrario.
En este caso tenemos a Sergio Marchionne máximo responsable del Grupo FCA, y también de Ferrari, cuando dijo que la firma de deportivos italiana nunca tendría un SUV en su gama. Pues bien, parece que este coche está de camino y que ayudará a multiplicar por unos cuantos números, la rentabilidad de la firma. A Porsche le pasó algo similar, lo que pasa es que sus fanáticos le han perdonado todas y cada una de las pifias que ha ido cometiendo en los últimos años.
Sea como fuere, si la finalidad de tragarse sus palabras es salvar a su marca, sea bienvenida. La historia de McLaren es similar a la que ha seguido Ferrari hasta nuestros días, pues según varios responsables de la casa inglesa cada uno de los modelos que lanzan al mercado se ciñen a su historia y filosofía. En este caso, no se pueden contemplar los SUV´s ni todo caminos, pues se encuentran diametralmente opuestos por planteamiento y deportividad.
Según Dan Parry-Williams, Jefe de Diseño de McLaren, en la marca «todo tiene una razón», por lo que sus coches jamás podrán ser de este tipo, ya que los SUV´s no son especialmente deportivos y más cuando se les compara con un deportivo de alto rendimiento. Por ahora estas declaraciones se están manteniendo en firme, pues lo más parecido a un coche familiar que lanzará al mercado McLaren llegará de la mano del BP23 y contará con una configuración de asientos 1 más 2.
Habrá que ver cuánto tiempo pasa hasta que los números obliguen a la firma a bajar la cabeza y lanzar un SUV, o si por el contrario, a diferencia de Ferrari, Bentley, Lotus, Rolls-Royce o Aston Martin (entre otras) son la excepción que confirma la regla.
Fuente – McLaren