Conocemos los Mercedes Clase G del equipo Rumbo Zero para el Dakar Classic

Durante la tarde de ayer estuvimos conociendo al equipo Rumbo Zero, que competirá en la segunda edición del Dakar Classic. Esta presentación tuvo lugar en el concesionario Mercedes-Benz Madrid, y es que los tres pilotos y copilotos afrontarán los más de 7.000 kilómetros de prueba a los mandos de tres Mercedes-Benz Clase G matriculados en el año 1994.

Los participantes se enfrentarán a un exigente recorrido por el desierto de Arabia Saudí conocido como el Empty Quarter, con una extensión superior a la de Francia con sus más de 650.000 m2. Las dunas serán protagonistas indiscutibles y pondrán a prueba la habilidad de pilotos y navegantes tanto en la conducción como en la navegación, volviendo a los más fieles orígenes del espíritu aventurero de esta prueba.

Pese a que estos tres modelos ya tienen 27 años de edad, su estado es espectacular. El Mercedes Clase G es un coche mítico que históricamente ha destacado tanto por su fiabilidad como por sus aptitudes en terrenos muy complicados. Lógicamente, estos coches han sido preparados específicamente para el Dakar Classic mejorando sus capacidades e incrementando la seguridad de pilotos y copilotos.

Estos tres coches del equipo Rumbo Zero serán pilotados por Antonio Gutiérrez Quirós, Juan Carlos Ramírez y Enrique Mayor Morl, y copilotados por Luis Heras Rodríguez, Carlos Vento Sánchez y Xavier Romero Soler. Recordamos que el pasado año Antonio Gutiérrez y Luis Heras quedaron décimos en la Clasificación General, ganando además la última etapa.

Por último, es importante destacar que el Dakar Classic no es igual que las pruebas de velocidad. En la categoría Classic se juega con la regularidad, intentando conseguir las velocidades medias establecidas por la organización en cada tramo. De todos modos, esto no significa que sea menos divertido o emocionante, ni tampoco que se corra poco, como así nos comentaron los integrantes del equipo.

Para esta edición se han introducido algunos ajustes en el reglamento y la regularidad ya no será el único criterio de evaluación. En algunos tramos, que representarán en torno al 20 % del recorrido, únicamente se juzgará la navegación, sin tener en cuenta el tiempo empleado sino la habilidad para trazar el recorrido más corto