El lujo y la suntuosidad es algo intrínseco a todo lo que tiene que ver con la iglesia y sus círculos más cercanos. El Papa Francisco es la máxima autoridad eclesiástica a nivel mundial, y todos sabemos cual es su apuesta: los más desfavorecidos. No obstante, por mucho que el quiera cambiar la percepción que gran parte de la sociedad tiene sobre la iglesia, ésta arrastra una imagen que no se podrá borrar en su pontificado.
Fruto de esta imagen ocurren noticias curiosas como la que os traemos. Lamborghini, firma italiana allá donde las haya (aunque su capital mane de las arcas del todo poderoso grupo alemán Volkswagen), ha regalado al Papa Francisco un precioso Huracán puesto a punto por el departamento de personalización Ad Personam. Como seña de identidad, los responsables de la marca han dotado al Huracán con los colores de la Ciudad del Vaticano, esto es, blanco y dorado.
Dejando de lado las principales características que dotan de personalidad a este modelo, tenemos que recordar que su potencia oscila entre los 579 y los 610 cv fruto de un bloque V10 con 5.2 litros de cilindrada. Su precio en el mercado oscila entre los 203.625 euros de la versión LP 580-2 y los 230.096 euros de la LP 610-4 (puedes consultar su ficha aquí). Sin embargo, el Papa Francisco, tras aceptar y firmar gustoso su regalo, ha tomado una sabia decisión: subastar el coche.
Según el propio pontífice, las ganancias que se obtendrán con su subasta se destinarán para realizar obras de caridad y beneficencia. Entre los destinos que tendrá este dinero figuran una comunidad que ayuda a mujeres víctimas de la prostitución, reconstruir viviendas, edificios públicos y lugares de culto en la ciudad de Nineveh, en Iraq. Además, también habrá una parte del dinero para cooperar con dos asociaciones italianas que trabajan en África realizando operaciones quirúrgicas y apoyan a mujeres y niños.
La fecha elegida para la subasta es el 12 de mayo de 2018 y quien se encargará de llevar a cabo este trabajo será la casa especializada RM Sotheby. Desde aquí apoyamos esta loable iniciativa del Papa Francisco, felicidades!
Fuente – El Mundo